La acusación se hizo después de revelarse la victoria del chavismo en las elecciones regionales y municipales que se realizaron el pasado 21 de noviembre en Venezuela.
Tras la victoria de los partidos políticos afines al chavismo en Venezuela en las recientes elecciones regionales y municipales de ese país, el secretario de Estado de los Estados Unidos de América, Anthony Blinken, se refirió a este evento electoral afirmando que se privó a los venezolanos de un proceso “justo y libre”.
“El régimen de Maduro privó a los venezolanos una vez más de su derecho a participar en un proceso electoral libre y justo. Temeroso de la voz y el voto de los venezolanos, el régimen distorsionó enormemente el proceso para determinar el resultado de esta elección, mucho antes de que se emitieran los votos”, dijo el secretario de Estado.
Sin embargo, Estados Unidos felicitó a los partidos y votantes que decidieron participar en los comicios, “pese a sus fallos para preservar y luchar por un espacio democrático tan necesario”.
Durante estas elecciones, al gobierno de Nicolás Maduro la oposición le exigió observación internacional, por eso se permitió el acompañamiento de una amplia misión de la Unión Europea, y paneles de expertos de la ONU y el Centro Carter, tras años de resistencia, pero aún así Estados Unidos no reconoce los resultados.
Por otro lado, el gobierno estadounidense se convirtió en el principal aliado de Guaidó, quien además recibió cierto control de los recursos venezolanos en el extranjero. Otro medio centenar de países lo reconoce como presidente, aunque Maduro en la práctica tiene el control del país.
La acusación se hizo después de revelarse la victoria del chavismo en las elecciones regionales y municipales que se realizaron el pasado 21 de noviembre en Venezuela.
Tras la victoria de los partidos políticos afines al chavismo en Venezuela en las recientes elecciones regionales y municipales de ese país, el secretario de Estado de los Estados Unidos de América, Anthony Blinken, se refirió a este evento electoral afirmando que se privó a los venezolanos de un proceso “justo y libre”.
“El régimen de Maduro privó a los venezolanos una vez más de su derecho a participar en un proceso electoral libre y justo. Temeroso de la voz y el voto de los venezolanos, el régimen distorsionó enormemente el proceso para determinar el resultado de esta elección, mucho antes de que se emitieran los votos”, dijo el secretario de Estado.
Sin embargo, Estados Unidos felicitó a los partidos y votantes que decidieron participar en los comicios, “pese a sus fallos para preservar y luchar por un espacio democrático tan necesario”.
Durante estas elecciones, al gobierno de Nicolás Maduro la oposición le exigió observación internacional, por eso se permitió el acompañamiento de una amplia misión de la Unión Europea, y paneles de expertos de la ONU y el Centro Carter, tras años de resistencia, pero aún así Estados Unidos no reconoce los resultados.
Por otro lado, el gobierno estadounidense se convirtió en el principal aliado de Guaidó, quien además recibió cierto control de los recursos venezolanos en el extranjero. Otro medio centenar de países lo reconoce como presidente, aunque Maduro en la práctica tiene el control del país.