El secretario de Tránsito y Transporte, Roberto Daza, habló con los taxistas y se comprometieron a observar los próximos ocho días para una reevaluación de control al transporte ilegal en la ciudad. Los taxistas insistieron en que no están produciendo siquiera para sostener sus vehículos.
El plantón y la movilización por diferentes sectores de la ciudad de por lo menos 70 taxistas, produjo como resultado una reunión con el secretario de Tránsito y Transporte de Valledupar, Roberto Daza, donde acordaron tomarse los próximos ocho días para analizar los controles al transporte ilegal, en especial al parrillero hombre mayor de 18 años.
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Los taxistas se movilizaron en masa por las principales arterias de Valledupar, para exigirle a la administración municipal que los ayude en la difícil situación que viene atravesando el gremio por la crisis de la covid-19, y lo que ellos han denominado falta de control al transporte ilegal representado especialmente en el accionar de las ‘mototaxis’.
En medio de una marcha pacífica, los taxistas hicieron sonar sus pitos y se parquearon -hasta ser escuchados por el secretario de Tránsito de Valledupar- en la parte trasera de la Alcaldía, obstruyendo la carrera cuarta, uno de los principales pasos viales para la movilidad de la ciudad.
Julio César Domínguez, presidente del sindicato de taxistas de Valledupar, dijo que entienden la situación que se vive de manera generalizada, pero que ellos no han sido ayudados de ninguna manera: “Nosotros sabemos que todos estamos padeciendo lo mismo, pero el alcalde no nos ha tenido en cuenta. El transporte legal en Valledupar está en UCI, si hablamos de las empresas de transporte colectivo están quebradas, no hay ni para el combustible de las busetas, nosotros estamos igual y no nos dan la mano”, aseguró.
El presidente del gremio, sostiene que van a pernoctar en la carrera cuarta por lo menos hasta que el alcalde Mello Castro o el secretario de Tránsito y Transporte, Roberto Daza, les entreguen una fecha de encuentro para describirles la difícil situación que están atravesando, la cual es acentuada por el libre accionar del transporte ilegal.
“Las mototaxis andan por su cuenta en toda la ciudad, para ellos no hay control, mientras que nosotros pagamos impuestos, nos exigen pólizas, protocolos de bioseguridad -los que siguen por norma, responsabilidad y autoprotección- mientras que los señores de las motos andan como si nada. No respetan distanciamiento y encima suben hasta dos personas en una motocileta”, indicó Domínguez, reclamando más accionar de la policía al respecto.
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Según el líder del gremio de taxis, no hay ningún control al mototaxismo y esto se puede convertir en un verdadero problema de salud pública. “¿Qué distanciamiento puede existir entre un conductor de motocicleta y su parrillero? Hay menos de 10 cm de distancia, en ocasiones se suben hasta dos personas y andan por toda la ciudad. En verdad que en Valledupar este virus no se ha expandido porque Dios nos quiere mucho”, enfatizó.
Por su lado, el secretario de Tránsito señaló que se escucharon las propuestas de los taxistas y se estudiarán.
“Nos reunimos con los taxistas, escuchamos sus inquietudes y nos comprometimos a que en ocho días nos reuniremos en una mesa de trabajo donde evaluaremos lo que estamos haciendo en materia de control a la movilidad, estamos comprometidos al igual que la policía en ser más estrictos. Este es un gremio -los taxistas- que genera una dinámica en la economía de la ciudad y cuentan con todo el apoyo de esta administración”, indicó Roberto Daza, secretario de Tránsito y Transporte de Valledupar.
Los taxistas en gran parte conductores -no propietarios- aseguran que en un día de trabajo en plena pandemia de la covid-19, ni siquiera les queda para llevar a sus casas. Pagan tarifas que oscilan entre los 30 y 35 mil pesos, sin embargo, dicen estar agradecidos con los propietarios de los vehículos que han sido comprensivos.
