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Editorial - 30 julio, 2017

El río Cesar sigue muriendo

En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa. […]

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En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa.

El impacto de esta campaña fue mediático, no hay que negarlo, mientras publicamos e hicimos evidente cómo muere lentamente el río Cesar y mostramos a través de artículos, vídeos y fotografías su triste realidad, las autoridades cesarenses se hicieron sentir y se comprometieron a liderar unas acciones en el corto y mediano plazo para disminuir su contaminación que se genera con más intensidad en el puente Salguero, donde le caen las aguas servidas de Valledupar (no hay que olvidar que la deforestación, la minería ilegal, la desviación de su cauce y las basuras que allí arrojan también lo están matando).

El debido tratamiento de las aguas que llegan a la laguna de oxidación del Salguero es el principal problema, por unos meses lograron aplicar las bacterias que se requieren, pero desde mayo pasado no hay contrato, no hay bacterias y por ende no hay un adecuado tratamiento de las aguas residuales, las que caen al simbólico río Cesar, musa de inspiración de los compositores vallenatos tradicionales.

La campaña el año pasado la cerramos con un foro, en el que participaron el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita; el alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez Uhía; el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos; el gerente de Emdupar, Armando Cuello, pescadores del río Cesar y de la ciénaga de Zapatosa, comunidades afectadas por la contaminación del afluente; allí se comprometieron y anunciaron medidas: ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no son constantes en la aplicación de las bacterias al río? ¿A dónde van los dineros recaudados por Emdupar por concepto de alcantarillado? ¿Cómo va el proyecto de aireación del río Cesar con recursos del Ministerio de Ambiente? ¿Qué pasó con el contrato de la firma Aqua que debe construir la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales? ¿En qué quedó el anunció del gobernador Ovalle de invertir 50 mil millones de pesos en esta planta?
Este año hemos hecho seguimiento al tema y el pasado 13 de junio publicamos un Tema del Día titulado ‘El río Cesar volvió a quedar sin tratamiento’, en el que el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos Brochel, afirmó “El contrato de bacterias terminó hace un mes y estoy a la espera de que Emdupar nos pase el requerimiento para ver si se le da una continuidad, toda vez que el tema de las bacterias ha funcionado bien; a pesar de que el río se ve con espuma realmente está demostrado por tres laboratorios que las bacterias disminuyen la carga contaminante y al menos se da el cumplimiento normativo”.

El río Cesar no merece morir por la desidia de los gobernantes y las autoridades ambientales. ‘Salvemos al río Cesar’.

 

 

Editorial
30 julio, 2017

El río Cesar sigue muriendo

En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa. […]


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En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa.

El impacto de esta campaña fue mediático, no hay que negarlo, mientras publicamos e hicimos evidente cómo muere lentamente el río Cesar y mostramos a través de artículos, vídeos y fotografías su triste realidad, las autoridades cesarenses se hicieron sentir y se comprometieron a liderar unas acciones en el corto y mediano plazo para disminuir su contaminación que se genera con más intensidad en el puente Salguero, donde le caen las aguas servidas de Valledupar (no hay que olvidar que la deforestación, la minería ilegal, la desviación de su cauce y las basuras que allí arrojan también lo están matando).

El debido tratamiento de las aguas que llegan a la laguna de oxidación del Salguero es el principal problema, por unos meses lograron aplicar las bacterias que se requieren, pero desde mayo pasado no hay contrato, no hay bacterias y por ende no hay un adecuado tratamiento de las aguas residuales, las que caen al simbólico río Cesar, musa de inspiración de los compositores vallenatos tradicionales.

La campaña el año pasado la cerramos con un foro, en el que participaron el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita; el alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez Uhía; el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos; el gerente de Emdupar, Armando Cuello, pescadores del río Cesar y de la ciénaga de Zapatosa, comunidades afectadas por la contaminación del afluente; allí se comprometieron y anunciaron medidas: ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no son constantes en la aplicación de las bacterias al río? ¿A dónde van los dineros recaudados por Emdupar por concepto de alcantarillado? ¿Cómo va el proyecto de aireación del río Cesar con recursos del Ministerio de Ambiente? ¿Qué pasó con el contrato de la firma Aqua que debe construir la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales? ¿En qué quedó el anunció del gobernador Ovalle de invertir 50 mil millones de pesos en esta planta?
Este año hemos hecho seguimiento al tema y el pasado 13 de junio publicamos un Tema del Día titulado ‘El río Cesar volvió a quedar sin tratamiento’, en el que el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos Brochel, afirmó “El contrato de bacterias terminó hace un mes y estoy a la espera de que Emdupar nos pase el requerimiento para ver si se le da una continuidad, toda vez que el tema de las bacterias ha funcionado bien; a pesar de que el río se ve con espuma realmente está demostrado por tres laboratorios que las bacterias disminuyen la carga contaminante y al menos se da el cumplimiento normativo”.

El río Cesar no merece morir por la desidia de los gobernantes y las autoridades ambientales. ‘Salvemos al río Cesar’.