• Un nuevo incendio se registró  al mediodía de ayer, esta vez por cuenta de un grupo de muchachos que comercializan los cables que llevan por dentro las llantas. Los jóvenes le prendieron fuego a unas 200 llantas que se encontraban en un lote ubicado en el  antiguo Idema,  pero debido a la sequedad del terreno y a la alta temperatura,  las llamas se propagaron desencadenando un incendio que ameritó la presencia del Cuerpo  de Bomberos Voluntarios de Valledupar.

Las llamas se prolongaron por más de dos horas, poniendo en peligro el sector debido  a que en esa zona tienen presencia dos estaciones de gasolina. A estos hechos se suma que durante la conflagración  se pudo constatar además,  que las llantas estaban llenas de agua, lo que se constituye en una bomba de tiempo debido a que estos elementos son criaderos del mosquito transmisor del dengue.

La secretaria de salud del municipio Eloisa Tamayo Arguelles dijo que los llanteros de la ciudad,  han convertido este sitio en un botadero de llantas e inservibles. “Están evadiendo la responsabilidad que les corresponde en el manejo de estas llantas para evitar la propagación del dengue y lo que quieren es que les recojamos las llantas en sus negocios”, denunció la funcionaria.

Tamayo Arguelles afirmó que dentro de las estrategia de control del dengue está la recolección de estas llantas para esto le hizo un llamado a Interaseo para que ayuden a la recolección de este material.

Por otra parte, las autoridades  estudian la forma de sancionar a  los dueños de las llanterías,  ya sea con la figura del comparendo ambiental, teniendo en cuenta los graves daños ambientales que ocasionan estos incendios o por la responsabilidad que les corresponde en esta emergencia que vive la ciudad con  la propagación del dengue hemorrágico.

En los últimos días se han registrado más de 10 incendios, ocasionados en parte por pirómanos. Esas conflagraciones se han registrado en zonas rurales y urbanas de la ciudad, afectando la capa vegetal y el terreno.

Recomendaciones 

La jefa de la cartera de salud recomendó a la comunidad en general  y a los dueños de las llanterías,  hacerle orificios o partir las llantas  por la mitad  para que el agua no se estanque y evitar así la propagación de la enfermedad.