El secretario de Tránsito y Transporte, Roberto Daza, habló con los taxistas y se comprometieron a observar los próximos ocho días para una reevaluación de control al transporte ilegal en la ciudad. Los taxistas insistieron en que no están produciendo siquiera para sostener sus vehículos.
El plantón y la movilización por diferentes sectores de la ciudad de por lo menos 70 taxistas, produjo como resultado una reunión con el secretario de Tránsito y Transporte de Valledupar, Roberto Daza, donde acordaron tomarse los próximos ocho días para analizar los controles al transporte ilegal, en especial al parrillero hombre mayor de 18 años.
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Los taxistas se movilizaron en masa por las principales arterias de Valledupar, para exigirle a la administración municipal que los ayude en la difícil situación que viene atravesando el gremio por la crisis de la covid-19, y lo que ellos han denominado falta de control al transporte ilegal representado especialmente en el accionar de las ‘mototaxis’.
En medio de una marcha pacífica, los taxistas hicieron sonar sus pitos y se parquearon -hasta ser escuchados por el secretario de Tránsito de Valledupar- en la parte trasera de la Alcaldía, obstruyendo la carrera cuarta, uno de los principales pasos viales para la movilidad de la ciudad.
Julio César Domínguez, presidente del sindicato de taxistas de Valledupar, dijo que entienden la situación que se vive de manera generalizada, pero que ellos no han sido ayudados de ninguna manera: “Nosotros sabemos que todos estamos padeciendo lo mismo, pero el alcalde no nos ha tenido en cuenta. El transporte legal en Valledupar está en UCI, si hablamos de las empresas de transporte colectivo están quebradas, no hay ni para el combustible de las busetas, nosotros estamos igual y no nos dan la mano”, aseguró.
El presidente del gremio, sostiene que van a pernoctar en la carrera cuarta por lo menos hasta que el alcalde Mello Castro o el secretario de Tránsito y Transporte, Roberto Daza, les entreguen una fecha de encuentro para describirles la difícil situación que están atravesando, la cual es acentuada por el libre accionar del transporte ilegal.
“Las mototaxis andan por su cuenta en toda la ciudad, para ellos no hay control, mientras que nosotros pagamos impuestos, nos exigen pólizas, protocolos de bioseguridad -los que siguen por norma, responsabilidad y autoprotección- mientras que los señores de las motos andan como si nada. No respetan distanciamiento y encima suben hasta dos personas en una motocileta”, indicó Domínguez, reclamando más accionar de la policía al respecto.
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Según el líder del gremio de taxis, no hay ningún control al mototaxismo y esto se puede convertir en un verdadero problema de salud pública. “¿Qué distanciamiento puede existir entre un conductor de motocicleta y su parrillero? Hay menos de 10 cm de distancia, en ocasiones se suben hasta dos personas y andan por toda la ciudad. En verdad que en Valledupar este virus no se ha expandido porque Dios nos quiere mucho”, enfatizó.
Por su lado, el secretario de Tránsito señaló que se escucharon las propuestas de los taxistas y se estudiarán.
“Nos reunimos con los taxistas, escuchamos sus inquietudes y nos comprometimos a que en ocho días nos reuniremos en una mesa de trabajo donde evaluaremos lo que estamos haciendo en materia de control a la movilidad, estamos comprometidos al igual que la policía en ser más estrictos. Este es un gremio -los taxistas- que genera una dinámica en la economía de la ciudad y cuentan con todo el apoyo de esta administración”, indicó Roberto Daza, secretario de Tránsito y Transporte de Valledupar.
Los taxistas en gran parte conductores -no propietarios- aseguran que en un día de trabajo en plena pandemia de la covid-19, ni siquiera les queda para llevar a sus casas. Pagan tarifas que oscilan entre los 30 y 35 mil pesos, sin embargo, dicen estar agradecidos con los propietarios de los vehículos que han sido comprensivos.