Celebramos que en Valledupar se haya llevado a cabo una reunión de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz para que las mandatarias pensaran cuál y cómo será su papel en el posconflicto. Durante los días que duró el encuentro que tuvo como finalidad la promoción del diálogo para la implementación de […]
Celebramos que en Valledupar se haya llevado a cabo una reunión de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz para que las mandatarias pensaran cuál y cómo será su papel en el posconflicto. Durante los días que duró el encuentro que tuvo como finalidad la promoción del diálogo para la implementación de los acuerdos de paz, abordaron temas interesantes como el trabajo en red, retos regionales para la implementación de los acuerdos y la gestión local para el posconflicto con miras a la construcción de paz territorial.
Tienen las mujeres un importante compromiso en el tema de paz y hoy cuando en el país se conmemora por tercera ocasión el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno, se invita a las mujeres, desde el hogar o los roles de liderazgo que ejerzan, a trabajar por la armonía comunitaria, ya bastante han sufrido los colombianos.
El 25 de mayo de 2015 se celebró por primera vez en Colombia el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno, que nació como una medida de reparación individual solicitada por la periodista del diario El Espectador, Jineth Bedoya Lima, quien sobrevivió al secuestro, tortura y ataque sexual cometido por actores del conflicto armado colombiano en el año 2000, mientras ella se desempeñaba en su ejercicio profesional como periodista judicial.
La presión social ejercida por la periodista y otras víctimas llevó a que el Gobierno nacional emitiera el Decreto 1480 de agosto de 2014, declarando el 25 de mayo como el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno.
El caso de la periodista Jineth Bedoya Lima, declarado de lesa humanidad por la Fiscalía de Colombia en septiembre de 2014, es un ejemplo de lo que no se quiere que se repite en Colombia, donde según registros del Gobierno Nacional, ya se han reconocido cerca de 20.000 víctimas de delitos contra la libertad e integridad sexual, de las que el 91 % son mujeres.
Los escenarios para poner el grano de arena están dados. En el Cesar comenzó la implementación de la estrategia ‘RedConstruyendo’, que busca garantizar el acceso a la justicia, y contribuir a eliminar las barreras a nivel local en materia de acceso y atención integral, promoviendo la construcción de relaciones de confianza entre la comunidad y la institucionalidad para la garantía de los derechos de las mujeres víctimas.
El camino apenas inicia y se necesita la conexión social para construir un mejor territorio. Por lo menos las mandatarias locales de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz se comprometieron a hacer un aporte para la implementación de los Acuerdos de Paz en el territorio.
Celebramos que en Valledupar se haya llevado a cabo una reunión de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz para que las mandatarias pensaran cuál y cómo será su papel en el posconflicto. Durante los días que duró el encuentro que tuvo como finalidad la promoción del diálogo para la implementación de […]
Celebramos que en Valledupar se haya llevado a cabo una reunión de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz para que las mandatarias pensaran cuál y cómo será su papel en el posconflicto. Durante los días que duró el encuentro que tuvo como finalidad la promoción del diálogo para la implementación de los acuerdos de paz, abordaron temas interesantes como el trabajo en red, retos regionales para la implementación de los acuerdos y la gestión local para el posconflicto con miras a la construcción de paz territorial.
Tienen las mujeres un importante compromiso en el tema de paz y hoy cuando en el país se conmemora por tercera ocasión el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno, se invita a las mujeres, desde el hogar o los roles de liderazgo que ejerzan, a trabajar por la armonía comunitaria, ya bastante han sufrido los colombianos.
El 25 de mayo de 2015 se celebró por primera vez en Colombia el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno, que nació como una medida de reparación individual solicitada por la periodista del diario El Espectador, Jineth Bedoya Lima, quien sobrevivió al secuestro, tortura y ataque sexual cometido por actores del conflicto armado colombiano en el año 2000, mientras ella se desempeñaba en su ejercicio profesional como periodista judicial.
La presión social ejercida por la periodista y otras víctimas llevó a que el Gobierno nacional emitiera el Decreto 1480 de agosto de 2014, declarando el 25 de mayo como el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual en el Marco del Conflicto Armado Interno.
El caso de la periodista Jineth Bedoya Lima, declarado de lesa humanidad por la Fiscalía de Colombia en septiembre de 2014, es un ejemplo de lo que no se quiere que se repite en Colombia, donde según registros del Gobierno Nacional, ya se han reconocido cerca de 20.000 víctimas de delitos contra la libertad e integridad sexual, de las que el 91 % son mujeres.
Los escenarios para poner el grano de arena están dados. En el Cesar comenzó la implementación de la estrategia ‘RedConstruyendo’, que busca garantizar el acceso a la justicia, y contribuir a eliminar las barreras a nivel local en materia de acceso y atención integral, promoviendo la construcción de relaciones de confianza entre la comunidad y la institucionalidad para la garantía de los derechos de las mujeres víctimas.
El camino apenas inicia y se necesita la conexión social para construir un mejor territorio. Por lo menos las mandatarias locales de la Red de Alcaldesas por la Democracia y la Paz se comprometieron a hacer un aporte para la implementación de los Acuerdos de Paz en el territorio.