Oportunas y merecidas todas las inversiones que hoy hacen en Valledupar, con dineros de las regalías, mediante proyectos obtenidos por gestión de la Gobernación del Cesar, para favorecer el deporte departamental. Ya comenzaron las obras de construcción del nuevo estadio Armando Maestre Pavajeau, las del Parque Las Flores, ya están listos los diseños de arquitectura e ingeniería para la construcción, remodelación y adecuación de escenarios deportivos en la Villa Olímpica de Valledupar y se avecina la construcción del complejo de tenis.

Son todas grandes inversiones que fortalecerán el deporte cesarense y que potenciarán seguramente nuevas figuras en las diferentes disciplinas. Durante el fin de semana, el gobernador Luis Alberto Monsalvo anunció el cierre del Coliseo Cubierto ‘Julio Monsalvo Castilla’ por su frágil estructura y el peligro que representa, mientras terminan los estudios diagnósticos que permitirán el arreglo de este importante escenario deportivo.

Mientras todo esto sucede ¿qué pasará con los deportistas que utilizaban estos sitios para practicar su respectiva disciplina? Los atletas que tradicionalmente utilizan el estadio municipal son uno de los grupos que quedan en el aire. Aunque aún pueden hacerlo en el Armando Maestre, hasta que inicien las obras en la parte interna del estadio, no deja de ser un riesgo que los deportistas accedan a un sitio donde adelantan obras y hay movimiento de maquinaria.

Lo mismo sucede con los clubes de fútbol infantil, juvenil y de adultos que religiosamente asistían a la cancha del barrio Las Flores, que ahora que ha sido encerrado para el inicio de las obras, perdieron la dinámica de entrenamiento. Con todos los anuncios de inversión, la administración departamental ha explicado los planes para los deportistas durante las obras, pero no sobra recordarles que debe existir un plan de contingencia más estructurado, que lo conozca la ciudadanía para que los padres de familia, los deportistas, los entrenadores y la comunidad en general no queden en el aire, pensando que todo se paraliza, como ha sucedido en los últimos días.

Todavía no se define el municipio a donde se mudará el Valledupar Fútbol Club y aunque tienen su cancha privada para prácticas, es fundamental la decisión para que la afición también se prepare junto con el equipo para irse temporalmente al nuevo estadio a recibir a los visitantes de la B.

Los clubes de tiro que practicaban en el Coliseo Cubierto también son otros huérfanos, al igual que otras ligas que hacían sus prácticas allí. En fin, son varias obras y con ellas muchas las disciplinas deportivas que necesitan un plan B para continuar con sus prácticas. El Cesar pasa por un buen momento deportivo, hay inversiones, apoyo a los deportistas, dentro de poco contará con buenos escenarios, por lo tanto es justo que no se deje a los deportistas a la deriva.