El buen manejo de la expresión oral y corporal se ha convertido en una de las características más importantes que deben tener los seres humanos. Los cambios que ha traído el mundo actual hacen que cada día sea más importante contar con habilidades comunicativas al momento de dirigirse a un público.

La glosofobia o miedo a hablar en público es una situación que experimentan las personas a diario, dejando en evidencia síntomas físicos, conductuales o cognitivos que representan “pánico escénico”. Esta situación es más común de lo que parece, desde la niñez hasta la adultez las personas se enfrentan a distintos procesos de comunicación donde en ocasiones sale a flote esta problemática por timidez o falta de confianza.

Según Marcela Quintero Jiménez, docente del programa de Comunicación Social de Areandina Valledupar, “es muy común observar los miedos que enfrentan los estudiantes al momento de expresarse en público, bien sea desde una pequeña socialización en mesa de diálogo, hasta la exposición de un tema específico frente a jurados”.

La experta comparte 10 consejos para superar el miedo a hablar en público.

• Definir cuál será el objetivo de la intervención: tener claro cuál es el objetivo al momento de dirigirse al público le ayudará en el proceso de planificación. Es importante aclarar que los objetivos pueden trabajarse de forma individual o combinarlos, por ejemplo informar y enseñar, divertir y entretener, persuadir y convencer, entre otros.

• Conocer el tipo de audiencia o público al que se va a enfrentar: es fundamental conocer las características socioculturales que tiene el público al que se va a dirigir, identificar si son personas con una idéntica profesión o no, tipos de edades, saber qué deseos o necesidades tienen.

• Preparar lo que se va a decir: cuando una persona se siente segura de su discurso puede comunicarlo de mejor manera; es importante entender lo que va a decir, interiorizar el tema, apropiarse de él. Para lograrlo lo mejor es prepararlo y estudiarlo con anticipación.

• Empezar bien: la primera y última frase dentro de una intervención con el público son fundamentales. Las personas siempre recordarán lo positivo o lo negativo de ese momento, por eso es fundamental estar seguros de los que vamos a decir y captar la atención del público de principio a fin.

• Sé tú mismo: cuando somos auténticos y hablamos con naturalidad se logra ser más asertivos, es por ello que es importante no buscar la perfección, sino sentirse cómodos y mantener la esencia particular cuando se está frente a un público.

• Relajarse: respirar profundo, mantener la respiración por hasta cuatro segundos y soltar es uno de los ejercicios claves antes de intervenir en situaciones que los puedan poner nerviosos.

• Manejar adecuadamente la postura corporal: en muchas ocasiones los ademanes o postura corporal pueden afectar la intervención con el público; es importante aprender a manejar la expresividad, evitar los movimientos bruscos de brazos, no caminar tanto por el auditorio o el lugar donde se está haciendo la intervención, cuidar los gestos o movimientos faciales, logrando que la información entregada de tipo verbal se complemente o se refuerce a través de la comunicación no verbal.

• Ser positivos: pensar que va a salir bien es casi una garantía de éxito. No se debe enfrascar en lo que se suele fallar o en lo que se considera que comúnmente no sale bien. Antes de iniciar la intervención se debe estar seguro que se hará muy bien.

• Si se puede equivocar: si se equivocan en su intervención, no importa, siga adelante con el discurso. Es fundamental aprender a soltar el miedo y tener presente que cada experiencia será un motivo de enseñanza y de mejora continua.

• Grabarse: Practicar frente al espejo o grabarse con el celular es importante. Este ejercicio ayudará a revisar y ajustar los detalles que se consideren que puedan restar seguridad en la intervención.

“Lo más importante es la buena planificación. Todo ejercicio o actividad que se planifique y se prepare con anticipación saldrá bien; aprender a recibir las críticas y estar en un proceso de mejora continua, es otro aspecto que nos ayudará mucho al respecto. Si ponemos en práctica todos estos consejos la glosofobia desparecerá de nuestra vida y los miedos de enfrentarnos al público serán tema del pasado”, puntualizó Quintero.