El talentoso hijo del legendario juglar Leandro Díaz celebra 40 años de vida artística. En entrevista con EL PILÓN reafirmó su compromiso de preservar la esencia del vallenato tradicional.
En una época musical donde la nueva generación del vallenato se inclina hacia lo que ellos denominan “modernidad”, Ivo Díaz, el talentoso hijo del legendario juglar Leandro Díaz, se mantiene firme en su compromiso de preservar la esencia del vallenato tradicional.
Nacido en el municipio de San Diego (Cesar), Ivo creció inmerso en un ambiente donde los juglares transmitían las raíces y las melodías auténticas de la tierra. Este legado lo heredó de su padre, Leandro Díaz, quien le abrió las puertas de la música vallenata desde temprana edad.
En su hogar, Ivo tuvo la oportunidad de compartir, conocer y aprender de cerca de algunos de los grandes maestros del vallenato, como Emiliano Zuleta, Lorenzo Morales, Colacho Mendoza, Luis Enrique Martínez, Alejo Durán y Poncho Cotes. Estos encuentros enriquecieron su comprensión del vallenato y reforzaron su compromiso de llevar adelante la tradición.
Por eso hoy, cuarenta años después de emprender su carrera artística, este destacado cantautor, junto a otro Rey de Reyes, Almes Granados, sigue en una misión conjunta: salvaguardar y promover la identidad del folclore vallenato.
Juntos trabajan incansablemente para asegurarse de que las raíces del vallenato sigan vibrando en el corazón de cada acorde y en las letras que narran las historias de la tierra y su gente.
“Son muchas cosas lo que hemos logrado, y también muchas que se quedaron en el camino, pero podemos decir que en estos 40 años hemos defendido y difundido nuestra música. Yo pude fácilmente apartarme, como han hecho casi todos, que se han ido por la línea comercial que por el sostenimiento del folclor en sí. Pero me motivó más la convivencia de los juglares”, afirmó Ivo en diálogo con EL PILÓN.
Señaló que, aunque a veces ha pensado en salirse de lo tradicional e incursionar en el llamado vallenato ‘moderno o comercial’, una especie de poder interior se los impide salirse.
“A veces con Almes (Granados) hemos pensado en hacer algo distinto para darle dinámica a un grupo musical del cual dependen por lo menos 20 familias. Sin embargo, seguimos aferrados. No es que no queramos o podamos hacer otra cosa, pero es que el vallenato tradicional ejerce en nosotros un poder, nosotros somos eso, la esencia; coger hacia otro lado yo creo que ni los dedos del acordeón se lo permiten, lo mismo me pasa a mí; a veces siento que me he quedado solo tratando de mantener la cultura línea musical”, dijo el hijo de Leandro.
“Hay momentos donde he pensado hacer lo mismo que han hecho la mayoría, que se han desviado hacia otros temas, porque no es fácil cantar vallenato tradicional en una época donde el vallenato lo cambiaron, donde las nuevas generaciones en la búsqueda de su identidad han perdido la identidad”, añadió Ivo.
Para conmemorar la trayectoria de cuatro décadas de una de las voces más icónicas del vallenato se organizó este viernes una velada especial en el Auditorio Crispín Villazón de Comfacesar, llena de magia y música. Allí se darán cita destacados acordeoneros y juglares vallenatos, quienes han sido compañeros en la travesía musical de Ivo Díaz.
La primera canción de Ivo Díaz la escribió a los 12 años y la tituló ‘Para Leandro’ en honor a su padre. Un murmullo, un verso cantado bajito alejado de una parranda en la que se encontraban su padre y sus amigos, alertó a los amigos de Leandro, quienes quedaron atónitos al ver aquel pequeño interpretar los versos que había escrito:
“Ay mi nombre es Ivo Luis
mi apellido Díaz Ramos.
Este merengue al cantarlo
es alegría para mí
porque la vida es así
al cantar nos alegramos.
Solo tengo 12 años y compuse esta canción
inspirada con amor.
Dedicada para Leandro
Ese es mi padre adorado
por eso canto en su honor.
Yo le canto esta canción
de una rara melodía
Dedicada a Leandro Díaz
es está composición
Porque de mi dinastía
es un grande precursor”.
