Un comentarista preguntó en su columna si estábamos al borde de una guerra mundial. Me gustó su escrito y me inquietó su pregunta, porque en estos días he estado releyendo sobre la Primera Guerra Mundial, llamada también la Gran Guerra o la Guerra de las Trincheras, que precisamente el 28 de julio, hoy, cumple cien años de su inicio. ¿La causa mediata? Es bien sabido que fue el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria, en Sarajevo; ha sido el quinto conflicto más mortífero de la historia de la humanidad, con nueve millones de combatientes muertos.
Así, los siglos veintey veintiunohan sido los más sangrientos, las guerras y conflictos bélicos han brotado en muchas regiones y países. En estos momentos están en la palestra: Croacia, que dio un puntillazo con el derrumbamientos de aviones, por los pro-rusos o por los separatistas, ¿quién sabe?, este fue el hecho que inquietó al columnista del que hablo al principio. Mientras tanto, vuelve el horror entre Israel y Palestina, más de mil muertos en la franja de Gaza y unos cuarenta de los israelitas. Siria está sumida en una guerra civil a la que no se le ve fin,inspirada en la Primavera Árabe. En Chechenia hay brotes esporádicos.
Irak, sigue con los bombazos, guerra entre partidos o facciones religiosas; Afganistán, misteriosa, se hunde en una violencia incomprensible heredada del enfrentamiento entre el Emirato Islámico y una coalición internacional comandada por Estados Unidos, que buscaba a Big Laden, y el conflicto sealojó hasta ahora.
En África cada día surge un trance ya sea tribal o entre naciones, el más actual es entre Sudán y Sudán del Sur, este último,como país, es elmás joven del mundo, se enfrentan por el petróleo.
En Suramérica: Venezuela vive a diario las protestas estudiantiles, la inseguridad, la violencia; Colombia con un conflicto violento en grado sumo, más antiguo que su propia existencia; países como Bolivia y Chile se disputan interesante franja de tierra.
En Centroamérica: México, con la virulencia del narcotráfico y algunos brotes de descontentos indígenas o estudiantiles.
Hay otras clases de conflictos o de guerra pasivas: el problema de Centroamérica enviando niños solos a Estados Unidos para que sean protegidos, pero se anuncia la deportación; y es guerra también la pobreza irredenta, la sed -hace tiempo se habló de que habría la guerra del agua y no está lejos- tomemos como ejemplo a La Guajira colombiana, llegará un momento en que la paciencia se acabe, y cuando eso sucede estalla el problema, Y es guerra el hambre, niños muertos por desnutrición; campos vueltos eriales; restos de animales sobre el suelo cuarteado, en fin, el mundo de sobresalto en sobresalto.
Luego de este somero recuento de algunos países en conflictos, se concluye que estamos en una Guerra Mundial, no declarada, entonces la pregunta sería: ¿Habrá algún día paz en el mundo?

Por Mary Daza Orozco