Un paro cardíaco sorprendió la mañana de ayer, en uno de los apartamentos de las torres de Lorenzo Morales, al sur de Valledupar, a Carmen Rosa González.

No alcanzó a pedir auxilio a los vecinos, porque se desmayó al llegar a la puerta de la calle y no logró abrirla.

La mujer nacida hace 66 años en la localidad de Achí, Bolívar, residente en la capital del Cesar hacía más de 30 años, era desplazada por los grupos paramilitares que delinquían en esa zona conflictiva junto a su esposo Carlos María Borré.

Él no se encontraba en casa cuando a su mujer la sorprendió el infarto, salió en horas de la madrugada a vender arroz con pollo y de lisa en los alrededores de la Terminal de Transporte de esta capital, la única fuente de ingreso para el sostén de ese humilde hogar.

En principio se alertó a las autoridades a través de las redes sociales, que una persona se había suicidado en ese complejo habitacional, pero todo resultó falso una vez los periodistas de los diferentes medios locales se trasladaron hacia el sector en busca de mayores detalles, pero que resultó siendo una muerte natural.

Los vecinos la consideraban como una mujer de extracción muy pobre, pero con un corazón lleno de vida, de mucha confianza con ellos y muy buena amiga y vecina. Los primeros sorprendidos fueron sus más allegados, debido a que todas las mañanas se asomaba a la puerta de su casa a dialogar y platicar con sus vecinos; pero ayer ellos la echaron de menos porque no salió.

Motivados por la ausencia de la mujer, varios decidieron llegar hasta su casa para verificar qué le había sucedido. Le tocaron la puerta una, dos y más veces, y nadie respondía. Uno de ellos se asomó por la ventana y la observó tirada en el suelo, como pudieron abrieron la puerta para auxiliarla, pero ya estaba sin signos vitales.

Luego llamaron a la Policía y esta a su vez a los miembros del cuerpo técnico de investigación –CTI-, quienes adelantaron el proceso de inspección y reconocimiento del cadávery lo trasladaron en vehículo móvil de criminalística hasta la morgue de Medicina Legal y Ciencias Forenses, para que le practicaran la respectiva necropsia y poder establecer las verdaderas causas de su fallecimiento.

Entre los vecinos y familias que residen en la zona auxiliaron económicamente a Carlos Marías Borré, para sufragar los gastos del mortuorio, debido a la crítica situación económica por la que ellos venían afrontando.

Entre los vecinos y familias que residen en la zona auxiliaron económicamente a Carlos Marías Borré, para sufragar los gastos del mortuorio.

Por Abdel Martínez Pérez