Las enfermedades cardiovasculares se han convertido en la primera causa de muerte en todos los países del mundo industrializado.
Las enfermedades cardiovasculares se han convertido en la primera causa de muerte en todos los países del mundo industrializado. Dentro de los factores de riesgo más importantes para la aparición de este tipo de enfermedades, la hipertensión arterial ocupa un sitio privilegiado, considerándose en la actualidad como uno de los mayores problemas de salud pública en el mundo entero.
El aumento de la presión arterial se ha considerado como un factor de riesgo muy importante para el desarrollo futuro de enfermedades vasculares como los eventos cerebrovasculares, cardiopatía coronaria, insuficiencia cardiaca o insuficiencia renal. La relación entre las cifras de presión arterial y el riesgo cardiovascular es muy estrecha, siendo así, a mayor aumento de la presión arterial, mayor el riesgo de padecer alguna otra enfermedad asociada o, incluso, la muerte.
La hipertensión arterial es un síndrome caracterizado por la elevación de la presión arterial y sus consecuencias. Solo en un 5 % de casos se encuentra una causa. En el resto de casos no se puede demostrar una etiología, pero se cree, cada día más, que se encuentra ligada a la genética.
La presión arterial menor o igual a 120/80 es ideal. Sin embargo, para las personas con diabetes o enfermedad renal, la presión arterial menor a 130/80 es considerada adecuada.
¿Por qué es peligrosa la hipertensión arterial?
Cuánto más alta es la tensión arterial, mayor es el riesgo de daño al corazón y a los vasos sanguíneos de órganos principales como el cerebro y los riñones. Si no se controla, la hipertensión puede provocar un infarto de miocardio, un ensanchamiento del corazón y, a la larga, una insuficiencia cardiaca. Los vasos sanguíneos pueden desarrollar protuberancias (aneurismas) y zonas débiles que los hacen más susceptibles de obstruirse y romperse. La tensión arterial puede ocasionar que la sangre se filtre en el cerebro y provocar un accidente cerebrovascular. La hipertensión también puede causar deficiencia renal y ceguera.
¿Corre riesgo de tener presión arterial alta?
Pacientes afroamericanos, hispanos y latinos tienen un mayor riesgo de padecer de presiones elevadas. Edades por encima de los 50 años, personas con sobrepeso, fumadores, diabéticos, enfermos renales y alcohólicos, conservan una estrecha relación con la hipertensión arterial.
¿Cómo se puede prevenir y tratar la hipertensión arterial?
Todos los adultos deberían medirse su tensión arterial periódicamente, ya que es importante conocer los valores. Si esta es elevada, debe asistir a su médico.
A algunas personas les basta con modificar su estilo de vida para controlar la tensión arterial, como abandonar el consumo de tabaco, adoptar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y evitar el uso nocivo del alcohol. La reducción de la ingesta de sal también es importante. A otras personas estos cambios les resultan insuficientes y necesitan tomar medicamentos con prescripción médica.
¨En estudios a gran escala y controlados un adecuado tratamiento antihipertensivo reduce cerca del 50 % de riesgo adicional de insuficiencia cardiaca, 30 a 40 % el riesgo de padecer eventos cerebrales vasculares y hasta una reducción del riesgo de 20 a 25 % de sufrir un infarto¨, comenta la médico internista, Tatiana Villareal
Las personas con hipertensión que también tienen un alto nivel de azúcar en la sangre, hipercolesterolemia (colesterol alto) o insuficiencia renal corren un riesgo incluso mayor de sufrir un infarto de miocardio o un accidente cerebrovascular. Por lo tanto, es importante hacerse revisiones periódicas de los niveles de azúcar, de colesterol en la sangre y del nivel de albúmina en la orina.
Pruebe estas medidas para controlar la presión arterial alta
* Siga un plan de alimentación sano.
* Alcance un peso saludable y manténgalo. Pregunte a su médico cómo alcanzar el peso adecuado para usted.
* Coma menos sal. Lea las etiquetas de los alimentos para conocer cuánto sodio (sal) come por día. Intente comer menos de 1.500 mg. de sodio por día.
* Haga ejercicios. Intente hacer actividad física todos los días. Camine lo más que pueda. ¡Todos los pasos cuentan!
* Deje de fumar.
* Tómese la presión arterial en su casa y mantenga un registro de las cifras.
RECOMENDACIONES PARA UNA BUENA TOMA DE PRESION ARTERIAL
* Antes de tomar la presión arterial: evite fumar, ingerir cafeína o hacer ejercicios por 30 minutos.
* Siéntese y relájese durante cinco minutos antes de tomar su presión arterial. Si no lo hace, la presión arterial puede no ser la verdadera.
* Utilice un tensiómetro del tamaño adecuado. Una manga que no se ajusta correctamente también puede dar una medida que no es la verdadera.
* Siéntese con ambos pies sobre el piso y la espalda apoyada en la silla.
* Envuelva la manga del tensiómetro dos dedos por encima del codo.
* Coloque el brazo sobre una mesa. La parte superior del brazo debe estar a la altura del corazón.
* No hable mientras se toma la presión arterial.
* Tómese la presión arterial y escriba los resultados. Espere unos minutos, tómesela otra vez en el otro brazo y escriba los resultados.
* Comparta los resultados con su médico en la próxima cita.
Tenga en cuenta que la presión arterial es una enfermedad silenciosa. En la mayoría de los casos la sintomatología se evidencia muchos años después o en ocasiones de emergencia. Una vez diagnosticada, consuma los medicamentos prescritos por su médico sin falta, mantenga una dieta saludable y asista a sus controles de forma periódica.