En 1983 Ivo Díaz grabó su primer trabajo musical, al lado del acordeonero Rafael Salas, Rey Vallenato y se tituló ‘Mil caricias’ en el cual se incluyeron canciones como ‘Jardinera’, ‘Mil caricias’, ‘Agonía’, entre otras.
Con ‘Toño’ Salas se mantuvo por dos años recorriendo los pueblos de la provincia donde empezó a gestarse el nombre de Ivo Díaz. En 1985 hace parte del grupo musical de Calixto Ochoa con quien grabó tres canciones en el álbum ‘La historia del Negro’.
Luego de su gesta con Calixto, el padre de Ivo Díaz crea una agrupación al lado de Fabio López, amigo y distinguido acordeonero de San Diego, Cesar. Allí empezó Ivo Díaz a intercambiar sus sentimientos por la música al lado de Leandro, allí empezó el cantante a quien su padre cedió su público para que lo reconociera.
En 1984, Ivo Díaz realizó su primera participación en el Festival de la Leyenda Vallenata con la canción inédita de su padre titulada ‘Las tres guitarras’ en la que quedó en segundo puesto. En 1986, se presentó a la piquería y resultó ganador como Rey de la Piquería.
Lea también: Juan David Atencia, el nuevo rey del Cuna de Acordeones que toca con los ojos del alma
Participó en la canción inédita y se convirtió en ganador con la canción de Pachito Mejía titulada: ‘La puya almojabanera’. En el Festival Vallenato de 1990 vuelve a ganar con la canción inédita con el tema ‘No hay tierra como mi tierra’, también de la autoría de Pachito Mejía. En 1991, ganó con el merengue de Gustavo Calderón Guerra ‘Momentos del ayer’.
Tres años más tarde hizo un homenaje a su padre con la canción ‘Dame Tu Alma’ con la que se convierte nuevamente en ganador en el Festival Vallenato, ocupando también el segundo puesto con una puya de Checa Ramírez.
En el Festival Vallenato 1995 presentó la canción ‘Almas Felices’ de Poncho Cotes Maya, una canción grabada por Iván Villazón. En 1996, presentó una canción de Poncho Cotes Maya y logra el primer puesto.
Acompañó al gran Emiliano Zuleta Díaz, en el Rey de Reyes de 1997, con la canción ‘Mi Pobre Valle’ y sale ganador junto Emiliano del primer Rey de Reyes de la Canción Inédita del Festival Vallenato.
Te puede interesar: El Festival Vallenato homenaje a Villazón ya tiene afiche
En 1999, canta con Beto Murgas el merengue ‘Nativo del Valle’ donde pierde al lado del juglar de la música vallenata, el maestro Luis Cujia con la canción ‘Yo soy el Folclor’ grabada por el Joe Arroyo.
En el 2000 volvió a participar con Beto Murgas con un merengue, pero no salieron ganadores; y en 2003, a Diomedes Díaz le cantaron ‘Cuatro Paredes’ al lado del Cocha Molina y quedaron en segundo puesto.
Como bien lo dice Ivo Díaz, la vida le prestó la suerte y el talento para ganar muchas canciones inéditas. En 2017 llegó a coronarse como Rey de Reyes de canción inédita con la canción que le hizo a Pablo López, ‘El Rey de los cajeros’.
Después de grabar con Rafael Salas y estar con Calixto Ochoa, se unió al gran maestro Colacho Mendoza con quien recorrió los mejores escenarios de Colombia durante 14 años. En 2003, cuando fallece Colacho, se une a Chiche Martínez, exitoso acordeonero que marcó su trayectoria al lado de Jorge Oñate, Iván Villazón y Poncho Zuleta.
En 2007, se une a Hugo Carlos Granados, tercer Rey de Reyes del Festival Vallenato, luego trabaja con Chemita Ramos en intervalos y llega Almes Granados, el quinto Rey de Reyes, con quien lleva ocho años coleccionando triunfos, canciones y discos.
“Las nuevas generaciones hay que guiarlas porque desconocen mucho de nuestra historia. Siempre aconsejo a las escuelas de acordeoneros, que no solo se enseñe tocar el acordeón sino como llegó y quiénes han sido los pioneros. Hace falta ayudarlos en la historiología y en eso nos tienen que ayudar en la institucionalidad”, puntualizó Ivo.
