En la madrugada del lunes 10 de junio, un acto de violencia acabó con la vida de Yuleidis Patricia Gámez Gutiérrez en el barrio El Carmen del corregimiento de Guaymaral, zona rural de Valledupar. El día de los hechos, la hoy occisa cumplía 38 años. 

La noche del domingo 9 de junio, Yuleidis discutió con su esposo Pedro Pablo Padilla Vásquez, de 29 años, en su residencia. Durante la disputa, Pedro la agredió física y verbalmente, dejándole marcas en su rostro, cuello y una mordedura en la oreja. Buscando refugio, la víctima decidió irse a la casa de su tía, cercana a su hogar.

Sin embargo, cuando Yuleidis se encontraba sentada a orillas de la carretera, tratando de calmarse, Pedro la alcanzó nuevamente y la atacó con un cuchillo. La víctima intentó huir, pero fue agredida en el cuello y cayó al borde de la carretera.

“Él se voló por el patio de la casa, llegó con un cuchillo grande y se le va por la espalda, ella intenta correr y es donde él la agrede en el cuello e inmediatamente ella cae en la orilla de la carretera”, manifestó Yuli, tía de la occisa.

LO HABÍA DENUNCIADO POR VIOLENCIA INTRAFAMILIAR

Según los familiares de Yuleidis, la discusión se originó por los celos enfermizos de Pedro. A pesar de que ella había expresado su deseo de separarse en varias ocasiones, él se negaba a aceptarlo. Incluso, hace seis meses, Yuleidis presentó una denuncia por violencia intrafamiliar, ya que Pedro la agredió violentamente y quemó todas sus pertenencias, incluyendo la ropa de ella y de sus hijos. “Cuando ellos discutían ella no se dejaba, ella no le tenía miedo”, expresó familiar de la víctima. 

CAPTURA LEGALIZADA

La pareja llevaba siete años juntos y tenían una hija de 5 años, además de los otros cuatro hijos mayores de Yuleidis. La mujer asesinada era ama de casa, pero también trabajaba ocasionalmente como ayudante en ventas de comidas rápidas, vendía empanadas y, en algunas ocasiones, cervezas. Sus seres queridos la recuerdan como una persona fuerte, trabajadora y alegre.

Pedro Padilla, quien trabajaba en una bananera cercana a Guaymaral, se encuentra bajo custodia de las autoridades. Su captura ha sido legalizada y ahora espera el avance del proceso para ser juzgado por el delito de feminicidio agravado.

El comandante de la Policía Metropolitana de Valledupar, coronel Alex Durán, envió un mensaje contundente contra la violencia de género. “Estos crímenes no quedarán impunes. Estamos comprometidos a proteger a nuestras mujeres y llevar a los responsables ante la justicia”, afirmó.