En vista de la difícil situación que viven muchos migrantes que se encuentran en la capital del Cesar, grupos de la Policía Nacional en compañía de empresas, iglesias, profesionales y ciudadanos en general se unen para llevar alimentos a esta población.

La situación de vulnerabilidad que atraviesan muchos de los ciudadanos provenientes de Venezuela, que han llegado a Valledupar, ha generado que un sinnúmero de personas en la ciudad efectúen algunas acciones para brindarles una colaboración ya sea con alimentos, ropa, medicamentos u otros insumos.

En este caso, un grupo de la Policía Nacional se ha unido a iglesias, personas del común y empresarios de la ciudad para repartir comidas en distintos sectores de la capital del Cesar precisamente para venezolanos.

De acuerdo con José Rojas, sargento de la Policía Nacional y gestor de participación ciudadana, ya la semana pasada desarrollaron la actividad durante siete días entregando almuerzos frente al Hospital Eduardo Arredondo Daza sede San Martín. Esto se hizo en comunión con una iglesia cristiana y los médicos del centro de salud con lo que se logró un total de 700 almuerzos diarios repartidos a venezolanos.

Entre tanto, ayer iniciaron otra jornada de seis días denominada ‘Madrugando a desayunar con nuestros hermanos venezolanos’, en la cual quienes se vinculan brindan el aporte de 100 desayunos diarios mientras que la Policía Nacional realiza el acompañamiento a la actividad social.

“No es tanto el alimento físico sino también el espiritual porque de verdad hay muchas situaciones difíciles que están viviendo”, explicó el sargento Rojas en referencia a que también realizan un devocional durante la mañana.

Sumado a esto, algunos profesionales como médicos se han involucrado ofreciendo sus servicios para sumarse a la jornada de aportes para estas personas. Producto de esto se han encontrado venezolanos con hipertensión, problemas respiratorios por las condiciones en las que duermen y cuadros de diarrea.

La actividad de este semana la destinan a la población ubicada en el barrio San Fernando y para la cual la misma comunidad del barrio ya ha pedido apoyo.

De hecho, por el accionar de las autoridades y según expresó Rojas, ya se cumplió con un proceso de deportación del grupo de indígenas yukpa que se encontraba en el mismo sector.
Será la última actividad que realicen de este tipo dado el costo que implica y el hecho de que muchos migrantes están retornando a su país de origen.

Sin embargo, según Rojas, tienen previsto que el próximo año se unan varias sectoriales de la administración local a su trabajo como la Secretaría de Salud y de Gobierno a fin de que se puedan prevenir problemáticas sobre todo relacionadas con enfermedades.

A la par siguen desarrollando novenas de aguinaldos en sectores vulnerables como las urbanizaciones Nando Marín y Lorenzo Morales, así como el programa ‘Jóvenes a lo bien’ y las actividades de prevención del uso de pólvora.