El cambio de becas Fedescesar a financiación condonable es un tema que suscita opiniones encontradas en la comunidad estudiantil de la Universidad Popular del Cesar, UPC. Mientras que un grupo está en total desacuerdo con la modificación, por lo que decidieron irse a paro; otros difieren de algunos puntos del proyecto de la ordenanza, pero no ve con buenos ojos el cese de actividades académicas.

El primer ‘bando’ lo lidera la representante de los estudiantes ante el Consejo Superior de la UPC, Rosy Cotes Cortes; el segundo está conformado por la Mesa Amplia Estudiantil, MAC; y una ‘tercería’ de jóvenes estudiosos de las leyes colombianas.
Los de la MAC consideran que cualquier tipo de paro debe hacerse con todos los beneficiarios de las becas Fedescesar y no con un porcentaje mínimo de estudiantes, recordando que esta medida no es un fin en sí mismo, sino un medio y la herramienta ulterior de lucha del movimiento estudiantil.  Ellos invitan a que se continúe el proceso de asamblea permanente.
Los de la ‘tercería’ discrepan con un paro, argumentando que no se ha cumplido el debido proceso, teniendo en cuenta que la Asamblea les ha abierto las puertas para el debate y la socialización de la iniciativa.
Ricardo Mejía, estudiante de Derecho, quien forma parte de este grupo, manifestó que del proyecto se debe rescatar el incremento presupuestal para las becas y el incentivo adicional por el promedio, pero difieren en la financiación condonable, donde se habla de un pagaré como requisito para devolver los saldos por valor de matrícula.
Por su parte, Manuel Quintero, estudiante de Administración de Empresas, le causa inquietud el fondo al que irían los recursos de las becas Fedescesar, puesto que en el proyecto hablan de que se dirigen a las arcas de la Gobernación, sin especificar su destino.
Luis Fernando Padilla Pérez, estudiante de Derecho,  se refirió al artículo noveno, inciso tercero, que habla del operador, “donde se autoriza al Gobernador suscribir convenios con entidades públicos o sin ánimo de lucro para que sean los administradores de Fedescesar, lo que es nocivo, porque se buscaría la rentabilidad de los recursos de este Fondo”.

RECUADRO
Departamento explica la iniciativa
Frente a esta situación,  la Administración Departamental insiste en que  lo único que busca es beneficiar a estudiantes de pocos recursos y que tengan un buen promedio.
De acuerdo al gobierno de Monsalvo Gnecco, un concepto de la Contraloría Departamental (que indica que "no se pueden destinar recursos de regalías a becas de educación superior y, en caso de hacerse, podrán otorgarse en calidad de  'créditos educativos’, a personas de escasos ingresos económicos para el ingreso y permanencia en instituciones de educación superior") motivó el ajuste del reglamento de Fedescesar. 
De esta manera, la Administración reemplaza el término 'becas' por 'financiación condonable' y establece la firma de un compromiso de pago que, para la mayoría de estudiantes -de acuerdo a una misiva entregada por la Gobernación- jamás se hará efectivo, puesto que la única razón para devolver el dinero del semestre cursado será cuando el estudiante abandone  la universidad sin presentar una certificación de motivo  fuerza mayor.
El documento también plantea que las modificaciones propuestas a la ordenanza que reglamentan a Fedescesar asignan más recursos, así como nuevos beneficios para los estudiantes,  que recurren a este organismo para poder financiar sus estudios superiores.

“Jóvenes pertenecientes a los niveles del Sisbén 1, 2 y 3, población vulnerable, víctimas del conflicto armado interno, población afrocolombiana y discapacitados, tendrán prioridad en la asignación de cupos; así mismo, la nueva ordenanza permitirá aplicar  mínimo el 10% de los recursos de Fedescesar para estudiantes de  primer semestre, lo cual en el pasado no se realizaba”, explicó el gobernador Luis Alberto Monsalvo.

ANNELISE BARRIGA RAMIREZ
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