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Editorial - 1 noviembre, 2017

La minga indígena en el Cesar

En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al […]

En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al Gobierno Nacional que cumpla el acuerdo de paz pactado en La Habana, especialmente lo atinente al capítulo étnico.

Sin embargo, en Valledupar los habitantes de la ciudad, sobre todo los que transitan por el centro histórico alrededor de la Alcaldía Municipal, y también por la Gobernación del Cesar, se han encontrado con vallas y cierres de vías para evitar la toma de los indígenas en la plaza Alfonso López y en la plazoleta del palacio departamental, como ha ocurrido en otras ocasiones.

El propósito de la Minga es paralizar indefinidamente algunas carreteras del país (en el sur del Cesar se han registrado algunos cierres) para llamar la atención del Gobierno Nacional. Así como los indígenas se encuentra todo el país, expectante por el cumplimiento de lo pactado en el acuerdo de paz con las Farc. Estamos de acuerdo en el justo reclamo, pero no compartimos, aunque lo respetamos, que acudan al bloqueo de vías para hacerse sentir. La fuerza indígena puede llegar de otra manera a buscar respuestas y a hacer preguntas. Su mensaje es claro y contundente: “Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”, es muy diciente y bastante significativo.

La Minga Nacional Indígena por la Vida, que es liderada por las organizaciones convocantes de la Mesa Permanente de Concertación de Pueblos Indígenas (Organización Nacional Indígena de Colombia –ONIC, Autoridades Indígenas de Colombia por la Pachamama – AICO,  Confederación Indígena Tairona– CIT, Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana – OPIAC, y Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia – Gobierno Mayor), pidieron ayer “la instalación del escenario de concertación y negociación de alto nivel con el Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de la República, Juan Manuel Santos, y sus Ministros de Gobierno”. Ese es el mejor escenario.

Bienvenido el diálogo, las buenas maneras, las ideas y los acuerdos que puedan darse en el escenario del respeto y el buen trato. Lo que pase desde La Guajira hasta Nariño, desde el Chocó hasta Vichada, depende del talante de los líderes de las organizaciones de la Mesa Permanente de Concertación y de todas las organizaciones y comunidades del movimiento indígena.

 

En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al Gobierno Nacional que cumpla el acuerdo de paz pactado en La Habana, especialmente lo atinente al capítulo étnico.

Sin embargo, en Valledupar los habitantes de la ciudad, sobre todo los que transitan por el centro histórico alrededor de la Alcaldía Municipal, y también por la Gobernación del Cesar, se han encontrado con vallas y cierres de vías para evitar la toma de los indígenas en la plaza Alfonso López y en la plazoleta del palacio departamental, como ha ocurrido en otras ocasiones.

El propósito de la Minga es paralizar indefinidamente algunas carreteras del país (en el sur del Cesar se han registrado algunos cierres) para llamar la atención del Gobierno Nacional. Así como los indígenas se encuentra todo el país, expectante por el cumplimiento de lo pactado en el acuerdo de paz con las Farc. Estamos de acuerdo en el justo reclamo, pero no compartimos, aunque lo respetamos, que acudan al bloqueo de vías para hacerse sentir. La fuerza indígena puede llegar de otra manera a buscar respuestas y a hacer preguntas. Su mensaje es claro y contundente: “Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”, es muy diciente y bastante significativo.

La Minga Nacional Indígena por la Vida, que es liderada por las organizaciones convocantes de la Mesa Permanente de Concertación de Pueblos Indígenas (Organización Nacional Indígena de Colombia –ONIC, Autoridades Indígenas de Colombia por la Pachamama – AICO,  Confederación Indígena Tairona– CIT, Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana – OPIAC, y Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia – Gobierno Mayor), pidieron ayer “la instalación del escenario de concertación y negociación de alto nivel con el Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de la República, Juan Manuel Santos, y sus Ministros de Gobierno”. Ese es el mejor escenario.

Bienvenido el diálogo, las buenas maneras, las ideas y los acuerdos que puedan darse en el escenario del respeto y el buen trato. Lo que pase desde La Guajira hasta Nariño, desde el Chocó hasta Vichada, depende del talante de los líderes de las organizaciones de la Mesa Permanente de Concertación y de todas las organizaciones y comunidades del movimiento indígena.

 

Editorial
1 noviembre, 2017

La minga indígena en el Cesar

En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al […]


En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al Gobierno Nacional que cumpla el acuerdo de paz pactado en La Habana, especialmente lo atinente al capítulo étnico.

