La situación ya ha pasado a manos de la Oficina de Planeación del municipio. Una de las luchas más fuertes que ha tenido la comunidad del barrio Villa Magdala ha sido por la construcción de un parque, puesto que durante años contaron con un espacio que pensaban destinado para este fin pero que no había […]
La situación ya ha pasado a manos de la Oficina de Planeación del municipio.
Una de las luchas más fuertes que ha tenido la comunidad del barrio Villa Magdala ha sido por la construcción de un parque, puesto que durante años contaron con un espacio que pensaban destinado para este fin pero que no había sido objeto de ninguna intervención.
Sin embargo, cuando la comunidad recibía la buena noticia de que se llevaría a cabo un proyecto para la adecuación de este escenario, un particular inició el proceso de reclamación del predio.
Frente a esto los líderes de la comunidad iniciaron un proceso para conservar el predio, algo que sin embargo todavía no se ha definido.
Sobre esto, el jefe de la Oficina de Planeación, Jorge Maestre, explicó que la información que tienen y que históricamente ha reposado en la Alcaldía de Valledupar es que hace muchos años se desarrolló un proyecto a través de una licencia de urbanización y construcción para el proyecto Villa Magdala; sin embargo, el constructor por motivos que desconocen tuvo que salir del país. Tras esto, el predio quedó expuesto y posteriormente hubo una invasión a las viviendas, a los predios, que con el tiempo se fue legalizando a través de prescripciones adquisitivas, tramitadas ante la justicia ordinaria.
Ahora cuando el municipio tenía la intención de hacer una inversión en ese sector, un particular que se adjudica como propias las áreas que estaban destinadas al uso público está haciendo la reclamación, soportado además en que no se ejecutó el proyecto y por tanto no existe la obligación de dejar el espacio para uso público.
“Esta situación no se resuelve por vía administrativa, esta situación tendrá que dirimirse finalmente entre la justicia ordinaria y tendrá que ser un juez quien determine toda vez que hay unos derechos por parte de un particular y una comunidad que siempre ha manifestado, siempre ha creído y ha hecho uso de esa área como área de uso público”, indicó el funcionario.
Entre tanto, aseguró que habrá dos salidas: la primera es que un juez decrete que efectivamente esta área ya pasó a dominio del municipio y que valide la licencia que inicialmente se realizó o que en su defecto que el municipio inicie las acciones establecidas en la Ley 388 de 1997 para la adquisición de predios por motivos de utilidad pública.
“Recordemos que es un motivo, utilidad pública, la adquisición de predios para la construcción de parques, zonas verdes, espacio público y equipamiento”, enfatizó, a la vez que manifestó que la administración debe agotar todas las gestiones administrativas. Así pues, en primer lugar buscarán tener un diálogo con los propietarios quienes a través de un apoderado han hecho valer sus derechos, toda vez que la administración está dispuesta a acogerse a las decisiones que la justicia determine. Además, sostuvo, que otra alternativa es que el municipio apropie los recursos para poder realizar una compra de acuerdo con lo establecido en la ley. Sin embargo, reveló que esta última opción la considera, teniendo en cuenta la situación financiera del municipio, inviable, pero recordó que están dispuestos a resolver y estudiar la factibilidad de realizar esa adquisición por motivo de utilidad pública, aclarando que hasta cuando un juez no determine lo contrario, el predio hoy es de propiedad privada.
“Reiteramos que la Oficina de Planeación ni el alcalde de Valledupar son los competentes para pronunciarse con respecto a una decisión que solamente le compete a un juez de la República como es la de dictaminar la validez de la licencia sin ejecutar o el municipio tampoco tiene la facultad hoy de decretar de hecho sin los procedimientos establecidos en la ley si un bien es considerado como espacio público o no”, agregó el funcionario.
Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
[email protected]
La situación ya ha pasado a manos de la Oficina de Planeación del municipio. Una de las luchas más fuertes que ha tenido la comunidad del barrio Villa Magdala ha sido por la construcción de un parque, puesto que durante años contaron con un espacio que pensaban destinado para este fin pero que no había […]
La situación ya ha pasado a manos de la Oficina de Planeación del municipio.
Una de las luchas más fuertes que ha tenido la comunidad del barrio Villa Magdala ha sido por la construcción de un parque, puesto que durante años contaron con un espacio que pensaban destinado para este fin pero que no había sido objeto de ninguna intervención.
Sin embargo, cuando la comunidad recibía la buena noticia de que se llevaría a cabo un proyecto para la adecuación de este escenario, un particular inició el proceso de reclamación del predio.
Frente a esto los líderes de la comunidad iniciaron un proceso para conservar el predio, algo que sin embargo todavía no se ha definido.
Sobre esto, el jefe de la Oficina de Planeación, Jorge Maestre, explicó que la información que tienen y que históricamente ha reposado en la Alcaldía de Valledupar es que hace muchos años se desarrolló un proyecto a través de una licencia de urbanización y construcción para el proyecto Villa Magdala; sin embargo, el constructor por motivos que desconocen tuvo que salir del país. Tras esto, el predio quedó expuesto y posteriormente hubo una invasión a las viviendas, a los predios, que con el tiempo se fue legalizando a través de prescripciones adquisitivas, tramitadas ante la justicia ordinaria.
Ahora cuando el municipio tenía la intención de hacer una inversión en ese sector, un particular que se adjudica como propias las áreas que estaban destinadas al uso público está haciendo la reclamación, soportado además en que no se ejecutó el proyecto y por tanto no existe la obligación de dejar el espacio para uso público.
“Esta situación no se resuelve por vía administrativa, esta situación tendrá que dirimirse finalmente entre la justicia ordinaria y tendrá que ser un juez quien determine toda vez que hay unos derechos por parte de un particular y una comunidad que siempre ha manifestado, siempre ha creído y ha hecho uso de esa área como área de uso público”, indicó el funcionario.
Entre tanto, aseguró que habrá dos salidas: la primera es que un juez decrete que efectivamente esta área ya pasó a dominio del municipio y que valide la licencia que inicialmente se realizó o que en su defecto que el municipio inicie las acciones establecidas en la Ley 388 de 1997 para la adquisición de predios por motivos de utilidad pública.
“Recordemos que es un motivo, utilidad pública, la adquisición de predios para la construcción de parques, zonas verdes, espacio público y equipamiento”, enfatizó, a la vez que manifestó que la administración debe agotar todas las gestiones administrativas. Así pues, en primer lugar buscarán tener un diálogo con los propietarios quienes a través de un apoderado han hecho valer sus derechos, toda vez que la administración está dispuesta a acogerse a las decisiones que la justicia determine. Además, sostuvo, que otra alternativa es que el municipio apropie los recursos para poder realizar una compra de acuerdo con lo establecido en la ley. Sin embargo, reveló que esta última opción la considera, teniendo en cuenta la situación financiera del municipio, inviable, pero recordó que están dispuestos a resolver y estudiar la factibilidad de realizar esa adquisición por motivo de utilidad pública, aclarando que hasta cuando un juez no determine lo contrario, el predio hoy es de propiedad privada.
“Reiteramos que la Oficina de Planeación ni el alcalde de Valledupar son los competentes para pronunciarse con respecto a una decisión que solamente le compete a un juez de la República como es la de dictaminar la validez de la licencia sin ejecutar o el municipio tampoco tiene la facultad hoy de decretar de hecho sin los procedimientos establecidos en la ley si un bien es considerado como espacio público o no”, agregó el funcionario.
Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
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