Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 18 marzo, 2014

Para´o en la raya

Por supuesto que escribo también sobre cosas triviales. Además de las trascendentes. Zuleta, Cocha y el conjunto entregan una extraordinaria producción musical. Son catorce insuperables interpretaciones y un remate con bonustrack, sencillamente genial. Que te vaya bonito final sagaz y sorprendente. Voz portentosa al interpretar Para´o en la Raya. Y que decir al escuchar El […]

Boton Wpp

Por supuesto que escribo también sobre cosas triviales. Además de las trascendentes. Zuleta, Cocha y el conjunto entregan una extraordinaria producción musical. Son catorce insuperables interpretaciones y un remate con bonustrack, sencillamente genial. Que te vaya bonito final sagaz y sorprendente.

Voz portentosa al interpretar Para´o en la Raya. Y que decir al escuchar El Papa Upa de Ella. Lo mismo Amor mi primer Amor. Luna Primaveral rítmica y divertida. Váyase en Paz, asonante. Vuelve Gaviota recuerda los momentos de una voz inconfundible. Poncho señoreando en todos los tiempos musicales.

El nombre de las personas es el sonido más agradable para uno mismo. Es una regla de cómo ganar amigos e influenciar a los hombres, como lo señala Dale Carnegie. En el cosmos de la música vallenata, las menciones en las canciones tienen lecturas diversas y multisignificativas.
Zuleta incluye aproximadamente 90 nombres. Solo en una -Adiós mi Maye- no la inicia con tres o dos nombres. Luego intercambia en cada una de ellas dos o tres más. En la flor más hermosa referencia a dos mejores amigos: Álvaro Muñoz Peñalosa y Álvaro Morón Cuello. Este último ha debido ser (en todo momento) invariablementeinsustituible. ¡El que entendió, entendió!.

Para algunos la inclusión de menciones es poco elegante. Porque hay de todo como en botica. La selección por lo general es problemática. Se nombran unos que no debieron. Y se omiten otros que resultan imperdonables e inexcusables.

Zuleta en esa materia es impredecible. Y desde luego, no creo que cobre por ello. Eso jamás!!.Él reparte cariño, adelanta o hace pago de favores de todos los pelambres ora satisface vanidades.
Quien esto escribe esperaba estar en el universo de su cariño. Siempre pensé andar por los contornos de sus afectos. Y sobre todo en el introito de la canción. Porque en ese instante, ahora Zuleta selectiva y escalonadamente escoge a quien menciona y aprecia. Le ofrecía nuestra estima personal y profesional. Desde luego sin esperar nada a cambio. Perennemente en la legión zuletista. Sin aspavientos.

Alrededor de lo mismo, para muchos las menciones no son de categoría.Dependiendo las perspectivas casi que de pocoo nada linaje. Y de acuerdo el estrato social pareciera algo absolutamente baladí o un reconocimiento intrascendente. Otros se regocijan y les advierte superlativa importancia. En todo caso, si de veras se admira y quiere al intérprete, con la distinción por lo menos unoha de sentir que hay reciprocidad en los afectos.
En suma, el valor melódico de la interpretación es aporte inestimable a la manifestación inmaterial de la música vallenata. Subyace Zuleta por siempre.

Decisum. Estoy dolido, si. Ardido, también. Molesto, ídem. Empero, estaré para´o en la raya, porque hacia adelante no acepto que Zuleta mencione ni nombre. Ni mucho menos a Cecilia Leonor. No se atreva. Es que al escuchar a todos jamás se entenderá como en esta oportunidad no haber estado ahí. Luego no interesa.

Columnista
18 marzo, 2014

Para´o en la raya

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Hugo Mendoza

Por supuesto que escribo también sobre cosas triviales. Además de las trascendentes. Zuleta, Cocha y el conjunto entregan una extraordinaria producción musical. Son catorce insuperables interpretaciones y un remate con bonustrack, sencillamente genial. Que te vaya bonito final sagaz y sorprendente. Voz portentosa al interpretar Para´o en la Raya. Y que decir al escuchar El […]


Por supuesto que escribo también sobre cosas triviales. Además de las trascendentes. Zuleta, Cocha y el conjunto entregan una extraordinaria producción musical. Son catorce insuperables interpretaciones y un remate con bonustrack, sencillamente genial. Que te vaya bonito final sagaz y sorprendente.

Voz portentosa al interpretar Para´o en la Raya. Y que decir al escuchar El Papa Upa de Ella. Lo mismo Amor mi primer Amor. Luna Primaveral rítmica y divertida. Váyase en Paz, asonante. Vuelve Gaviota recuerda los momentos de una voz inconfundible. Poncho señoreando en todos los tiempos musicales.

El nombre de las personas es el sonido más agradable para uno mismo. Es una regla de cómo ganar amigos e influenciar a los hombres, como lo señala Dale Carnegie. En el cosmos de la música vallenata, las menciones en las canciones tienen lecturas diversas y multisignificativas.
Zuleta incluye aproximadamente 90 nombres. Solo en una -Adiós mi Maye- no la inicia con tres o dos nombres. Luego intercambia en cada una de ellas dos o tres más. En la flor más hermosa referencia a dos mejores amigos: Álvaro Muñoz Peñalosa y Álvaro Morón Cuello. Este último ha debido ser (en todo momento) invariablementeinsustituible. ¡El que entendió, entendió!.

Para algunos la inclusión de menciones es poco elegante. Porque hay de todo como en botica. La selección por lo general es problemática. Se nombran unos que no debieron. Y se omiten otros que resultan imperdonables e inexcusables.

Zuleta en esa materia es impredecible. Y desde luego, no creo que cobre por ello. Eso jamás!!.Él reparte cariño, adelanta o hace pago de favores de todos los pelambres ora satisface vanidades.
Quien esto escribe esperaba estar en el universo de su cariño. Siempre pensé andar por los contornos de sus afectos. Y sobre todo en el introito de la canción. Porque en ese instante, ahora Zuleta selectiva y escalonadamente escoge a quien menciona y aprecia. Le ofrecía nuestra estima personal y profesional. Desde luego sin esperar nada a cambio. Perennemente en la legión zuletista. Sin aspavientos.

Alrededor de lo mismo, para muchos las menciones no son de categoría.Dependiendo las perspectivas casi que de pocoo nada linaje. Y de acuerdo el estrato social pareciera algo absolutamente baladí o un reconocimiento intrascendente. Otros se regocijan y les advierte superlativa importancia. En todo caso, si de veras se admira y quiere al intérprete, con la distinción por lo menos unoha de sentir que hay reciprocidad en los afectos.
En suma, el valor melódico de la interpretación es aporte inestimable a la manifestación inmaterial de la música vallenata. Subyace Zuleta por siempre.

Decisum. Estoy dolido, si. Ardido, también. Molesto, ídem. Empero, estaré para´o en la raya, porque hacia adelante no acepto que Zuleta mencione ni nombre. Ni mucho menos a Cecilia Leonor. No se atreva. Es que al escuchar a todos jamás se entenderá como en esta oportunidad no haber estado ahí. Luego no interesa.