Todos los que vivíamos en Valledupar y somos usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado, creíamos que una nueva realidad se palparía con la llegada de un hombre de estrato popular, sensible a la realidad social de la comunidad y a la vez conocedor como pocos de todo cuanto afectaba la población y su empresa emblemática como lo es Emdupar.
Por: Nurys Pardo Conrado
Todos los que vivíamos en Valledupar y somos usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado, creíamos que una nueva realidad se palparía con la llegada de un hombre de estrato popular, sensible a la realidad social de la comunidad y a la vez conocedor como pocos de todo cuanto afectaba la población y su empresa emblemática como lo es Emdupar. Fue una utopía, el matrimonio que se dio entre Fredys Socarrás Reales y el sindicato de trabajadores de la empresa, muchos creímos que la cosa iba a cambiar, lamentablemente todo fue efímero; comenzando por que al oír las críticas a la nómina paralela que según se creía estaba dándose en la empresa esto iba a terminar.
El Sindicato indica a la fecha que se varió, pero de nombre la figura, hoy se están dando según ellos, asesorías e interventorías costosas e innecesarias para pagar favores políticos, pero lo peor no es eso, hay algo más, indican que son inoperantes e improductivos.
Con todo y lo anterior, Sintraemsdes, su directiva Valledupar no ha sido mudo y con todo el derecho que le asiste, ha hecho graves reparos al asunto, dejando en claro, que el mandamás municipal dentro de la autonomía que maneja al interior de la empresa, cayó en un grave error al llevar a cabo una restructuración en sus estatutos, abriendo una brecha para cambiar el carácter público de esa entidad y que indica terminará en privatización, medida esta que no solamente ha incomodado a esta directiva sino a la población en general, si esto sucede, mucho dinero llegará a la empresa de particulares aunque se haga creer otra cosa, y si es así, quedaríamos sin algo representativo que aunque no se crea, distingue a esta ciudad como una de las cuentan con mejores servicio en este orden.
Hoy el sindicato, el alcalde y quien dirige la empresa no se pueden ver, acusaciones van por un lado y sindicaciones fluyen del otro, hasta al punto de llegarse a decir, que las directivas y quienes las siguen, pretenden beneficios particulares y no generales, mientras tanto los sindicalizados se defienden y conceptúan que el bien común está por sobre todas las cosas, así lo dejan ver cuando solicitan pruebas al respecto y estas no aparecen, sin embargo, han indicado que solamente en viáticos para personal de alto calado ejecutivo y administrativo se han gastado ciento treinta y dos millones de pesos, y a dos profesionales venidos desde la ciudad de Bogotá ciento sesenta millones de pesos más para que defiendan la empresa a nivel de Ministerio, comisiones y Superintendencia, sin embargo, han encontrado y esto es de conocimiento general, que muchas han sido las sanciones a que se ha hecho merecedora la empresa, sin demostrar que esto se haya pagado o no.
Con respecto al cambio de estatuto todo indica que el sindicato ya inició acciones jurídicas para dejar sin efectos los cambios dados en la norma interna, que al parecer es lesiva a todo trance, porque la empresa como venía funcionando estaba bien y aunque se sindicó algunas vez de ser la caja menor de las administraciones, no es poco lo que ha cambiado, según versiones dadas lo que se hizo fue sustituir los nombres más no el obrar, hasta hoy la noticia es que al interior de la empresa se está estructurando un bufete de abogados para seguir defendiéndola, cuestión está que le costará una millonada más y que de seguro saldrá de lo que aportamos los vallenatos por el pago del servicio, siendo así se deberá salir de aquellos que han venido de otros lugares, porque esos lo que hacen es ganar el dinero acá e invertirlo allá, cuando sabemos que esa es una tarea para pagar favores a quienes desde lejos respaldan con financiaciones a los candidatos en campaña.
Ahí está el toro en el redondel, sólo falta que suene la música en el palco para que bestia y hombre se enfrenten con toda intrepidez y al fin y al cabo salga alguien derrotado, que aquí en este caso es el pueblo, pleito que no vemos con muy buenos ojos, porque de darse esto terminaríamos con una empresa quebrada, sin los servicios y con una nefasta recordación de algo que se prometió defender y desde ningún punto se ha hecho, lo que afirma el sindicato y que están dispuesto a probar.
