El sindicato internacional de futbolista advirtió a los jugadores profesionales sobre las prácticas de agentes y empresarios falsos que han intentado estafar en las últimas semanas en numerosas ocasiones, mayoritariamente en países de Sudamérica, publicó la agencia EFE en su portal de noticias.

Ante las denuncias recibidas, el órgano que respalda el oficio de jugador de fútbol ha pedido cautela a los futbolistas si algún agente desconocido contacta con ellos para que intenten obtener la mayor información posible sobre la persona y lo comuniquen al sindicato de sus respectivos países.
Igualmente ha pedido a los futbolistas que no hagan ninguna transferencia monetaria que les solicite un agente en nombre de un club que pueda tener interés en contratarles, ya que los clubes deben ocuparse de los costos iniciales y los que deben pagar por el permiso de trabajo, que se pide una vez que el jugador firme un contrato de trabajo con cualquier club.

También ha solicitado a los jugadores que hayan sido víctimas de estas prácticas para que comuniquen los hechos al sindicato de su país “para proteger a sus compañeros de profesión”, dijo EFE.
Hace menos de un año, tres futbolistas ghaneses denunciaron haber sido estafados por un empresario peruano, que les aseguró jugar en un equipo de Primera División a cambio de dinero. Ellos llegaron hace dos meses y no encontraron nada, pero para su suerte aparecieron almas bondadosas que los ayudaron a retornar a su país de origen.
En el Cesar
Sobre el tema, el presidente de la Liga de fútbol del Cesar, Milton Daza Bermúdez dijo que “en buena hora los organismos que respaldan al futbolista, hagan esas advertencias porque en nuestro medio abundan padres de familia y jugadores muy ingenuos que entregan sus servicios a personas desconocidas que se hacen llamar empresarios y lo que hacen es explotar al jugador. A nosotros como liga a veces no nos creen y algunos padres caen en la trampa”.
El máximo dirigente del fútbol cesarense recordó los casos registrados en los municipios de Codazzi y Curumaní. “Mire, a Codazzi llegó un señor que se hizo pasar por argentino y llevó a unos muchachos a una casafinca. Allá pasaron trabajo y algunos se vinieron por las precarias condiciones en las que dormían. Yo hice la advertencia y me gané muchos enemigos. Lo mismo ocurrió con un señor de Medellín que llegó a Curumaní y se llevó a diez jugadores y no pasó nada, esos muchachos dormían y comían mal, entonces, es un campanazo para los padres y jugadores para que miren bien a quién le firman y despierten sobre esta situación que en mayor proporción se ve en las provincias”.