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Columnista - 6 enero, 2020

470 años de la Ciudad de los Reyes, cuyo cielo tiene un tinte azul, plácido y sereno

Valledupar festeja su aniversario 470. Denominada Ciudad de los Reyes del Valle de Upar en honor al Cacique que la habitaba, de los Reyes por haber sido fundada el 6 de enero de 1550 por el Capitán Hernando de Santa Ana. Un breve recuento nos habla del Territorio habitado por nativos: chimilas y Tupes una […]

Valledupar festeja su aniversario 470. Denominada Ciudad de los Reyes del Valle de Upar en honor al Cacique que la habitaba, de los Reyes por haber sido fundada el 6 de enero de 1550 por el Capitán Hernando de Santa Ana. Un breve recuento nos habla del Territorio habitado por nativos: chimilas y Tupes una de las más aguerridas de nuestras tribus. Estudiados a manos llenas por cronistas, viajeros, historiadores quienes enfatizan en su organización social, militar, religiosa, económica, manifestaciones musicales y el vasto territorio que ocuparon, afrontando un largo período de guerras entre 1526 a 1560. Lograron mantenerse alejados de los invasores. Por largo tiempo sufrieron el saqueo y dominio de los españoles. Es el fenómeno que algunos historiadores, filósofos como el mexicano Leopoldo Zea han denominado “La civilización interrumpida”

Las casas y la iglesia de paja permanecen hasta 1580, momento en que el Gobernador Lope de Orozco inicia en la ciudad la arquitectura colonial. En los treinta años transcurridos desde su fundación  incursiona un buen número de españoles y alemanes como Ambrosio Alfinger, quien no sólo los combatió y arrasó con sus riquezas, matando y quemando los pueblos que quedaron convertidos en escombros y cenizas , sino que su víctima principal fue el Cacique Upar, ahorcado en la plaza principal de la población. Transcurrió un buen número de años cuya crisis fue superándose con la presencia de los capuchinos, inicia el período republicano en 1580.Ya los africanos habían hecho sus aportes, víctimas también de los atropellos. En el nuevo despertar y resurgir de la agricultura y ganadería incursionan a partir de la fecha mencionada gentes provenientes de Italia y Francia, judíos y árabes quienes hacen buenos aportes a la ciudad.

Los cambios no se hicieron esperar. Pronto se despojó de su impoluta  vestidura y canta el poeta “porque mi Valle ya no es lo que fue, emporio de dicha y de paz, amenizado en acordeón” (G.G.Cabello), para convertirse en una gran ciudad producto de las migraciones de distintos secciones territoriales del país, el desplazamiento forzado, la bonanza algodonera, la marimbera, explotación minera, al grado de convertirse en una ciudad cosmopolita.

Es así como el otrora pueblito vallenato musical, es acreedor a estas expresiones con distintos matices, admiración y entusiasmo,  añoranzas de un pasado. Son  varios cantautores que la han  dibujado como el terruño incomparable, caso de  Rodolfo ‘El Veje’ Bolaños, compositor y guitarrista con las nostálgicas estrofas que nunca podrán olvidarse: “Viejo Valledupar si te volviera a ver /como tú fuiste ayer típico y colonial: casitas de bahareque con sus palmas caladas
otras de cal y canto con sus tejas coloradas”

Según el Dane es del 31 %, es decir creció cuatro veces más rápido que la estructura demográfica del país, crecimiento poblacional por encima de la media nacional. La capital del Cesar ha evolucionado al grado de convertirse en un eje regional, atractivo para los turistas atraídos por su gente, la variedad en el folclor musical, sus ríos, nevados y pueblos que conservan un gran acervo cultural, así como por  para inversionistas y empre­sarios que encuentran un campo abonado para el comercio, la industria, la construcción de viviendas, centro comerciales. Crecimiento con aspectos positivos y lo negativo que nunca falta.

