Una odisea en materia de servicios públicos, especialmente del alcantarillado, afrontan los habitantes del barrio Simón Bolívar, debido al deterioro e incapacidad de los tubos que en cualquier momento haría colapsar ese sistema, generando una emergencia sanitaria.
Quienes residen en este barrio, solicitan de manera urgente el cambio total de la tubería del alcantarillado, a raíz de los graves problemas que viene afrontando en sus viviendas, entre ellos que en muchas ocasiones se devuelven las aguas servidas a las cisternas, situación que se presenta porque al tubería del acueducto es deficiente y obsoleta.
Según los líderes de la Junta de Acción Comunal, la tubería de cemento enterrada hace cerca de 40 años, es de un diámetro de l9 pulgadas y según los expertos en esta materia, se requiere de una tubería con capacidad de 30 pulgadas, que permita evacuar rápidamente hacia el emisario final, en este caso la laguna de oxidación o estabilización.
Sumado a esta problemática, está la falencia del servicio de acueducto, porque son pocas las veces que el líquido llega a las viviendas durante el día y tienen que esperar las horas de la noche para poder recoger agua, de todas formas hay poca presión.
Otro de los puntos expuestos por la comunidad, es la inseguridad que siente ante la presencia de jóvenes drogadictos en ciertos sectores, entre ellos el parque, de igual forma algunos vándalos que destruyen los bienes comunes, esto se convierte en lunares negros de la zona que ha sido, pero para contrarrestar esta situación se cuenta con la presencia de varios agentes de la Policía.
Sin zona residencial
Los moradores del Simón Bolívar que representan más de 400 familiares residentes en el barrio, manifestaron su preocupación porque su zona residencial se ve amenazada ante la existencia de establecimientos como cantinas, bares, discotecas, droguerías, lavaderos de carro, talleres de mecánica automotriz, clínicas, terminal de transporte intermunicipal y otros negocios que no están contemplados en el Plan de ordenamiento territorial, POT.
Adalberto Torres Flórez, vicepresidente de la Junta de Acción Comunal. Gracias a Dios que hemos contado con el apoyo de la Policía, quienes mantienen la vigilancia para hacerle frente a los delincuentes que campean en este sector. Esto aquí era antes invivible, los maleantes nos tenían azotados.
Dagoberto Rodríguez Maestre, coordinador cívico. Espero que con el trazado del Sistema Estratégico de Transporte de la ciudad, tengan en cuenta el rediseño de la avenida Simón Bolívar y erradiquen una gran cantidad de negocios que causan molestias.
Gustavo Rincón Jiménez, presidente de la Junta de Acción Comunal. Exalto la colaboración ciudadana para servicio de la misma comunidad. Insistió en que las autoridades ejerzan un mayor control a los negocios abiertos al público.
Una odisea en materia de servicios públicos, especialmente del alcantarillado, afrontan los habitantes del barrio Simón Bolívar, debido al deterioro e incapacidad de los tubos que en cualquier momento haría colapsar ese sistema, generando una emergencia sanitaria.
Quienes residen en este barrio, solicitan de manera urgente el cambio total de la tubería del alcantarillado, a raíz de los graves problemas que viene afrontando en sus viviendas, entre ellos que en muchas ocasiones se devuelven las aguas servidas a las cisternas, situación que se presenta porque al tubería del acueducto es deficiente y obsoleta.
Según los líderes de la Junta de Acción Comunal, la tubería de cemento enterrada hace cerca de 40 años, es de un diámetro de l9 pulgadas y según los expertos en esta materia, se requiere de una tubería con capacidad de 30 pulgadas, que permita evacuar rápidamente hacia el emisario final, en este caso la laguna de oxidación o estabilización.
Sumado a esta problemática, está la falencia del servicio de acueducto, porque son pocas las veces que el líquido llega a las viviendas durante el día y tienen que esperar las horas de la noche para poder recoger agua, de todas formas hay poca presión.
Otro de los puntos expuestos por la comunidad, es la inseguridad que siente ante la presencia de jóvenes drogadictos en ciertos sectores, entre ellos el parque, de igual forma algunos vándalos que destruyen los bienes comunes, esto se convierte en lunares negros de la zona que ha sido, pero para contrarrestar esta situación se cuenta con la presencia de varios agentes de la Policía.
Sin zona residencial
Los moradores del Simón Bolívar que representan más de 400 familiares residentes en el barrio, manifestaron su preocupación porque su zona residencial se ve amenazada ante la existencia de establecimientos como cantinas, bares, discotecas, droguerías, lavaderos de carro, talleres de mecánica automotriz, clínicas, terminal de transporte intermunicipal y otros negocios que no están contemplados en el Plan de ordenamiento territorial, POT.
Adalberto Torres Flórez, vicepresidente de la Junta de Acción Comunal. Gracias a Dios que hemos contado con el apoyo de la Policía, quienes mantienen la vigilancia para hacerle frente a los delincuentes que campean en este sector. Esto aquí era antes invivible, los maleantes nos tenían azotados.
Dagoberto Rodríguez Maestre, coordinador cívico. Espero que con el trazado del Sistema Estratégico de Transporte de la ciudad, tengan en cuenta el rediseño de la avenida Simón Bolívar y erradiquen una gran cantidad de negocios que causan molestias.
Gustavo Rincón Jiménez, presidente de la Junta de Acción Comunal. Exalto la colaboración ciudadana para servicio de la misma comunidad. Insistió en que las autoridades ejerzan un mayor control a los negocios abiertos al público.