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Columnista - 8 enero, 2015

Luciano Gullo Fragoso

Luciano Gullo Fragoso, otro hijo de la mítica población de El Paso, nacido allí hace 93 años, falleció en Valledupar, el 31 de diciembre, día de San Silvestre. Gullo fue un consumado trashumante de la vida que en busca de un mejor vivir, deambulo por diferentes poblaciones del caribe, ejerciendo como telegrafista, interprete de la […]

Luciano Gullo Fragoso, otro hijo de la mítica población de El Paso, nacido allí hace 93 años, falleció en Valledupar, el 31 de diciembre, día de San Silvestre.

Gullo fue un consumado trashumante de la vida que en busca de un mejor vivir, deambulo por diferentes poblaciones del caribe, ejerciendo como telegrafista, interprete de la dulzaina, guacharaca y compositor de música vallenata, a la cual realmente le dedico toda su vida, dejando para la posteridad canciones antológicas.

Realmente, Luciano fue influenciado para llegar a la música por el músico barranquillero Alberto Pacheco Balmaceda a la sazón 4 rey vallenato, con el cual hizo entrañable amistad allí en la Arenosa, dado que la música vallenata, por nuestros lares no tenía ningún valor, en el conjunto de Pacheco, incursionó como guacharaquero y fue “El Gallo Mono”, uno de los primeros intérpretes que le grabó sus canciones, entre las cuales se cuenta un extraordinario suceso musical, “Linda Mariposa”, que después también fue grabada en su época dorada por Alfredo Gutiérrez, que hizo una buena versión de este canto.

En su trasegar musical llega a “La Esquina Del Progreso”, como era conocida la población de Fundación, departamento del Magdalena, a donde se daban cita los mejores acordeoneros, atraídos por la bonanza bananera de la región, allí se trenzaban los juglares, en grandes y prolongadas riñas musicales, hasta de una semana o más, adobadas por sabrosas viandas, lindas damas, ríos etílicos y buena paga.

Luciano Gullo allí se relacionó con los mejores intérpretes de la época, pero el estilo musical que sedujo al imberbe compositor, fue el fino digitar del maestro Luis E. Martínez, con quien hubo buena empatía; por muy corta temporada acompañó al “Pollo Vallenato”, en su deambular musical; Martínez le admiró su estilo de hacer canciones, le plasmó en el acetato una de las canciones de más reconocimiento en el catálogo de Gullo, “Donde quieras que vayas”, muchos años después, fue grabada por Rafael e Israel, “El Binomio de Oro”.

Uno de los hechos sobresalientes en la carrera del compositor, fue haber sido cofundador de una de las agrupaciones más ortodoxas en el vallenato “Los Playoneros del Cesar”, junto con Ovidio Granados, Eliécer Fragoso y otros muchachos de aventuras, llegaron a probar suerte a Santa Marta, a la Emisora Radio Magdalena, obligatoriamente le exigían para presentarse un nombre para la agrupación, se pusieron de acuerdo y la bautizaron de esta forma y nació exitoso este conjunto, para beneplácito de la música vallenata.

Ellos grabaron “Florecitas de Magnolia”, que después conocimos como “El Puente de Mariangola”, con Los Hermanos López, y la voz de Jorge Oñate, que es la agrupación que más divulgó la obra de Luciano Gullo Fragoso, en el repertorio de estos artistas aparece, “El Colibrí”, “Flor de Durania”,”El Compadre”.

Con su primera canción, “La Despedida”, que grabó en 1963, el rey de reyes primera generación, Nicolás Elías Mendoza, con el bombardino de Rosendo Martínez, en el último día del 2014 despedimos a Luciano Gullo Fragoso.

Columnista
8 enero, 2015

Luciano Gullo Fragoso

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Celso Guerra Gutiérrez

Luciano Gullo Fragoso, otro hijo de la mítica población de El Paso, nacido allí hace 93 años, falleció en Valledupar, el 31 de diciembre, día de San Silvestre. Gullo fue un consumado trashumante de la vida que en busca de un mejor vivir, deambulo por diferentes poblaciones del caribe, ejerciendo como telegrafista, interprete de la […]


Luciano Gullo Fragoso, otro hijo de la mítica población de El Paso, nacido allí hace 93 años, falleció en Valledupar, el 31 de diciembre, día de San Silvestre.

Gullo fue un consumado trashumante de la vida que en busca de un mejor vivir, deambulo por diferentes poblaciones del caribe, ejerciendo como telegrafista, interprete de la dulzaina, guacharaca y compositor de música vallenata, a la cual realmente le dedico toda su vida, dejando para la posteridad canciones antológicas.

Realmente, Luciano fue influenciado para llegar a la música por el músico barranquillero Alberto Pacheco Balmaceda a la sazón 4 rey vallenato, con el cual hizo entrañable amistad allí en la Arenosa, dado que la música vallenata, por nuestros lares no tenía ningún valor, en el conjunto de Pacheco, incursionó como guacharaquero y fue “El Gallo Mono”, uno de los primeros intérpretes que le grabó sus canciones, entre las cuales se cuenta un extraordinario suceso musical, “Linda Mariposa”, que después también fue grabada en su época dorada por Alfredo Gutiérrez, que hizo una buena versión de este canto.

En su trasegar musical llega a “La Esquina Del Progreso”, como era conocida la población de Fundación, departamento del Magdalena, a donde se daban cita los mejores acordeoneros, atraídos por la bonanza bananera de la región, allí se trenzaban los juglares, en grandes y prolongadas riñas musicales, hasta de una semana o más, adobadas por sabrosas viandas, lindas damas, ríos etílicos y buena paga.

Luciano Gullo allí se relacionó con los mejores intérpretes de la época, pero el estilo musical que sedujo al imberbe compositor, fue el fino digitar del maestro Luis E. Martínez, con quien hubo buena empatía; por muy corta temporada acompañó al “Pollo Vallenato”, en su deambular musical; Martínez le admiró su estilo de hacer canciones, le plasmó en el acetato una de las canciones de más reconocimiento en el catálogo de Gullo, “Donde quieras que vayas”, muchos años después, fue grabada por Rafael e Israel, “El Binomio de Oro”.

Uno de los hechos sobresalientes en la carrera del compositor, fue haber sido cofundador de una de las agrupaciones más ortodoxas en el vallenato “Los Playoneros del Cesar”, junto con Ovidio Granados, Eliécer Fragoso y otros muchachos de aventuras, llegaron a probar suerte a Santa Marta, a la Emisora Radio Magdalena, obligatoriamente le exigían para presentarse un nombre para la agrupación, se pusieron de acuerdo y la bautizaron de esta forma y nació exitoso este conjunto, para beneplácito de la música vallenata.

Ellos grabaron “Florecitas de Magnolia”, que después conocimos como “El Puente de Mariangola”, con Los Hermanos López, y la voz de Jorge Oñate, que es la agrupación que más divulgó la obra de Luciano Gullo Fragoso, en el repertorio de estos artistas aparece, “El Colibrí”, “Flor de Durania”,”El Compadre”.

Con su primera canción, “La Despedida”, que grabó en 1963, el rey de reyes primera generación, Nicolás Elías Mendoza, con el bombardino de Rosendo Martínez, en el último día del 2014 despedimos a Luciano Gullo Fragoso.