A partir de una denuncia ciudadana las autoridades mediante un operativo lograron la captura de dos sujetos e incautaron 53 botellas de licor adulterado que serían comercializados durante el Festival Vallenato.

La diligencia se desarrolló por un allanamiento que se materializó en un inmueble ubicado en el barrio Villa del Rosario, donde no solamente encontraron el licor, sino también botellas vacías listas para reenvasado y tapas de marcas de bebidas alcohólicas reconocidas.

“Gracias a la información ciudadana logramos llegar hasta ahí, realizar un allanamiento en compañía de la Fiscalía General de la Nación y lograr sacar de circulación estas botellas que iban a ser negociadas o vendidas en el marco del Festival Vallenato. Invitamos a toda la comunidad a que nos informen sobre estas actuaciones irregulares y delictivas para poder operar con contundencia”, manifestó el coronel Douglas Alejandro Restrepo Murillo, comandante del Departamento de Policía Cesar.

El encargado de revisar las 53 botellas de licor encontradas y valoradas comercialmente en más de 3 millones de pesos, fue un perito de policía judicial que determinó que los productos presentaban inconsistencias en su contenido, estampillas, y sellos de seguridad, además fueron halladas varias botellas de Whisky de una marca reconocida extranjera de bajo costo.

Al parecer, el modus operandi era de reenvasado debido a que los señalados delincuentes rendían con alcohol etílico las bebidas y utilizaban falsificaciones de estampillas del departamento para dar una apariencia de legalidad del producto, poniendo así en riesgo la salud de la comunidad.

Los detenidos, cuyas identidades no fueron reveladas por la Policía, deberán responder por los delitos de falsedad marcaria y corrupción de alimentos, productos o material profiláctico.

En el operativo participó la Policía Fiscal y Aduanera, Polfa, la Fiscalía y un perito en documentología de la Sijín.  

OTRO CASO

En hechos aislados, la Polfa también incautó más 42 mil gramos de marihuana que eran transportadas como encomienda por una reconocida empresa de mensajería a la altura del sector de Los Cauchos, ubicado sobre la vía que de Valledupar conduce al municipio de Bosconia.

El alucinógeno, avaluado en más de 60 millones de pesos, venía distribuido en unas 42 panelas que tenían cada una un peso aproximado de un kilo de estupefaciente.

Estos eran transportados desde Cali en un camión de una empresa de mensajería.