Por Iván Castro López*
Especial para EL PILÓN
Las enfermedades cardiovasculares se han convertido en la primera causa de muerte en todos los países del mundo industrializado.
Las enfermedades cardiovasculares se han convertido en la primera causa de muerte en todos los países del mundo industrializado. Dentro de los factores de riesgo más importantes para la aparición de este tipo de enfermedades, la hipertensión arterial ocupa un sitio privilegiado, considerándose en la actualidad como uno de los mayores problemas de salud pública en el mundo entero.
El aumento de la presión arterial se ha considerado como un factor de riesgo muy importante para el desarrollo futuro de enfermedades vasculares como los eventos cerebrovasculares, cardiopatía coronaria, insuficiencia cardiaca o insuficiencia renal. La relación entre las cifras de presión arterial y el riesgo cardiovascular es muy estrecha, siendo así, a mayor aumento de la presión arterial, mayor el riesgo de padecer alguna otra enfermedad asociada o, incluso, la muerte.
La hipertensión arterial es un síndrome caracterizado por la elevación de la presión arterial y sus consecuencias. Solo en un 5 % de casos se encuentra una causa. En el resto de casos no se puede demostrar una etiología, pero se cree, cada día más, que se encuentra ligada a la genética.
La presión arterial menor o igual a 120/80 es ideal. Sin embargo, para las personas con diabetes o enfermedad renal, la presión arterial menor a 130/80 es considerada adecuada.
¿Por qué es peligrosa la hipertensión arterial?
Cuánto más alta es la tensión arterial, mayor es el riesgo de daño al corazón y a los vasos sanguíneos de órganos principales como el cerebro y los riñones. Si no se controla, la hipertensión puede provocar un infarto de miocardio, un ensanchamiento del corazón y, a la larga, una insuficiencia cardiaca. Los vasos sanguíneos pueden desarrollar protuberancias (aneurismas) y zonas débiles que los hacen más susceptibles de obstruirse y romperse. La tensión arterial puede ocasionar que la sangre se filtre en el cerebro y provocar un accidente cerebrovascular. La hipertensión también puede causar deficiencia renal y ceguera.
¿Corre riesgo de tener presión arterial alta?
Pacientes afroamericanos, hispanos y latinos tienen un mayor riesgo de padecer de presiones elevadas. Edades por encima de los 50 años, personas con sobrepeso, fumadores, diabéticos, enfermos renales y alcohólicos, conservan una estrecha relación con la hipertensión arterial.
¿Cómo se puede prevenir y tratar la hipertensión arterial?
Todos los adultos deberían medirse su tensión arterial periódicamente, ya que es importante conocer los valores. Si esta es elevada, debe asistir a su médico.
A algunas personas les basta con modificar su estilo de vida para controlar la tensión arterial, como abandonar el consumo de tabaco, adoptar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y evitar el uso nocivo del alcohol. La reducción de la ingesta de sal también es importante. A otras personas estos cambios les resultan insuficientes y necesitan tomar medicamentos con prescripción médica.
¨En estudios a gran escala y controlados un adecuado tratamiento antihipertensivo reduce cerca del 50 % de riesgo adicional de insuficiencia cardiaca, 30 a 40 % el riesgo de padecer eventos cerebrales vasculares y hasta una reducción del riesgo de 20 a 25 % de sufrir un infarto¨, comenta la médico internista, Tatiana Villareal
Las personas con hipertensión que también tienen un alto nivel de azúcar en la sangre, hipercolesterolemia (colesterol alto) o insuficiencia renal corren un riesgo incluso mayor de sufrir un infarto de miocardio o un accidente cerebrovascular. Por lo tanto, es importante hacerse revisiones periódicas de los niveles de azúcar, de colesterol en la sangre y del nivel de albúmina en la orina.
Pruebe estas medidas para controlar la presión arterial alta
* Siga un plan de alimentación sano.
* Alcance un peso saludable y manténgalo. Pregunte a su médico cómo alcanzar el peso adecuado para usted.
* Coma menos sal. Lea las etiquetas de los alimentos para conocer cuánto sodio (sal) come por día. Intente comer menos de 1.500 mg. de sodio por día.
* Haga ejercicios. Intente hacer actividad física todos los días. Camine lo más que pueda. ¡Todos los pasos cuentan!
* Deje de fumar.
* Tómese la presión arterial en su casa y mantenga un registro de las cifras.
RECOMENDACIONES PARA UNA BUENA TOMA DE PRESION ARTERIAL
* Antes de tomar la presión arterial: evite fumar, ingerir cafeína o hacer ejercicios por 30 minutos.
* Siéntese y relájese durante cinco minutos antes de tomar su presión arterial. Si no lo hace, la presión arterial puede no ser la verdadera.
* Utilice un tensiómetro del tamaño adecuado. Una manga que no se ajusta correctamente también puede dar una medida que no es la verdadera.
* Siéntese con ambos pies sobre el piso y la espalda apoyada en la silla.
* Envuelva la manga del tensiómetro dos dedos por encima del codo.
* Coloque el brazo sobre una mesa. La parte superior del brazo debe estar a la altura del corazón.
* No hable mientras se toma la presión arterial.
* Tómese la presión arterial y escriba los resultados. Espere unos minutos, tómesela otra vez en el otro brazo y escriba los resultados.
* Comparta los resultados con su médico en la próxima cita.
Tenga en cuenta que la presión arterial es una enfermedad silenciosa. En la mayoría de los casos la sintomatología se evidencia muchos años después o en ocasiones de emergencia. Una vez diagnosticada, consuma los medicamentos prescritos por su médico sin falta, mantenga una dieta saludable y asista a sus controles de forma periódica.
Por Iván Castro López*
Especial para EL PILÓN