JOSÉ A. MARTÍNEZ / EL PILÓN
El talentoso hijo del legendario juglar Leandro Díaz celebra 40 años de vida artística. En entrevista con EL PILÓN reafirmó su compromiso de preservar la esencia del vallenato tradicional.
En una época musical donde la nueva generación del vallenato se inclina hacia lo que ellos denominan “modernidad”, Ivo Díaz, el talentoso hijo del legendario juglar Leandro Díaz, se mantiene firme en su compromiso de preservar la esencia del vallenato tradicional.
Nacido en el municipio de San Diego (Cesar), Ivo creció inmerso en un ambiente donde los juglares transmitían las raíces y las melodías auténticas de la tierra. Este legado lo heredó de su padre, Leandro Díaz, quien le abrió las puertas de la música vallenata desde temprana edad.
En su hogar, Ivo tuvo la oportunidad de compartir, conocer y aprender de cerca de algunos de los grandes maestros del vallenato, como Emiliano Zuleta, Lorenzo Morales, Colacho Mendoza, Luis Enrique Martínez, Alejo Durán y Poncho Cotes. Estos encuentros enriquecieron su comprensión del vallenato y reforzaron su compromiso de llevar adelante la tradición.
Por eso hoy, cuarenta años después de emprender su carrera artística, este destacado cantautor, junto a otro Rey de Reyes, Almes Granados, sigue en una misión conjunta: salvaguardar y promover la identidad del folclore vallenato.
Juntos trabajan incansablemente para asegurarse de que las raíces del vallenato sigan vibrando en el corazón de cada acorde y en las letras que narran las historias de la tierra y su gente.
“Son muchas cosas lo que hemos logrado, y también muchas que se quedaron en el camino, pero podemos decir que en estos 40 años hemos defendido y difundido nuestra música. Yo pude fácilmente apartarme, como han hecho casi todos, que se han ido por la línea comercial que por el sostenimiento del folclor en sí. Pero me motivó más la convivencia de los juglares”, afirmó Ivo en diálogo con EL PILÓN.
Señaló que, aunque a veces ha pensado en salirse de lo tradicional e incursionar en el llamado vallenato ‘moderno o comercial’, una especie de poder interior se los impide salirse.
“A veces con Almes (Granados) hemos pensado en hacer algo distinto para darle dinámica a un grupo musical del cual dependen por lo menos 20 familias. Sin embargo, seguimos aferrados. No es que no queramos o podamos hacer otra cosa, pero es que el vallenato tradicional ejerce en nosotros un poder, nosotros somos eso, la esencia; coger hacia otro lado yo creo que ni los dedos del acordeón se lo permiten, lo mismo me pasa a mí; a veces siento que me he quedado solo tratando de mantener la cultura línea musical”, dijo el hijo de Leandro.
“Hay momentos donde he pensado hacer lo mismo que han hecho la mayoría, que se han desviado hacia otros temas, porque no es fácil cantar vallenato tradicional en una época donde el vallenato lo cambiaron, donde las nuevas generaciones en la búsqueda de su identidad han perdido la identidad”, añadió Ivo.
Para conmemorar la trayectoria de cuatro décadas de una de las voces más icónicas del vallenato se organizó este viernes una velada especial en el Auditorio Crispín Villazón de Comfacesar, llena de magia y música. Allí se darán cita destacados acordeoneros y juglares vallenatos, quienes han sido compañeros en la travesía musical de Ivo Díaz.
La primera canción de Ivo Díaz la escribió a los 12 años y la tituló ‘Para Leandro’ en honor a su padre. Un murmullo, un verso cantado bajito alejado de una parranda en la que se encontraban su padre y sus amigos, alertó a los amigos de Leandro, quienes quedaron atónitos al ver aquel pequeño interpretar los versos que había escrito:
“Ay mi nombre es Ivo Luis
mi apellido Díaz Ramos.
Este merengue al cantarlo
es alegría para mí
porque la vida es así
al cantar nos alegramos.
Solo tengo 12 años y compuse esta canción
inspirada con amor.
Dedicada para Leandro
Ese es mi padre adorado
por eso canto en su honor.
Yo le canto esta canción
de una rara melodía
Dedicada a Leandro Díaz
es está composición
Porque de mi dinastía
es un grande precursor”.
