Publicidad
Categorías
Categorías
El Vallenato - 2 febrero, 2019

La rebelión de los acordeoneros

Iván Zuleta y Juancho De La Espriella buscan que la figura del acordeonero vuelva a tener la relevancia de tiempos atrás. Para su grupo escogieron jóvenes deseosos de mostrarse en el mundo musical.

Juancho De La Espriella toca  desde  el mes pasado con  Julio Rojas Jr. y Carlos Mario Parra.
Juancho De La Espriella toca desde el mes pasado con Julio Rojas Jr. y Carlos Mario Parra.
Boton Wpp

Digitadores como Iván Zuleta y Juancho De La Espriella lideran en la actualidad grupos musicales, así como lo hace el Binomio de Oro y Omar Geles, en aras de rescatar el liderazgo de otrora.

Cansados de ser personajes secundarios en las agrupaciones musicales, algunos acordeoneros se revisten con el espíritu del emprendimiento para volver a ser la figura central y recobrar la importancia que tenían en el pasado. Dos ejemplos de ello son Iván Zuleta y Juancho De La Espriella; el primero con su marca ‘La Tropa de Iván Zuleta’ y el segundo con ‘Los de Juancho’. Ellos dialogaron con EL PILÓN sobre esa nueva faceta que ha sido recibida con beneplácito en los melómanos.

Zuleta luego de hacer parte de agrupaciones de cantantes reconocidos como Diomedes Díaz, Poncho Zuleta, Iván Villazón, Rafael Santos y Churo Díaz, y de un receso musical, decidió regresar a la música vallenata, pero esta vez siendo líder. “He sido muy respetuoso con los colegas acordeoneros que tienen su empleo y nunca he pretendido desarmar alguna agrupación, por eso asumí el reto de lanzar mi propio proyecto, para hacer un aporte al folclor vallenato, así como para darle la oportunidad a jóvenes talentos que se quieren mostrar en el vallenato, razón por la cual convoqué al cantante Mayo Castro y al acordeonero Harold Martínez”, enfatizó.

El artista, que ha sido rey vallenato en el Festival de la Leyenda Vallenata en las categorías de Infantil y Aficionado, y que fue rey vallenato en la categoría de piquería, manifestó: “Uno de los motivos por los que emprendí ese reto es al percibir que la titularidad del acordeonero se ha perdido. En las carátulas de los CD sale la fotografía del cantante adelante y la imagen del acordeonero sale detrás. En la parte económica hay una distancia muy grande; no hay punto de comparación con lo que devenga un cantante a un acordeonero en cada presentación. Un cantante aproximadamente recibe entre el 60 % al 70 % del dinero de las presentaciones, o sea más de la mitad, el resto es de la nómina, entre el que está el acordeonero”.

Iván Zuleta lanzó su proyecto el cinco de enero al lado de Mayo Castro y Harold Martínez.

Subrayó: “El acordeonero de hoy en día no lidera, sino que es un músico más de la agrupación; considero que hay que asumir retos, dejar el facilismo y arriesgar. Cuando la música comenzó los juglares tocaban y cantaban. Cuando los Hermanos López incluyen a Jorge Oñate en su agrupación, el cantante empezó a adueñarse de la titularidad. Pienso que hay demasiados acordeoneros y pocos cantantes, por ejemplo en la ciudad hay como tres academias para enseñar a tocar acordeón, pero no hay academias para enseñar a cantar. Es hora que los acordeoneros nos unamos. No tengo nada en contra de los cantantes, pero si les digo que hay que despertar; la vida es de retos y si no funcionan al menos se intenta”.

Por su parte, Juancho De la Espriella aseguró que la primera vez que se le cruzó la idea de formar grupo fue cuando se separó la primera vez con Silvestre, pero en ese momento no se atrevió; se unió con Martín Elías, El Mono Zabaleta, vino el tour de El Reencuentro y luego la unión con Peter Manjarrés. Al separarse con Peter decidió dar el “gran paso” llamando a Julio Rojas Jr., y Carlos Mario Parra.

“El vallenato empezó con el liderazgo de los acordeoneros, después se igualó de cantante a acordeonero y ahora han querido quitarle el protagonismo al acordeonero. A mí me parece que el equilibrio del asunto debe ser por partes iguales; tanto el cantante como el acordeonero tienen importancia y merecen la misma figuración. Hay una desproporción entre los salarios de acordeón y cantante, donde desafortunadamente de unos años para acá se desbordó de una manera muy desigual; es algo que todos los acordeoneros, desde los más famosos hasta los que empiezan carrera, deben de lidiar con ese problema”, manifestó.

De La Espriella considera: “Gran parte de lo que nos pasa es culpa de nosotros mismos porque la gran mayoría de los acordeoneros jóvenes tocan y llegan a su casa a jugar Playstation. Les doy mi ejemplo: el nombre y las relaciones del que gozo es porque desde el principio cuando nadie me conocía me preocupé por hacer valer mi nombre, porque mi imagen se manejará por partes iguales, por relacionarme con medios de comunicación y con empresarios”.

Esta época parece ser el despertar de los acordeoneros, no solo Zuleta y De La Espriella retoman el liderazgo y emprenden, también se destacan otros como Hugo Carlos Granados, ‘Rey de reyes’ del Festival Vallenato que recorre el mundo con su proyectol.

