En la oficina presidencial del Concejo quedó la imagen dócil del ‘rey’ de los corregimientos de Valledupar. Una reunión, entre compañeros, fue la inspiración del retrato.
Alex Pana, Yesith Triana, Iván Lúquez, Gabriel Muvdi, Jaime González, Adriana Mejía, Hernán Felipe Araújo, José Santos Castro, José Guillermo Castro y Carlos Andrés Cotes, animaron su recuerdo con lo que sería las últimas sonrisas de Wilber José Hinojosa Arias.
Carlos Andrés Cotes no culpa al destino, tampoco al refrán de que son cosas de Dios, pero si pudiera devolver el tiempo, seguro volvería a sacar su teléfono para fotografiar a ‘El Mocho’ Hinojosa sonriendo; con su mochila al hombro, sus gafas colgadas en el suéter y la mirada risueña que lo caracterizaba, el concejal Cotes tomó las últimas escenas antes de que Wilber Hinojosa se fuera del recinto del Concejo, aquejado por problemas de hipertensión.

Esta es la última fotografía de Wilber Hinojosa Arias en la presidencia del Concejo. Carlos Andrés Cotes la tomó en medio de una charla de concejales. 

“No puedo borrar de mi mente esa imagen que logré tomar con mi teléfono celular el día de su salida (Wilber Hinojosa) del Concejo: se fue para no regresar. En la foto que tomé está, principalmente, el compañero Alex Pana tocando su corto brazo, lo mecía por la manga de la camisa azul a rayas blancas que portaba ‘El Mocho’ ese día”, recordó Carlos Andrés Cotes.
Esa prenda de vestir era azul, sí, azul como la sangre conservadora de Wilber Hinojosa Arias, militante durante su carrera política del Partido Conservador.

“Es inexplicable como reía en esa ocasión, sin sentirse mal porque le tomábamos el pelo; de un momento a otro se fue y nunca dijo hasta luego o vuelvo pronto, tampoco cantó, como siempre lo hacía”, remembró Cotes.

El Concejal Wilber Hinojosa fue despedido en medio de honores y reconocimientos en su tierra natal Patillal.

A las 10:10 de la mañana del 30 de julio, el féretro de Wilber Hinojosa estuvo en cámara ardiente en el patio colonial de la Alcaldía de Valledupar. El presidente del Concejo, Iván Lúquez Mindiola y el concejal Carlos Andrés Cotes, se encargaron de ponerle la bandera del Municipio al féretro del edil que permaneció durante cinco periodos consecutivos en la corporación.
En medio del llanto, recuerdos imborrables y observado la fotografía en la que se veía interactuando con ‘El Mocho’ Hinojosa, Alex Pana explicó la acción que hacía en la misma: “Le grapamos la camisa y le decíamos que el brazo (mocho) se le veía mejor así, nunca se molestó, siempre estuvo sonriente y jocoso, así era su personalidad”.
“Fue muy grato recordar ese pequeño momento con el concejal Wilber Hinojosa en la presidencia del Concejo. Todos los que estábamos reíamos con sus cuentos, ver la forma como Alex (Pana) le tomaba su brazo corto, lo mecía para un lado y otro, y él no decía nada, solamente irradiaba alegría, creo que no podré borrarlo de mi mente”, señaló Iván Lúquez.

Una misa le fue ofrecida a Wilber Hinojosa en Patillal por su eterno descanso.

Después de estar rodeado de sus amigos, seguidores y simpatizantes, el cuerpo de Wilber José Hinojosa Arias fue llevado, a la 1:00 de la tarde, hasta el corregimiento de Patillal, su tierra natal. Allí fue sepultado en medio de honores, aplausos y lágrimas.

El deceso de Wilber ‘El Mocho’ Hinojosa se produjo la noche del lunes anterior en Valledupar, después de haber sido internado en una clínica de la ciudad al presentar una falla cardiovascular, como dijo su hijo Wilber Antonio Hinojosa Borrego.

Una faceta oculta
Algo que siempre llamaba la atención de Wilber José Hinojosa Arias era la música vallenata y las frases populares. “Como un caballo descarrilado, sin un jinete que lo controle”, decía ‘El Mocho’ Hinojosa en una sesión cualquiera, para referirse a un tema especial frente al público.
Para el cantante y compositor, Ivo Díaz, ‘El Mocho’ Hinojosa “aprovechaba y hacía sus versos en las parradas, tenía sus canciones, y las componía por divertirse. Wilber llevaba por dentro esa venal musical”.
El secretario del Concejo, Armando Cuello, afirmó que en las grabaciones de las sesiones quedaron todos los cantos y estribillos, de canciones vallenata, con las que Hinojosa Arias utilizaba en forma de protesta.

Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
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