Aduciendo asuntos de carácter familiar, la mañana de ayer viernes durante la sesión del Concejo Municipal, la concejala Fabiola Zuleta Barros radicó su carta de renuncia a su curul en dicha corporación.

En el escrito, la militante del Partido Liberal pidió a la plenaria del Concejo aceptar su solicitud, debido a que cuestiones familiares le exigen su presencia y de su completa dedicación fuera de la ciudad, “impidiéndome estos atender como deber ser, mis funciones de concejala del municipio de Valledupar”.
La decisión de Fabiola Zuleta se da luego de varias ausencias injustificadas en el periodo ordinario, comprendido por los meses de marzo y abril, por lo que si no renunciaba al cargo, decisiones de plenaria podían sacarla del cargo.

En el texto, la concejala agradeció el apoyo que le brindó el Partido Liberal, que avaló sus aspiraciones para ser concejal, así como a quienes la eligieron; “quiero manifestar mi profundo agradecimiento a mis electores que depositaron su confianza y creyeron en nuestro proyecto político y social”, escribió textualmente.
El presidente de la corporación, Hernán Felipe Araújo dijo que debido a su ausencia, la plenaria del Concejo le había solicitado las justificaciones y le habían notificado su pérdida de derechos porque ya había superado un tope de faltas a sesiones.

A partir de la renuncia de Fabiola, se declara vacancia de la curul y se convoca al siguiente en la lista, sumado a un procedimiento interno del Concejo, para verificar con el Partido Liberal y la Registraduría Nacional del Estado Civil, que quien llegue al Concejo cuente con todas las facultades.

Andreina Bandera / EL PILÓN
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