Resaltamos algunos aspectos de carácter cultural por su vocación musical, heredada de nuestros mayores. La magia del acordeón, la caja, la guacharaca y otros elementos del vallenato se convirtieron en un vehículo a partir de cuyos ritmos,  se forjaron semilleros, escuelas de música. Intensificada día a día con distintos programas de formación musical para jóvenes, niños y niñas. Caso del Maestro Andrés “EL Turco” Gil  hace quien hace más de 35 años Gil, cultiva con tesón y amor el semillero “Los niños del Vallenato”, a donde acuden no solo oriundos de la región, sino extranjeros, caso del belga que vino por tres meses y permaneció tres años estudiando o el de un francés, un canadiense y un mexicano quienes coincidieron en su presencia en esta academia. Los  integrantes de esta Fundación sin ánimo de lucro, no sólo han actuado en la Casa Blanca ante el Presidente Clinton, sino que han recorrido un buen número de países de Europa y Latinoamérica. En esta Academia han sido formados un buen número de los Reyes Vallenatos. Ha recibido varias condecoraciones de carácter internacional.

 Y así encontrará otros. Es el caso de la  Escuela de Música Leonardo Gómez Jr patrocinada  por la Alcaldía de Valledupar, donde  se desarrollan los cursos de formación musical para favorecer a los  niños y adolescentes entre los 4 a 16 años de estratos vulnerables. Motivarlos para que ejecuten los instrumentos de su preferencia y se alejen del consumo de alcohol, drogas o embarazos a temprano edad”, según su director Lesmes Ortiz Montenegro.   

En una de sus visitas a esta ciudad, el Presidente de la República Iván Duque conocedor de la vocación musical de la región, solicitó a La Unesco, a través del Ministerio de Cultura, la inclusión de Valledupar en la Red de Ciudades Creativas en honor a sus manifestaciones musicales, como es la música vallenata. La cual fue aprobada. Son muchos esfuerzos que distintos organismos,  hacen alrededor de la incentivación de una de nuestras más depuradas manifestaciones culturales.

Pero no todo es color rosa. La ciudad que se perfila como turística, para lo cual requiere brindar seguridad al ciudadano, la movilidad, adoptar políticas sociales para abordar el tema de los desplazados, que ya no son solo los nuestros, sino los venidos de Venezuela, coordinar con el Sena u otra institución la formación de taxistas y guías culturales. Son varios Ios retos importantes urgente de abordar.

Aclaramos que también hay muy buenos resultados de las actividades alrededor de la lectura, desarrolladas en la Biblioteca Departamental y el Banco de la República, así como la Cámara de Comercio.-

Columnista
6 enero, 2020

470 años de la Ciudad de los Reyes, cuyo cielo tiene un tinte azul, plácido y sereno

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Giomar Lucía Guerra Bonilla

Valledupar festeja su aniversario 470. Denominada Ciudad de los Reyes del Valle de Upar en honor al Cacique que la habitaba, de los Reyes por haber sido fundada el 6 de enero de 1550 por el Capitán Hernando de Santa Ana. Un breve recuento nos habla del Territorio habitado por nativos: chimilas y Tupes una […]


Valledupar festeja su aniversario 470. Denominada Ciudad de los Reyes del Valle de Upar en honor al Cacique que la habitaba, de los Reyes por haber sido fundada el 6 de enero de 1550 por el Capitán Hernando de Santa Ana. Un breve recuento nos habla del Territorio habitado por nativos: chimilas y Tupes una de las más aguerridas de nuestras tribus. Estudiados a manos llenas por cronistas, viajeros, historiadores quienes enfatizan en su organización social, militar, religiosa, económica, manifestaciones musicales y el vasto territorio que ocuparon, afrontando un largo período de guerras entre 1526 a 1560. Lograron mantenerse alejados de los invasores. Por largo tiempo sufrieron el saqueo y dominio de los españoles. Es el fenómeno que algunos historiadores, filósofos como el mexicano Leopoldo Zea han denominado “La civilización interrumpida”

Las casas y la iglesia de paja permanecen hasta 1580, momento en que el Gobernador Lope de Orozco inicia en la ciudad la arquitectura colonial. En los treinta años transcurridos desde su fundación  incursiona un buen número de españoles y alemanes como Ambrosio Alfinger, quien no sólo los combatió y arrasó con sus riquezas, matando y quemando los pueblos que quedaron convertidos en escombros y cenizas , sino que su víctima principal fue el Cacique Upar, ahorcado en la plaza principal de la población. Transcurrió un buen número de años cuya crisis fue superándose con la presencia de los capuchinos, inicia el período republicano en 1580.Ya los africanos habían hecho sus aportes, víctimas también de los atropellos. En el nuevo despertar y resurgir de la agricultura y ganadería incursionan a partir de la fecha mencionada gentes provenientes de Italia y Francia, judíos y árabes quienes hacen buenos aportes a la ciudad.