En 1983 Ivo Díaz grabó su primer trabajo musical, al lado del acordeonero Rafael Salas, Rey Vallenato y se tituló ‘Mil caricias’ en el cual se incluyeron canciones como ‘Jardinera’, ‘Mil caricias’, ‘Agonía’, entre otras.
Con ‘Toño’ Salas se mantuvo por dos años recorriendo los pueblos de la provincia donde empezó a gestarse el nombre de Ivo Díaz. En 1985 hace parte del grupo musical de Calixto Ochoa con quien grabó tres canciones en el álbum ‘La historia del Negro’.
Luego de su gesta con Calixto, el padre de Ivo Díaz crea una agrupación al lado de Fabio López, amigo y distinguido acordeonero de San Diego, Cesar. Allí empezó Ivo Díaz a intercambiar sus sentimientos por la música al lado de Leandro, allí empezó el cantante a quien su padre cedió su público para que lo reconociera.
En 1984, Ivo Díaz realizó su primera participación en el Festival de la Leyenda Vallenata con la canción inédita de su padre titulada ‘Las tres guitarras’ en la que quedó en segundo puesto. En 1986, se presentó a la piquería y resultó ganador como Rey de la Piquería.
Lea también: Juan David Atencia, el nuevo rey del Cuna de Acordeones que toca con los ojos del alma
Participó en la canción inédita y se convirtió en ganador con la canción de Pachito Mejía titulada: ‘La puya almojabanera’. En el Festival Vallenato de 1990 vuelve a ganar con la canción inédita con el tema ‘No hay tierra como mi tierra’, también de la autoría de Pachito Mejía. En 1991, ganó con el merengue de Gustavo Calderón Guerra ‘Momentos del ayer’.
Tres años más tarde hizo un homenaje a su padre con la canción ‘Dame Tu Alma’ con la que se convierte nuevamente en ganador en el Festival Vallenato, ocupando también el segundo puesto con una puya de Checa Ramírez.
En el Festival Vallenato 1995 presentó la canción ‘Almas Felices’ de Poncho Cotes Maya, una canción grabada por Iván Villazón. En 1996, presentó una canción de Poncho Cotes Maya y logra el primer puesto.
Acompañó al gran Emiliano Zuleta Díaz, en el Rey de Reyes de 1997, con la canción ‘Mi Pobre Valle’ y sale ganador junto Emiliano del primer Rey de Reyes de la Canción Inédita del Festival Vallenato.
Te puede interesar: El Festival Vallenato homenaje a Villazón ya tiene afiche
En 1999, canta con Beto Murgas el merengue ‘Nativo del Valle’ donde pierde al lado del juglar de la música vallenata, el maestro Luis Cujia con la canción ‘Yo soy el Folclor’ grabada por el Joe Arroyo.
En el 2000 volvió a participar con Beto Murgas con un merengue, pero no salieron ganadores; y en 2003, a Diomedes Díaz le cantaron ‘Cuatro Paredes’ al lado del Cocha Molina y quedaron en segundo puesto.
Como bien lo dice Ivo Díaz, la vida le prestó la suerte y el talento para ganar muchas canciones inéditas. En 2017 llegó a coronarse como Rey de Reyes de canción inédita con la canción que le hizo a Pablo López, ‘El Rey de los cajeros’.
Después de grabar con Rafael Salas y estar con Calixto Ochoa, se unió al gran maestro Colacho Mendoza con quien recorrió los mejores escenarios de Colombia durante 14 años. En 2003, cuando fallece Colacho, se une a Chiche Martínez, exitoso acordeonero que marcó su trayectoria al lado de Jorge Oñate, Iván Villazón y Poncho Zuleta.
En 2007, se une a Hugo Carlos Granados, tercer Rey de Reyes del Festival Vallenato, luego trabaja con Chemita Ramos en intervalos y llega Almes Granados, el quinto Rey de Reyes, con quien lleva ocho años coleccionando triunfos, canciones y discos.
“Las nuevas generaciones hay que guiarlas porque desconocen mucho de nuestra historia. Siempre aconsejo a las escuelas de acordeoneros, que no solo se enseñe tocar el acordeón sino como llegó y quiénes han sido los pioneros. Hace falta ayudarlos en la historiología y en eso nos tienen que ayudar en la institucionalidad”, puntualizó Ivo.
JOSÉ A. MARTÍNEZ / EL PILÓN