El río Guatapurí agoniza. EL PILÓN ha informado amplia y profundamente sobre su situación, su decadencia, su futuro incierto y lo que se debe hacer para que no se acabe esta fuente inagotable de vida. El Cabildo Abierto que convoca para mañana martes el Concejo de Valledupar se supone que tiene un fin noble, que […]
El río Guatapurí agoniza. EL PILÓN ha informado amplia y profundamente sobre su situación, su decadencia, su futuro incierto y lo que se debe hacer para que no se acabe esta fuente inagotable de vida.
El Cabildo Abierto que convoca para mañana martes el Concejo de Valledupar se supone que tiene un fin noble, que se espera no sea una oportunidad provechosa para pretensiones de aspiraciones políticas partidistas a la Alcaldía de Valledupar, o se convierta en un alboroto más que no tiene forma, conclusiones y visión frente a la problemática del río, del cual se lee y escucha que todo el mundo quiere, pero que cada vez está más sucio, más deforestado y contaminado, hasta el punto que diariamente se conocen más abusos por el uso de su caudal, y tampoco se tienen iniciativas de trascendencia de los ciudadanos para acompañar las acciones necesarias contenidas en los diagnósticos que las entidades competentes tiene sobre el mismo.
El Cabildo Abierto no debe ser un juego politiquero, ni el espacio para el exhibicionismo de algún líder gremial, político o social. El Cabildo Abierto es la reunión pública de los concejos municipales o de las juntas administradoras locales, en la cual los habitantes pueden participar directamente con el fin de discutir asuntos de interés para la comunidad, reglamentado por el Artículo 9 de la Ley 134 de 1994. En Colombia el Cabildo Abierto más recordado se realizó el 20 de julio de 1810, encabezado por el líder comunitario José Acevedo y Gómez, que pretendió la independencia del país desde esos años, pero la falta de unidad de criterios y fines comunes determinó que naciera la llamada ‘Patria Boba’.
En ese contexto, existe entusiasmo, pero también escepticismo por el Cabildo de mañana en beneficio del Guatapurí porque se espera que sus participantes (concejales y los ponentes que ya se inscribieron) propongan soluciones criticas realizables y proporcionadas a la capacidad presupuestal del municipio, Emdupar, Corpocesar e igualmente que el gobierno departamental con su Secretaría de Ambienten no sea indiferente en brindar el apoyo con su brazo financiero, como hasta ahora se ha visto para hacer otras obras menos importantes que la preservación del agua y la cultura ciudadana, necesaria para el logro de tales objetivos.
En Valledupar existen otras experiencias de cabildos abiertos para el tema de servicios públicos, que han quedado en nada, como el realizado para evaluar y buscar soluciones a la grave problemática que ha generado el pésimo servicio y los altos costos del servicio de energía que ofrece Electricaribe, y otro a la empresa Emdupar para abordar la privatización. Las conclusiones son que Electricaribe sigue igual, galopando con sus provechosos gananciales y Emdupar va rauda a la privatización.
La preocupación que sobre participación ciudadana exige el Cabildo Abierto es que en su escenario esté garantizada la palabra de las diferentes comunidades relacionadas con el Guatapurí, y estas sean coherentes con el grave problema ambiental de nuestro afluente y el fortalecimiento de la cultura ciudadana. ¿Qué va a pasar desde el nacimiento, la cuenca media y baja para escalonar prioritariamente las acciones correctivas y preventivas que permitan salvar el río? ¿Continuará siendo el balneario Hurtado una cantina pública, que genera todo tipo de contaminación?
El río Guatapurí agoniza. EL PILÓN ha informado amplia y profundamente sobre su situación, su decadencia, su futuro incierto y lo que se debe hacer para que no se acabe esta fuente inagotable de vida. El Cabildo Abierto que convoca para mañana martes el Concejo de Valledupar se supone que tiene un fin noble, que […]
El río Guatapurí agoniza. EL PILÓN ha informado amplia y profundamente sobre su situación, su decadencia, su futuro incierto y lo que se debe hacer para que no se acabe esta fuente inagotable de vida.
El Cabildo Abierto que convoca para mañana martes el Concejo de Valledupar se supone que tiene un fin noble, que se espera no sea una oportunidad provechosa para pretensiones de aspiraciones políticas partidistas a la Alcaldía de Valledupar, o se convierta en un alboroto más que no tiene forma, conclusiones y visión frente a la problemática del río, del cual se lee y escucha que todo el mundo quiere, pero que cada vez está más sucio, más deforestado y contaminado, hasta el punto que diariamente se conocen más abusos por el uso de su caudal, y tampoco se tienen iniciativas de trascendencia de los ciudadanos para acompañar las acciones necesarias contenidas en los diagnósticos que las entidades competentes tiene sobre el mismo.
El Cabildo Abierto no debe ser un juego politiquero, ni el espacio para el exhibicionismo de algún líder gremial, político o social. El Cabildo Abierto es la reunión pública de los concejos municipales o de las juntas administradoras locales, en la cual los habitantes pueden participar directamente con el fin de discutir asuntos de interés para la comunidad, reglamentado por el Artículo 9 de la Ley 134 de 1994. En Colombia el Cabildo Abierto más recordado se realizó el 20 de julio de 1810, encabezado por el líder comunitario José Acevedo y Gómez, que pretendió la independencia del país desde esos años, pero la falta de unidad de criterios y fines comunes determinó que naciera la llamada ‘Patria Boba’.
En ese contexto, existe entusiasmo, pero también escepticismo por el Cabildo de mañana en beneficio del Guatapurí porque se espera que sus participantes (concejales y los ponentes que ya se inscribieron) propongan soluciones criticas realizables y proporcionadas a la capacidad presupuestal del municipio, Emdupar, Corpocesar e igualmente que el gobierno departamental con su Secretaría de Ambienten no sea indiferente en brindar el apoyo con su brazo financiero, como hasta ahora se ha visto para hacer otras obras menos importantes que la preservación del agua y la cultura ciudadana, necesaria para el logro de tales objetivos.
En Valledupar existen otras experiencias de cabildos abiertos para el tema de servicios públicos, que han quedado en nada, como el realizado para evaluar y buscar soluciones a la grave problemática que ha generado el pésimo servicio y los altos costos del servicio de energía que ofrece Electricaribe, y otro a la empresa Emdupar para abordar la privatización. Las conclusiones son que Electricaribe sigue igual, galopando con sus provechosos gananciales y Emdupar va rauda a la privatización.
La preocupación que sobre participación ciudadana exige el Cabildo Abierto es que en su escenario esté garantizada la palabra de las diferentes comunidades relacionadas con el Guatapurí, y estas sean coherentes con el grave problema ambiental de nuestro afluente y el fortalecimiento de la cultura ciudadana. ¿Qué va a pasar desde el nacimiento, la cuenca media y baja para escalonar prioritariamente las acciones correctivas y preventivas que permitan salvar el río? ¿Continuará siendo el balneario Hurtado una cantina pública, que genera todo tipo de contaminación?