Uno de los presuntos delincuentes, era oriundo de Aguachica, y delinquía en el sur de Bolívar.
Dos supuestos extorsionistas, uno de ellos del Cesar fueron ultimados en momentos en que recibían tres de los diez millones de pesos que le exigían a un comerciante para no atentar contra su vida.
Según las autoridades, al ser enterados que no recibirían la plata completa, los presuntos delincuentes se molestaron y trataron de desenfundar sus armas de fuego, pero el comerciante fue más rápido y accionó primero su revólver que tenía en la pretina del pantalón.
Los presuntos delincuentes, según las autoridades del departamento de Bolívar, fueron identificados como Alexander Vergel, natural de Aguachica, Cesar y Jorge Echeverría Amaris, oriundo del municipio de Tiquisio, Bolívar, esta última localidad limita con este departamento.
El caso se registró en el sitio conocido como Los Portones, en jurisdicción de Tiquisio, hasta donde los delincuentes que se hacían pasar como integrantes de Las Bacrim, habían citado al comerciante Fernando Bertel para que hiciera entrega del dinero que le venían exigiendo desde hacía un tiempo, pero como ya estaba cansado de tantas llamadas a su celular, al teléfono fijo de su casa e inclusive por cartas, decidió jugársela a como diera lugar y fue solo a entregar parte del acuerdo.
Salió de su vivienda armado hasta sitio acordado para entregar los diez millones de pesos, pero solo logró reunir tres millones, para entregar el resto en otra oportunidad porque según narró, le fue difícil reunir cuantía la cuantía solicitada. Fue cuando se decidió y cuando los delincuentes iban atentar contra él disparó.
Los dos delincuentes quedaron tendidos en el suelo, el comerciante se retiró del lugar hasta llegar a la localidad, para informar de lo sucedido a la Policía, y estos a su vez se trasladaron al lugar de los hechos, para proceder a llevar a cabo la inspección y reconocimiento de los cadáveres y posteriormente los trasladaron en una lancha por el río Magdalena hasta la morgue de medicina legal y ciencias forenses del municipio de Magangué, Bolívar.
El comerciante, quien se entregó voluntariamente ante las autoridades, fue trasladado en la misma embarcación, para que rindiera declaraciones ante la Fiscalía Seccional Local.
Por Abdel Martínez Pérez
Uno de los presuntos delincuentes, era oriundo de Aguachica, y delinquía en el sur de Bolívar.
Dos supuestos extorsionistas, uno de ellos del Cesar fueron ultimados en momentos en que recibían tres de los diez millones de pesos que le exigían a un comerciante para no atentar contra su vida.
Según las autoridades, al ser enterados que no recibirían la plata completa, los presuntos delincuentes se molestaron y trataron de desenfundar sus armas de fuego, pero el comerciante fue más rápido y accionó primero su revólver que tenía en la pretina del pantalón.
Los presuntos delincuentes, según las autoridades del departamento de Bolívar, fueron identificados como Alexander Vergel, natural de Aguachica, Cesar y Jorge Echeverría Amaris, oriundo del municipio de Tiquisio, Bolívar, esta última localidad limita con este departamento.
El caso se registró en el sitio conocido como Los Portones, en jurisdicción de Tiquisio, hasta donde los delincuentes que se hacían pasar como integrantes de Las Bacrim, habían citado al comerciante Fernando Bertel para que hiciera entrega del dinero que le venían exigiendo desde hacía un tiempo, pero como ya estaba cansado de tantas llamadas a su celular, al teléfono fijo de su casa e inclusive por cartas, decidió jugársela a como diera lugar y fue solo a entregar parte del acuerdo.
Salió de su vivienda armado hasta sitio acordado para entregar los diez millones de pesos, pero solo logró reunir tres millones, para entregar el resto en otra oportunidad porque según narró, le fue difícil reunir cuantía la cuantía solicitada. Fue cuando se decidió y cuando los delincuentes iban atentar contra él disparó.
Los dos delincuentes quedaron tendidos en el suelo, el comerciante se retiró del lugar hasta llegar a la localidad, para informar de lo sucedido a la Policía, y estos a su vez se trasladaron al lugar de los hechos, para proceder a llevar a cabo la inspección y reconocimiento de los cadáveres y posteriormente los trasladaron en una lancha por el río Magdalena hasta la morgue de medicina legal y ciencias forenses del municipio de Magangué, Bolívar.
El comerciante, quien se entregó voluntariamente ante las autoridades, fue trasladado en la misma embarcación, para que rindiera declaraciones ante la Fiscalía Seccional Local.
Por Abdel Martínez Pérez