Son tres períodos de sesiones ordinarias que duran dos meses cada uno, además de las extraordinarias y las especiales, lo que mantiene gran parte del año a los Concejales debatiendo temas de interés general, y aunque no se tiene estadística exacta de la utilidad y el resultado favorable de los debates, algunos de ellos sobresalen, […]
El convenio entre la administración municipal y la Diócesis de Valledupar fue firmado, los calendarios académicos han iniciado en las fechas que corresponden y el personal docente, al igual que el administrativo, está a disposición. Este es el resultado de la voluntad de las partes, por lo menos al iniciar el 2013. Sin embargo, hay que resaltar que fue un acalorado debate en el Concejo de Valledupar, lo que dio pie a los resultados que hoy se presentan.
El pasado 16 de noviembre, el concejal Ricardo Vives presentó un informe amplio y revelador acerca de lo que estaba pasando con la educación rural. En este debate hizo presencia la interventora del contrato ejercida en la Secretaría de Educación Municipal; también asistieron docentes rurales y el rector Miguel Suárez, como representante de la Diócesis de Valledupar, quien dijo que el informe del edil estaba incompleto.
Son cerca de dos mil 500 millones de pesos, los que financiarán la educación rural en Valledupar, según el convenio firmado en este año. En el debate de control político de noviembre pasado, se cuestionó el costo que según el promedio del registro del Sistema de Matrículas debe tener, esto es dos mil 324 millones, pero el contrato indicaba dos mil 867 millones de pesos, superando el cálculo y el costo que el Ministerio de Educación establece.
La discusión del 16 de noviembre, en período de sesiones ordinarias, dio como resultado un acuerdo por parte del interventor del contrato, para revisar detalladamente el informe presentado por el concejal Vives, para dar cumplimiento a los principios básicos de la calidad educativa en zonas rurales de Valledupar; son 16 escuelas en las que cerca de 11 mil estudiantes han sido matriculados este año, y la cifra podría llegar a 12 mil.
Pasaron dos meses hasta la renovación del convenio que debe garantizar la alimentación de calidad, de igual manera el transporte, la vigilancia, el aseo, entre otros aspectos.
Son 130 los maestros que hacen parte del convenio, que deben estar capacitados según los compromisos adquiridos por la Diócesis durante varios años, lo que exige el Ministerio de Educación y debe vigilar la interventora, y lo que se reafirmó mediante debate de control político.
Monseñor Óscar José Vélez Isaza, Obispo de la Diócesis de Valledupar, aconsejó a los docentes abstenerse de presentar documentación falsa, debido a que no solo el operador del contrato y los directores de núcleo revisarán con rigurosidad, también remitirán cualquier fraude a la Fiscalía General, para que la entidad tome las medidas respectivas.
Por otra parte, el debate de control político del concejal Vives, evidenció una realidad acerca del personal que estaba educando a los niños de las escuelas rurales y por consiguiente, influyendo en los pobres resultados de las Pruebas Saber. Muchos bachilleres estaban impartiendo clases en las aulas pero según el nuevo convenio, serán como mínimo normalistas superiores los que tendrán facultad para dictar enseñanzas.
“Los estudiantes de las zonas rurales están entre los puntajes 39 – 42, y la media nacional indica puntaje 45, ¿qué oportunidades tendrán de estudiar en universidades del país?, ninguna”, sentenció el concejal.
Con la firma del convenio para la educación rural, se inicia una serie de seguimientos y vigilancias, según el presidente del concejo Carlos Andrés Cotes Maya y el concejal Jaime González, que hicieron presencia en la firma del contrato con la Diócesis de Valledupar.
“Los debates del 2012 arrojaron buenos resultados aunque no tengo el informe estadístico exacto, sin embargo, este año habrá debates en los que se le dará continuidad a temas que quedaron inconclusos, y algunos de ellos que no tuvieron el desarrollo pertinente”, dijo el presidente de la corporación Cotes Maya.
