El Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Valledupar dictó sentencia condenatoria en contra de Calixto López González,  alias Chitiva, por los delitos de concierto para delinquir agravado, homicidio agravado y desaparición forzada agravada, por hechos ocurridos el 20 de marzo del 2000 cuando miembros activos del Cuerpo Técnico de Investigación CTI de la Fiscalía General de la Nación, seccional Valledupar y Codazzi, fueron retenidos y desaparecidos en predios de la hacienda Holanda, corregimiento de Minguillo, de La Paz, Cesar.

Edilberto Arturo Linares Correa, Carlos Augusto Ibarra Bernal, Danilo Javier Carrera Aguancha, Hugo Alberto Quintero Solano, Mario Abel Anillo Trocha, Jaime Elias Barros Ovalles e Israel Roca Martínez, fueron los miembros del CTI desaparecidos por un grupo armado al mando de Jhon Jairo Esquivel Cuadrado, alias “El Tigre”, integrantes del frente ‘Juan Andrés Álvarez’ de las autodenominadas Autodefensas Unidas de Colombia. Los restos de las víctimas nunca fueron encontrados, pese a los esfuerzos de la rama judicial.

En el momento de los hechos, los siete investigadores fueron obligados a bajarse del vehículo en el que se movilizaban y de acuerdo con las autoridades fueron asesinados por orden de Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40 y Jhon Jairo Esquivel Cuadrado alias El Tigre. Del mismo modo, por el hoy condenado, Calixto López, quien ejercía como excomandante de escuadra y segundo comandante del Frente ‘Juan Andrés Álvarez’.

Ante estos hechos, Calixto López fue declarado coautor de las desapariciones  y condenado a 40 años de prisión y deberá responder por una multa de 16.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes para el año 2000. Tampoco podrá ejercer funciones públicas durante 20 años, no tiene derecho a prisión domiciliaria y fue enviado a un centro carcelario a cargo del INPEC.

También López González tendrá que pagar una indemnización de 200 salarios mínimos legales vigentes a las víctimas reconocidas de manera legal.

Cabe mencionar que esta sentencia fue apelada.

¿QUÉ DICEN LOS FAMILIARES DE LAS VÍCTIMAS?

Ante esta condena, Edinson Ibarra, hermano de Carlos Arturo Ibarra, uno de los siete miembros del Cuerpo Técnico de Investigación, mostró un poco de tranquilidad al considerar que se está haciendo justicia divina y terrenal por estas muertes, mostrando posición de tristeza y a la vez de alegría,

“Estas personas que hicieron mucho daño a siete familias nobles, humildes, trabajadoras, sin ninguna clase de estatus político, nos arrancaron una parte de nuestro corazón. Mi hermano y sus compañeros eran pieza fundamental de familias y los sostenedores económicos de los hogares que al cumplir su labor los secuestraron, torturaron, maltrataron y los desaparecieron forzosamente”, acotó Ibarra.

De acuerdo con Edinson, una de los factores que más le genera dolor es que después de 24 años siguen sin conocer la ubicación de donde quedaron los cuerpos de los desaparecidos, pues no hay claridad de qué sucedió y pese a la gran cantidad de hipótesis, afirma que sigue sin conocerse la verdad.

“Estos bandidos no deben tener ninguna clase de beneficios, tienen que cumplir a cabalidad la condena por el sufrimiento de siete familias que aún sufren y luchan”, sostuvo el familiar de Carlos Ibarra.

Según el pariente de esta víctima, Jhon Jairo Esquivel Cuadrado, alias “El Tigre”, se ha burlado de las autoridades y las familias en contar falsos testimonios sin hablar con claridad, sin embargo, afirma que su fe está puesta en Dios y cree que en algún momento conocerán, al menos ellos, lo que sucedió, ya que muchos padres y seres queridos han fallecido en la espera de la verdad.