Sin embargo, en Valledupar los habitantes de la ciudad, sobre todo los que transitan por el centro histórico alrededor de la Alcaldía Municipal, y también por la Gobernación del Cesar, se han encontrado con vallas y cierres de vías para evitar la toma de los indígenas en la plaza Alfonso López y en la plazoleta del palacio departamental, como ha ocurrido en otras ocasiones.

El propósito de la Minga es paralizar indefinidamente algunas carreteras del país (en el sur del Cesar se han registrado algunos cierres) para llamar la atención del Gobierno Nacional. Así como los indígenas se encuentra todo el país, expectante por el cumplimiento de lo pactado en el acuerdo de paz con las Farc. Estamos de acuerdo en el justo reclamo, pero no compartimos, aunque lo respetamos, que acudan al bloqueo de vías para hacerse sentir. La fuerza indígena puede llegar de otra manera a buscar respuestas y a hacer preguntas. Su mensaje es claro y contundente: “Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”, es muy diciente y bastante significativo.

La Minga Nacional Indígena por la Vida, que es liderada por las organizaciones convocantes de la Mesa Permanente de Concertación de Pueblos Indígenas (Organización Nacional Indígena de Colombia –ONIC, Autoridades Indígenas de Colombia por la Pachamama – AICO,  Confederación Indígena Tairona– CIT, Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana – OPIAC, y Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia – Gobierno Mayor), pidieron ayer “la instalación del escenario de concertación y negociación de alto nivel con el Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de la República, Juan Manuel Santos, y sus Ministros de Gobierno”. Ese es el mejor escenario.

Bienvenido el diálogo, las buenas maneras, las ideas y los acuerdos que puedan darse en el escenario del respeto y el buen trato. Lo que pase desde La Guajira hasta Nariño, desde el Chocó hasta Vichada, depende del talante de los líderes de las organizaciones de la Mesa Permanente de Concertación y de todas las organizaciones y comunidades del movimiento indígena.

 

En el departamento del Cesar no se han registrado bloqueos de vías ni manifestaciones, por lo menos en el norte y centro, de parte de los grupos indígenas asentados en este territorio, en el marco de la Minga por la Vida que iniciaron las comunidades y autoridades indígenas de todo el país para pedirle al Gobierno Nacional que cumpla el acuerdo de paz pactado en La Habana, especialmente lo atinente al capítulo étnico.

Sin embargo, en Valledupar los habitantes de la ciudad, sobre todo los que transitan por el centro histórico alrededor de la Alcaldía Municipal, y también por la Gobernación del Cesar, se han encontrado con vallas y cierres de vías para evitar la toma de los indígenas en la plaza Alfonso López y en la plazoleta del palacio departamental, como ha ocurrido en otras ocasiones.

El propósito de la Minga es paralizar indefinidamente algunas carreteras del país (en el sur del Cesar se han registrado algunos cierres) para llamar la atención del Gobierno Nacional. Así como los indígenas se encuentra todo el país, expectante por el cumplimiento de lo pactado en el acuerdo de paz con las Farc. Estamos de acuerdo en el justo reclamo, pero no compartimos, aunque lo respetamos, que acudan al bloqueo de vías para hacerse sentir. La fuerza indígena puede llegar de otra manera a buscar respuestas y a hacer preguntas. Su mensaje es claro y contundente: “Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”, es muy diciente y bastante significativo.

La Minga Nacional Indígena por la Vida, que es liderada por las organizaciones convocantes de la Mesa Permanente de Concertación de Pueblos Indígenas (Organización Nacional Indígena de Colombia –ONIC, Autoridades Indígenas de Colombia por la Pachamama – AICO,  Confederación Indígena Tairona– CIT, Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana – OPIAC, y Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia – Gobierno Mayor), pidieron ayer “la instalación del escenario de concertación y negociación de alto nivel con el Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de la República, Juan Manuel Santos, y sus Ministros de Gobierno”. Ese es el mejor escenario.

Bienvenido el diálogo, las buenas maneras, las ideas y los acuerdos que puedan darse en el escenario del respeto y el buen trato. Lo que pase desde La Guajira hasta Nariño, desde el Chocó hasta Vichada, depende del talante de los líderes de las organizaciones de la Mesa Permanente de Concertación y de todas las organizaciones y comunidades del movimiento indígena.