Nuris Pardo Conrado
Todos los que vivíamos en Valledupar y somos usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado, creíamos que una nueva realidad se palparía con la llegada de un hombre de estrato popular, sensible a la realidad social de la comunidad y a la vez conocedor como pocos de todo cuanto afectaba la población y su empresa emblemática como lo es Emdupar.
Por: Nurys Pardo Conrado
Todos los que vivíamos en Valledupar y somos usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado, creíamos que una nueva realidad se palparía con la llegada de un hombre de estrato popular, sensible a la realidad social de la comunidad y a la vez conocedor como pocos de todo cuanto afectaba la población y su empresa emblemática como lo es Emdupar. Fue una utopía, el matrimonio que se dio entre Fredys Socarrás Reales y el sindicato de trabajadores de la empresa, muchos creímos que la cosa iba a cambiar, lamentablemente todo fue efímero; comenzando por que al oír las críticas a la nómina paralela que según se creía estaba dándose en la empresa esto iba a terminar.
El Sindicato indica a la fecha que se varió, pero de nombre la figura, hoy se están dando según ellos, asesorías e interventorías costosas e innecesarias para pagar favores políticos, pero lo peor no es eso, hay algo más, indican que son inoperantes e improductivos.
Con todo y lo anterior, Sintraemsdes, su directiva Valledupar no ha sido mudo y con todo el derecho que le asiste, ha hecho graves reparos al asunto, dejando en claro, que el mandamás municipal dentro de la autonomía que maneja al interior de la empresa, cayó en un grave error al llevar a cabo una restructuración en sus estatutos, abriendo una brecha para cambiar el carácter público de esa entidad y que indica terminará en privatización, medida esta que no solamente ha incomodado a esta directiva sino a la población en general, si esto sucede, mucho dinero llegará a la empresa de particulares aunque se haga creer otra cosa, y si es así, quedaríamos sin algo representativo que aunque no se crea, distingue a esta ciudad como una de las cuentan con mejores servicio en este orden.
Hoy el sindicato, el alcalde y quien dirige la empresa no se pueden ver, acusaciones van por un lado y sindicaciones fluyen del otro, hasta al punto de llegarse a decir, que las directivas y quienes las siguen, pretenden beneficios particulares y no generales, mientras tanto los sindicalizados se defienden y conceptúan que el bien común está por sobre todas las cosas, así lo dejan ver cuando solicitan pruebas al respecto y estas no aparecen, sin embargo, han indicado que solamente en viáticos para personal de alto calado ejecutivo y administrativo se han gastado ciento treinta y dos millones de pesos, y a dos profesionales venidos desde la ciudad de Bogotá ciento sesenta millones de pesos más para que defiendan la empresa a nivel de Ministerio, comisiones y Superintendencia, sin embargo, han encontrado y esto es de conocimiento general, que muchas han sido las sanciones a que se ha hecho merecedora la empresa, sin demostrar que esto se haya pagado o no.
Con respecto al cambio de estatuto todo indica que el sindicato ya inició acciones jurídicas para dejar sin efectos los cambios dados en la norma interna, que al parecer es lesiva a todo trance, porque la empresa como venía funcionando estaba bien y aunque se sindicó algunas vez de ser la caja menor de las administraciones, no es poco lo que ha cambiado, según versiones dadas lo que se hizo fue sustituir los nombres más no el obrar, hasta hoy la noticia es que al interior de la empresa se está estructurando un bufete de abogados para seguir defendiéndola, cuestión está que le costará una millonada más y que de seguro saldrá de lo que aportamos los vallenatos por el pago del servicio, siendo así se deberá salir de aquellos que han venido de otros lugares, porque esos lo que hacen es ganar el dinero acá e invertirlo allá, cuando sabemos que esa es una tarea para pagar favores a quienes desde lejos respaldan con financiaciones a los candidatos en campaña.
Ahí está el toro en el redondel, sólo falta que suene la música en el palco para que bestia y hombre se enfrenten con toda intrepidez y al fin y al cabo salga alguien derrotado, que aquí en este caso es el pueblo, pleito que no vemos con muy buenos ojos, porque de darse esto terminaríamos con una empresa quebrada, sin los servicios y con una nefasta recordación de algo que se prometió defender y desde ningún punto se ha hecho, lo que afirma el sindicato y que están dispuesto a probar.
Nuris Pardo Conrado