Este martes Senegal derrotó a Polonia 2-1 durante el último partido de la primera jornada del Mundial de Rusia.
Este martes Senegal derrotó a Polonia 2-1 durante el último partido de la primera jornada del Mundial de Rusia. Desplegando una línea atacante con hasta cuatro delanteros, con dos torres en el área y dos extremos rápidos y hábiles, Senegal presentó su firme candidatura para convertirse en la selección revelación de este verano.
En el primer tiempo se adelanta Senegal con un disparo de Gueye que el polaco Cionek envió al fondo de la red cuando trataba de desviar la trayectoria. El tanto que abrió el marcador se celebró por todo lo alto en la grada del estadio del Spartak.
Con un tiro libre directo de Lewandowski, Polonia anota su primer gol tras una jugada a balón parado, apenas inquietando a la portería de Ndiaye en el segundo tiempo. Luego, Mbaye Niang, permitió al seleccionado africano ponerse adelante en el marcador a través de un autogol. Diversas fuentes señalan que fue un partido precioso a pesar de que no hubo demasiadas ocasiones claras. No faltó la intensidad y tampoco hubo tregua.
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Este martes Senegal derrotó a Polonia 2-1 durante el último partido de la primera jornada del Mundial de Rusia.
Este martes Senegal derrotó a Polonia 2-1 durante el último partido de la primera jornada del Mundial de Rusia. Desplegando una línea atacante con hasta cuatro delanteros, con dos torres en el área y dos extremos rápidos y hábiles, Senegal presentó su firme candidatura para convertirse en la selección revelación de este verano.
En el primer tiempo se adelanta Senegal con un disparo de Gueye que el polaco Cionek envió al fondo de la red cuando trataba de desviar la trayectoria. El tanto que abrió el marcador se celebró por todo lo alto en la grada del estadio del Spartak.
Con un tiro libre directo de Lewandowski, Polonia anota su primer gol tras una jugada a balón parado, apenas inquietando a la portería de Ndiaye en el segundo tiempo. Luego, Mbaye Niang, permitió al seleccionado africano ponerse adelante en el marcador a través de un autogol. Diversas fuentes señalan que fue un partido precioso a pesar de que no hubo demasiadas ocasiones claras. No faltó la intensidad y tampoco hubo tregua.
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