Los cambios no se hicieron esperar. Pronto se despojó de su impoluta  vestidura y canta el poeta “porque mi Valle ya no es lo que fue, emporio de dicha y de paz, amenizado en acordeón” (G.G.Cabello), para convertirse en una gran ciudad producto de las migraciones de distintos secciones territoriales del país, el desplazamiento forzado, la bonanza algodonera, la marimbera, explotación minera, al grado de convertirse en una ciudad cosmopolita.

Es así como el otrora pueblito vallenato musical, es acreedor a estas expresiones con distintos matices, admiración y entusiasmo,  añoranzas de un pasado. Son  varios cantautores que la han  dibujado como el terruño incomparable, caso de  Rodolfo ‘El Veje’ Bolaños, compositor y guitarrista con las nostálgicas estrofas que nunca podrán olvidarse: “Viejo Valledupar si te volviera a ver /como tú fuiste ayer típico y colonial: casitas de bahareque con sus palmas caladas
otras de cal y canto con sus tejas coloradas”

Según el Dane es del 31 %, es decir creció cuatro veces más rápido que la estructura demográfica del país, crecimiento poblacional por encima de la media nacional. La capital del Cesar ha evolucionado al grado de convertirse en un eje regional, atractivo para los turistas atraídos por su gente, la variedad en el folclor musical, sus ríos, nevados y pueblos que conservan un gran acervo cultural, así como por  para inversionistas y empre­sarios que encuentran un campo abonado para el comercio, la industria, la construcción de viviendas, centro comerciales. Crecimiento con aspectos positivos y lo negativo que nunca falta.

Resaltamos algunos aspectos de carácter cultural por su vocación musical, heredada de nuestros mayores. La magia del acordeón, la caja, la guacharaca y otros elementos del vallenato se convirtieron en un vehículo a partir de cuyos ritmos,  se forjaron semilleros, escuelas de música. Intensificada día a día con distintos programas de formación musical para jóvenes, niños y niñas. Caso del Maestro Andrés “EL Turco” Gil  hace quien hace más de 35 años Gil, cultiva con tesón y amor el semillero “Los niños del Vallenato”, a donde acuden no solo oriundos de la región, sino extranjeros, caso del belga que vino por tres meses y permaneció tres años estudiando o el de un francés, un canadiense y un mexicano quienes coincidieron en su presencia en esta academia. Los  integrantes de esta Fundación sin ánimo de lucro, no sólo han actuado en la Casa Blanca ante el Presidente Clinton, sino que han recorrido un buen número de países de Europa y Latinoamérica. En esta Academia han sido formados un buen número de los Reyes Vallenatos. Ha recibido varias condecoraciones de carácter internacional.

 Y así encontrará otros. Es el caso de la  Escuela de Música Leonardo Gómez Jr patrocinada  por la Alcaldía de Valledupar, donde  se desarrollan los cursos de formación musical para favorecer a los  niños y adolescentes entre los 4 a 16 años de estratos vulnerables. Motivarlos para que ejecuten los instrumentos de su preferencia y se alejen del consumo de alcohol, drogas o embarazos a temprano edad”, según su director Lesmes Ortiz Montenegro.   

En una de sus visitas a esta ciudad, el Presidente de la República Iván Duque conocedor de la vocación musical de la región, solicitó a La Unesco, a través del Ministerio de Cultura, la inclusión de Valledupar en la Red de Ciudades Creativas en honor a sus manifestaciones musicales, como es la música vallenata. La cual fue aprobada. Son muchos esfuerzos que distintos organismos,  hacen alrededor de la incentivación de una de nuestras más depuradas manifestaciones culturales.

Pero no todo es color rosa. La ciudad que se perfila como turística, para lo cual requiere brindar seguridad al ciudadano, la movilidad, adoptar políticas sociales para abordar el tema de los desplazados, que ya no son solo los nuestros, sino los venidos de Venezuela, coordinar con el Sena u otra institución la formación de taxistas y guías culturales. Son varios Ios retos importantes urgente de abordar.

Aclaramos que también hay muy buenos resultados de las actividades alrededor de la lectura, desarrolladas en la Biblioteca Departamental y el Banco de la República, así como la Cámara de Comercio.-