Ya inició en Valledupar el éxodo de los 23 mil usuarios de la EPS Solsalud que entró en liquidación, y ahora, a las puertas de la Secretaría de Salud y el HEAD esperan respuesta sobre dónde quedaron amparados.
Ruby Orozco se presentó el 5 de agosto al Hospital Rosario Pumarejo de López para confirmar la cirugía que tenía programada su hija de 9 años, que tiene una hernia umbilical desde que nació; al llegar al lugar le dijeron que la operación se había suspendido puesto que Solsalud había entrado en liquidación.
Como ella, otros confundidos usuarios del régimen subsidiado de la EPS Solsalud, se preguntaba en las puertas de la Secretaría de Salud Municipal, en qué entidad prestadora quedarían registrados ahora que su antigua empresa entró en liquidación por la Superintendencia Nacional de Salud.
En la oficina de registro de Salud Municipal, atendieron a 500 personas el pasado lunes y ayer martes al mediodía, 100 usuarios habían sido orientados; luego de la reunión de la entidad municipal con el Ministerio Público, se acordó una repartición equitativa de los usuarios entre las nueve EPS que funcionan en la ciudad.
De tal manera, en las oficinas de la Secretaría de Salud y también en el Hospital Eduardo Arredondo Daza, son los lugares hasta donde deben dirigirse los 23.670 usuarios de Solsalud en Valledupar y sus corregimientos, para conocer su suerte.
El Ministerio Público representado por la Procuraduría Provincial, Personería Municipal, Defensoría del Pueblo y la Secretaría de Salud, con la participación de las asociaciones de usuarios y las nueve EPS que funcionan en Valledupar, en una reciente reunión, determinaron dividir los usuarios de esta forma:
De los 23.670 usuarios de Solsalud, pasarán:
Comfacor – 2.453
Cajacopi – 2.237
Caprecom – 1.849
Dusakawi – 2.864
Salud Vida – 1.834
Coosalud – 3.437
Asmetsalud – 3.375
Barrios Unidos – 2.726
Comparta – 2.859
Según la Secretaría de Salud Municipal y el Personero Alfonso Campo Martínez, las EPS del régimen subsidiado deberán acoger a los usuarios y garantizarles la continuidad en el servicio, de tal manera, quienes tengan un tratamiento determinado, deberán continuar en el punto hasta donde lo atendió Solsalud, sin embargo el retraso es inevitable para los pacientes.
El Diario EL PILÓN conoció en la Secretaría de Salud, que las enfermedades como las de alto costo, tales como VIH y cáncer, fueron atendidas por las IPS hasta el pasado 6 de agosto, pero los tratamientos debieron ser reanudados por las nueve EPS que recibieron a los nuevos usuarios.
El personero Municipal, Alfonso Campo Martínez afirmó que, “hemos sido garantes de la distribución equitativa de los usuarios de Solsalud, a las nueve EPS del régimen subsidiado en Valledupar. Hasta el momento existen 81 acciones de tutela y 19 acciones de desacato en el sector salud”.
Puntos de vista
Maira Alejandra González, usuaria: “Mi hijo tiene un año y tres meses, tiene una posible osteomielitis, puede perder el brazo, me han perjudicado hasta ahora los médicos, y ahora esto empeora las cosas. Quedamos en Barrios Unidos”.
Dalgi Alfaro, usuaria: “Vine a apartar una cita y no sabía de esta situación, yo soy diabética, pero no están atendiendo, ahora solo están cambiando los carné y no sé dónde voy a quedar”.
Por Andrés Llamas Nova
[email protected]
Ya inició en Valledupar el éxodo de los 23 mil usuarios de la EPS Solsalud que entró en liquidación, y ahora, a las puertas de la Secretaría de Salud y el HEAD esperan respuesta sobre dónde quedaron amparados.
Ruby Orozco se presentó el 5 de agosto al Hospital Rosario Pumarejo de López para confirmar la cirugía que tenía programada su hija de 9 años, que tiene una hernia umbilical desde que nació; al llegar al lugar le dijeron que la operación se había suspendido puesto que Solsalud había entrado en liquidación.
Como ella, otros confundidos usuarios del régimen subsidiado de la EPS Solsalud, se preguntaba en las puertas de la Secretaría de Salud Municipal, en qué entidad prestadora quedarían registrados ahora que su antigua empresa entró en liquidación por la Superintendencia Nacional de Salud.
En la oficina de registro de Salud Municipal, atendieron a 500 personas el pasado lunes y ayer martes al mediodía, 100 usuarios habían sido orientados; luego de la reunión de la entidad municipal con el Ministerio Público, se acordó una repartición equitativa de los usuarios entre las nueve EPS que funcionan en la ciudad.
De tal manera, en las oficinas de la Secretaría de Salud y también en el Hospital Eduardo Arredondo Daza, son los lugares hasta donde deben dirigirse los 23.670 usuarios de Solsalud en Valledupar y sus corregimientos, para conocer su suerte.
El Ministerio Público representado por la Procuraduría Provincial, Personería Municipal, Defensoría del Pueblo y la Secretaría de Salud, con la participación de las asociaciones de usuarios y las nueve EPS que funcionan en Valledupar, en una reciente reunión, determinaron dividir los usuarios de esta forma:
De los 23.670 usuarios de Solsalud, pasarán:
Comfacor – 2.453
Cajacopi – 2.237
Caprecom – 1.849
Dusakawi – 2.864
Salud Vida – 1.834
Coosalud – 3.437
Asmetsalud – 3.375
Barrios Unidos – 2.726
Comparta – 2.859
Según la Secretaría de Salud Municipal y el Personero Alfonso Campo Martínez, las EPS del régimen subsidiado deberán acoger a los usuarios y garantizarles la continuidad en el servicio, de tal manera, quienes tengan un tratamiento determinado, deberán continuar en el punto hasta donde lo atendió Solsalud, sin embargo el retraso es inevitable para los pacientes.
El Diario EL PILÓN conoció en la Secretaría de Salud, que las enfermedades como las de alto costo, tales como VIH y cáncer, fueron atendidas por las IPS hasta el pasado 6 de agosto, pero los tratamientos debieron ser reanudados por las nueve EPS que recibieron a los nuevos usuarios.
El personero Municipal, Alfonso Campo Martínez afirmó que, “hemos sido garantes de la distribución equitativa de los usuarios de Solsalud, a las nueve EPS del régimen subsidiado en Valledupar. Hasta el momento existen 81 acciones de tutela y 19 acciones de desacato en el sector salud”.
Puntos de vista
Maira Alejandra González, usuaria: “Mi hijo tiene un año y tres meses, tiene una posible osteomielitis, puede perder el brazo, me han perjudicado hasta ahora los médicos, y ahora esto empeora las cosas. Quedamos en Barrios Unidos”.
Dalgi Alfaro, usuaria: “Vine a apartar una cita y no sabía de esta situación, yo soy diabética, pero no están atendiendo, ahora solo están cambiando los carné y no sé dónde voy a quedar”.
Por Andrés Llamas Nova
[email protected]