ANNELISE BARRIGA RAMÍREZ/ EL PILÓN
[email protected]

El Vallenato
2 febrero, 2019

La rebelión de los acordeoneros

Iván Zuleta y Juancho De La Espriella buscan que la figura del acordeonero vuelva a tener la relevancia de tiempos atrás. Para su grupo escogieron jóvenes deseosos de mostrarse en el mundo musical.


Juancho De La Espriella toca  desde  el mes pasado con  Julio Rojas Jr. y Carlos Mario Parra.
Juancho De La Espriella toca desde el mes pasado con Julio Rojas Jr. y Carlos Mario Parra.
Boton Wpp

Digitadores como Iván Zuleta y Juancho De La Espriella lideran en la actualidad grupos musicales, así como lo hace el Binomio de Oro y Omar Geles, en aras de rescatar el liderazgo de otrora.

Cansados de ser personajes secundarios en las agrupaciones musicales, algunos acordeoneros se revisten con el espíritu del emprendimiento para volver a ser la figura central y recobrar la importancia que tenían en el pasado. Dos ejemplos de ello son Iván Zuleta y Juancho De La Espriella; el primero con su marca ‘La Tropa de Iván Zuleta’ y el segundo con ‘Los de Juancho’. Ellos dialogaron con EL PILÓN sobre esa nueva faceta que ha sido recibida con beneplácito en los melómanos.

Zuleta luego de hacer parte de agrupaciones de cantantes reconocidos como Diomedes Díaz, Poncho Zuleta, Iván Villazón, Rafael Santos y Churo Díaz, y de un receso musical, decidió regresar a la música vallenata, pero esta vez siendo líder. “He sido muy respetuoso con los colegas acordeoneros que tienen su empleo y nunca he pretendido desarmar alguna agrupación, por eso asumí el reto de lanzar mi propio proyecto, para hacer un aporte al folclor vallenato, así como para darle la oportunidad a jóvenes talentos que se quieren mostrar en el vallenato, razón por la cual convoqué al cantante Mayo Castro y al acordeonero Harold Martínez”, enfatizó.

El artista, que ha sido rey vallenato en el Festival de la Leyenda Vallenata en las categorías de Infantil y Aficionado, y que fue rey vallenato en la categoría de piquería, manifestó: “Uno de los motivos por los que emprendí ese reto es al percibir que la titularidad del acordeonero se ha perdido. En las carátulas de los CD sale la fotografía del cantante adelante y la imagen del acordeonero sale detrás. En la parte económica hay una distancia muy grande; no hay punto de comparación con lo que devenga un cantante a un acordeonero en cada presentación. Un cantante aproximadamente recibe entre el 60 % al 70 % del dinero de las presentaciones, o sea más de la mitad, el resto es de la nómina, entre el que está el acordeonero”.

Iván Zuleta lanzó su proyecto el cinco de enero al lado de Mayo Castro y Harold Martínez.

Subrayó: “El acordeonero de hoy en día no lidera, sino que es un músico más de la agrupación; considero que hay que asumir retos, dejar el facilismo y arriesgar. Cuando la música comenzó los juglares tocaban y cantaban. Cuando los Hermanos López incluyen a Jorge Oñate en su agrupación, el cantante empezó a adueñarse de la titularidad. Pienso que hay demasiados acordeoneros y pocos cantantes, por ejemplo en la ciudad hay como tres academias para enseñar a tocar acordeón, pero no hay academias para enseñar a cantar. Es hora que los acordeoneros nos unamos. No tengo nada en contra de los cantantes, pero si les digo que hay que despertar; la vida es de retos y si no funcionan al menos se intenta”.

Por su parte, Juancho De la Espriella aseguró que la primera vez que se le cruzó la idea de formar grupo fue cuando se separó la primera vez con Silvestre, pero en ese momento no se atrevió; se unió con Martín Elías, El Mono Zabaleta, vino el tour de El Reencuentro y luego la unión con Peter Manjarrés. Al separarse con Peter decidió dar el “gran paso” llamando a Julio Rojas Jr., y Carlos Mario Parra.

“El vallenato empezó con el liderazgo de los acordeoneros, después se igualó de cantante a acordeonero y ahora han querido quitarle el protagonismo al acordeonero. A mí me parece que el equilibrio del asunto debe ser por partes iguales; tanto el cantante como el acordeonero tienen importancia y merecen la misma figuración. Hay una desproporción entre los salarios de acordeón y cantante, donde desafortunadamente de unos años para acá se desbordó de una manera muy desigual; es algo que todos los acordeoneros, desde los más famosos hasta los que empiezan carrera, deben de lidiar con ese problema”, manifestó.

De La Espriella considera: “Gran parte de lo que nos pasa es culpa de nosotros mismos porque la gran mayoría de los acordeoneros jóvenes tocan y llegan a su casa a jugar Playstation. Les doy mi ejemplo: el nombre y las relaciones del que gozo es porque desde el principio cuando nadie me conocía me preocupé por hacer valer mi nombre, porque mi imagen se manejará por partes iguales, por relacionarme con medios de comunicación y con empresarios”.

Esta época parece ser el despertar de los acordeoneros, no solo Zuleta y De La Espriella retoman el liderazgo y emprenden, también se destacan otros como Hugo Carlos Granados, ‘Rey de reyes’ del Festival Vallenato que recorre el mundo con su proyectol.

ANNELISE BARRIGA RAMÍREZ/ EL PILÓN
[email protected]