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Mundo - 10 julio, 2018

La reina Isabel estuvo ausente en el bautizo del tercer hijo del príncipe William

En la tarde de este lunes en la Capilla Real del Palacio Saint. James, los duques de Cambridge celebraron el bautismo de su tercer hijo, el príncipe Louis.

En la tarde de este lunes en la Capilla Real del Palacio Saint. James, los duques de Cambridge celebraron el bautismo de su tercer hijo, el príncipe Louis.  El príncipe Louis, es el nuevo integrante de la familia real y nació el 28 de abril de este año. Es el quinto en la línea de sucesión al trono británico y tercer hijo de los duques de Cambridge.

Fue una ceremonia íntima donde faltaron sus bisabuelos, la reina Isabel II y el duque de Edimburgo.

Antes de iniciar la ceremonia, había sido anunciado que la  reina no asistiría al evento, muchos rápidamente especularon que sería por razones de salud, luego mencionaron que se trató de un conflicto de agenda lo que le impidió acompañar a su tercer bisnieto.

Ha llamado mucho la atención la inesperada falta de la monarca, ya que es la primera vez que no participa del bautismo de alguno de los hijos del príncipe William y Kate Middleton.

Por otro lado,estuvieron presentes los abuelos del bebé, el príncipe Carlos y Camila Parker Bowles, así como los padres de Kate Middleton, los tíos, el príncipe Harry y Meghan Markle, Pippa Middleton y su marido James Mathews, quienes esperan su primer hijo y los seis padrinos del pequeño, que son amigos íntimos de los duques de Cambridge junto con sus parejas.

El hijo menor de los duques de Cambridge fue bautizado con agua del río Jordán sobre la pila bautismal Lily Font, una obra de orfebrería elaborada por los joyeros EJ. y W. Barnard en 1840, también a petición de la reina Victoria, que representa “la pureza y la nueva vida” y que la familia real utiliza en estas ceremonias.

Según el Observador.com el bebé siguió los pasos de su hermano mayor, cuyo bautismo también se celebró en el templo de la capital británica en 2013, mientras que la de su hermana tuvo lugar al este de Inglaterra, en la Iglesia Saint Mary Magdalene de Sandringham, en 2015.

La ceremonia duró 40 minutos y al culminar, los invitados se trasladaron al Clarence House, residencia oficial del príncipe Carlos, donde se realizó un té en conmemoración al pequeño.

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10 julio, 2018

La reina Isabel estuvo ausente en el bautizo del tercer hijo del príncipe William

En la tarde de este lunes en la Capilla Real del Palacio Saint. James, los duques de Cambridge celebraron el bautismo de su tercer hijo, el príncipe Louis.


En la tarde de este lunes en la Capilla Real del Palacio Saint. James, los duques de Cambridge celebraron el bautismo de su tercer hijo, el príncipe Louis.  El príncipe Louis, es el nuevo integrante de la familia real y nació el 28 de abril de este año. Es el quinto en la línea de sucesión al trono británico y tercer hijo de los duques de Cambridge.

Fue una ceremonia íntima donde faltaron sus bisabuelos, la reina Isabel II y el duque de Edimburgo.

Antes de iniciar la ceremonia, había sido anunciado que la  reina no asistiría al evento, muchos rápidamente especularon que sería por razones de salud, luego mencionaron que se trató de un conflicto de agenda lo que le impidió acompañar a su tercer bisnieto.

Ha llamado mucho la atención la inesperada falta de la monarca, ya que es la primera vez que no participa del bautismo de alguno de los hijos del príncipe William y Kate Middleton.

Por otro lado,estuvieron presentes los abuelos del bebé, el príncipe Carlos y Camila Parker Bowles, así como los padres de Kate Middleton, los tíos, el príncipe Harry y Meghan Markle, Pippa Middleton y su marido James Mathews, quienes esperan su primer hijo y los seis padrinos del pequeño, que son amigos íntimos de los duques de Cambridge junto con sus parejas.

El hijo menor de los duques de Cambridge fue bautizado con agua del río Jordán sobre la pila bautismal Lily Font, una obra de orfebrería elaborada por los joyeros EJ. y W. Barnard en 1840, también a petición de la reina Victoria, que representa “la pureza y la nueva vida” y que la familia real utiliza en estas ceremonias.

Según el Observador.com el bebé siguió los pasos de su hermano mayor, cuyo bautismo también se celebró en el templo de la capital británica en 2013, mientras que la de su hermana tuvo lugar al este de Inglaterra, en la Iglesia Saint Mary Magdalene de Sandringham, en 2015.

La ceremonia duró 40 minutos y al culminar, los invitados se trasladaron al Clarence House, residencia oficial del príncipe Carlos, donde se realizó un té en conmemoración al pequeño.