Son tres períodos de sesiones ordinarias que duran dos meses cada uno, además de las extraordinarias y las especiales, lo que mantiene gran parte del año a los Concejales debatiendo temas de interés general, y aunque no se tiene estadística exacta de la utilidad y el resultado favorable de los debates, algunos de ellos sobresalen, […]
El convenio entre la administración municipal y la Diócesis de Valledupar fue firmado, los calendarios académicos han iniciado en las fechas que corresponden y el personal docente, al igual que el administrativo, está a disposición. Este es el resultado de la voluntad de las partes, por lo menos al iniciar el 2013. Sin embargo, hay que resaltar que fue un acalorado debate en el Concejo de Valledupar, lo que dio pie a los resultados que hoy se presentan.
El pasado 16 de noviembre, el concejal Ricardo Vives presentó un informe amplio y revelador acerca de lo que estaba pasando con la educación rural. En este debate hizo presencia la interventora del contrato ejercida en la Secretaría de Educación Municipal; también asistieron docentes rurales y el rector Miguel Suárez, como representante de la Diócesis de Valledupar, quien dijo que el informe del edil estaba incompleto.
Son cerca de dos mil 500 millones de pesos, los que financiarán la educación rural en Valledupar, según el convenio firmado en este año. En el debate de control político de noviembre pasado, se cuestionó el costo que según el promedio del registro del Sistema de Matrículas debe tener, esto es dos mil 324 millones, pero el contrato indicaba dos mil 867 millones de pesos, superando el cálculo y el costo que el Ministerio de Educación establece.
La discusión del 16 de noviembre, en período de sesiones ordinarias, dio como resultado un acuerdo por parte del interventor del contrato, para revisar detalladamente el informe presentado por el concejal Vives, para dar cumplimiento a los principios básicos de la calidad educativa en zonas rurales de Valledupar; son 16 escuelas en las que cerca de 11 mil estudiantes han sido matriculados este año, y la cifra podría llegar a 12 mil.
Pasaron dos meses hasta la renovación del convenio que debe garantizar la alimentación de calidad, de igual manera el transporte, la vigilancia, el aseo, entre otros aspectos.
Son 130 los maestros que hacen parte del convenio, que deben estar capacitados según los compromisos adquiridos por la Diócesis durante varios años, lo que exige el Ministerio de Educación y debe vigilar la interventora, y lo que se reafirmó mediante debate de control político.
Monseñor Óscar José Vélez Isaza, Obispo de la Diócesis de Valledupar, aconsejó a los docentes abstenerse de presentar documentación falsa, debido a que no solo el operador del contrato y los directores de núcleo revisarán con rigurosidad, también remitirán cualquier fraude a la Fiscalía General, para que la entidad tome las medidas respectivas.
Por otra parte, el debate de control político del concejal Vives, evidenció una realidad acerca del personal que estaba educando a los niños de las escuelas rurales y por consiguiente, influyendo en los pobres resultados de las Pruebas Saber. Muchos bachilleres estaban impartiendo clases en las aulas pero según el nuevo convenio, serán como mínimo normalistas superiores los que tendrán facultad para dictar enseñanzas.
“Los estudiantes de las zonas rurales están entre los puntajes 39 – 42, y la media nacional indica puntaje 45, ¿qué oportunidades tendrán de estudiar en universidades del país?, ninguna”, sentenció el concejal.
Con la firma del convenio para la educación rural, se inicia una serie de seguimientos y vigilancias, según el presidente del concejo Carlos Andrés Cotes Maya y el concejal Jaime González, que hicieron presencia en la firma del contrato con la Diócesis de Valledupar.
“Los debates del 2012 arrojaron buenos resultados aunque no tengo el informe estadístico exacto, sin embargo, este año habrá debates en los que se le dará continuidad a temas que quedaron inconclusos, y algunos de ellos que no tuvieron el desarrollo pertinente”, dijo el presidente de la corporación Cotes Maya.