La historia de Griselda Blanco; ¿por qué le decían ‘La viuda negra’?
Blanco fue una narcotraficante colombiana. Netflix contará su historia en una serie protagonizada por Sofía Vergara.
El 29 de enero de Netflix estrenará ‘Griselda’, una serie de 6 capítulos protagonizada por la actriz barranquillera Sofía Vergara, quien personifica el papel de Griselda Blanco, narcotraficante y criminal colombiana conocida como ‘La viuda negra’ o ‘La madrina’.
Blanco nació en Cartagena, Bolívar, en 1943. Desde niña sufrió de violencia física y abusos sexuales que la marcaron de por vida, según está consignado en documentos que narran su vida personal y cómo logró convertirse en la mujer más poderosa del narcotráfico, por lo que algunos dicen que fue una de las fundadoras del Cártel de Medellín, dirigido por Pablo Escobar.
A los once años, ‘La viuda negra’ formó su primera banda criminal: un grupo de carteristas que robaba en los barrios más peligrosos de Medellín. La criminal se casó en tres ocasiones. Su primera pareja fue Carlos Trujillo, un falsificador de visas y padre de sus tres hijos. El segundo fue Alberto Bravo, un pequeño traficante que la introdujo en el mundo del tráfico de drogas.
En los años 70, Griselda y Bravo habían extendido su negocio y sobre todo, su nombre. Ella era ‘La Patrona’ y él había pasado a un segundo plano. Tanto que Bravo acabó muerto tras un enfrentamiento a disparos entre ambos.
El tercer y último esposo de Griselda Blanco fue Darío Sepúlveda, padre de su cuarto hijo, Michael Corleone, bautizado así por la película favorita de la narcotraficante, El Padrino. Fue apodada ‘La viuda negra’ por asesinar a 3 de sus esposos.
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Griselda Blanco se mudó a Miami, Estados Unidos, para expandir su negocio de fabricación, tráfico y comercialización de cocaína. El 17 de febrero de 1985 fue capturada en su casa y declarada culpable del tráfico de drogas. Fue acusada del asesinato de tres ciudadanos cubanos.
Durante su condena en prisión, asesinaron a tres de sus hijos. Una vez fue puesta en libertad en 2004, fue deportada a Colombia y llevó una vida tranquila. Griselda Blanco fue asesinada a tiros el 3 de septiembre de 2012, a los 69 años de edad, en una carnicería de la ciudad de Medellín.