¿Llegará hasta el 29 de octubre? 

Voy hasta el 29 con mucho honor y mucho decoro. 

¿Es posible una unión entre alternativos? 

¿Quiénes son los alternativos? Camilo Quiroz viene de estar en el Gobierno pasado, no es alternativo; Christian José estuvo con los Gnecco; Álvaro Portilla estuvo con el partido de Robledo, que es antipetrista. Y a María Isabel Campo la está avalando el partido de Fico Gutiérrez.

¿Entonces quiénes son alternativos? 

Para nosotros los alternativos son aquellos que tienen un recorrido en la militancia de izquierda. 

Entonces hablemos de alternativos en lo regional, personas que hacen campaña para conquistar el voto de opinión 

Tenemos 9 candidatos a la Alcaldía de Valledupar, de los cuales 7 representan la derecha. Los que se dividen son ellos. Se quieren mostrar de centro, pero son de derecha. Son uribistas, duquistas, de la política tradicional, aunque no estén en partidos tradicionales a nivel regional. 

Entonces quedan solo tres alternativos: Álvaro Portilla, Ricardo Vives y mi persona. 

¿Y en la votación municipal influye ser de derecha o izquierda?

Solo en los pura sangre. En el grueso no influye tanto porque la gente no tiene claro quién es de izquierda y quién es de derecha. 

¿Cuántos votos cree que necesitará el próximo alcalde?

Alrededor de 50.000 votos. En las elecciones anteriores se ha polarizado en dos opciones. Esta vez hay una representación muy heterogénea y eso bajará la votación del que gane. 

Hablemos de propuestas… Empecemos con la seguridad.

Mi propuesta más importante es ‘Territorio seguro’. Me refiero a la seguridad en todos los aspectos de la vida. No solamente que no nos atraquen, sino acceder a vivienda, salud y educación. Lo dividí en tres ejes fundamentales. 

¿Cuál es el primero?

Atacar la corrupción.  Vamos a crear el portal de la transparencia. Cualquier persona podrá entrar y podrá ver en qué se están invirtiendo los recursos. Los vallenatos podrán ver cuántos contratos se adjudican, a quién se le adjudicó,  cómo se lo ganó y cuánto va ejecutando. 

Las asociaciones comunales administrarán el Programa de Alimentación Escolar, y el transporte escolar. Los panaderos serán los que proveerán los panes para el PAE. Eso se llama economía popular. Todos tendremos igualdad de condiciones. 

Dentro de ese portal tendremos un call center en el que se responderán todas las inquietudes de las comunidades. Funcionará las 24 horas del día. Las personas van al Sisbén a hacer colas para que les hagan la encuesta. Eso se puede hacer desde un computador. Pero ahora hay una barrera entre el gobernante y la gente. Lo viví como secretaria.

La segunda propuesta…

Combatir la inseguridad a través de la inversión social, enfocada en el proyecto de vida de los niños y adolescentes de este territorio. La edad promedio de los atracadores en Valledupar es de 14 a 22 años.

Necesitamos inversión social para que los jóvenes no caigan en esos ambientes de hostilidad. Tenemos que poner equipos de psicólogos y trabajadores sociales en los colegios públicos. El docente es el que se da cuenta de todos los problemas de los adolescentes y niños. 

También tenemos que fortalecer todas las escuelas deportivas para que se acabe la pedidera de uniformes en campaña. Tenemos que llegar a todos los sectores con eventos lúdicos. Cada comuna debe tener un espacio para formar a las personas. 

Pero también queremos construir un Centro Regulador de Urgencias Médicas, CRUE. Hay uno departamental pero es un elefante blanco. El CRUE es un observatorio de ciudad que monitorea la ciudad las 24 horas. Vigilaremos los puntos calientes en todo momento. 

¿Cómo funciona un CRUE bien estructurado?

Cuando atracan a alguien ponen en riesgo su vida. Si el CRUE de Valledupar funcionara, le podrían haber salvado la vida a muchas personas porque habría una reacción inmediata.

Pero el CRUE también atenderá delitos como la violencia de género, la violencia sexual, y una cantidad de delitos que pasan de agache porque las víctimas no tienen a quién llamar y cómo denunciar. 

Son delitos que no resuenan, por así decirlo…

El tema de abuso infantil no se habla en Valledupar. En la ciudad se registran 15 o 20 casos por mes, eso significa que día por medio hay un niño víctima de violencia sexual. Esa es una problemática que debemos atacar. 

Todos los candidatos quieren ganarse el voto de los mototaxistas: ¿cuál es la propuesta de Lina de Armas? 

A las motos las vamos a caracterizar. Los vamos a censar uno a uno. No se puede hacer un plan de reconversión laboral sin conocer qué saben hacer. Esto está relacionado con la seguridad porque con una caracterización sabremos quiénes son trabajadores y quiénes son los delincuentes. 

Así podremos quitar el decreto del parrillero hombre y el día sin moto, medidas que no han dado resultados.

En empleo, ¿cuál es la propuesta?

Vamos a estar en línea con el presidente Gustavo Petro. El Gobierno publicó un Plan de Turismo y nosotros nos vamos a acoger. Valledupar es una ciudad creativa y el turismo es lo que nos va a traer gente. 

Queremos invertir y hacer obras en los corregimientos para fomentar el tránsito de la gente de Valledupar a los corregimientos para que tengan vida y no sean pueblos del oeste. La idea es potencializar las fiestas de los corregimientos, que se conozcan a nivel nacional.  Tener una oficina en Bogotá promoviendo a Valledupar. Hay que reactivar ProValledupar para generar empleo y atraer dinero de afuera. 

Una vez seamos una ciudad atractiva vamos hacer alianzas estratégicas para que lleguen empresas de producción y que nuestros profesionales entren a trabajar. Decir que vamos a crear 120.000 empleos es populismo. Nosotros vamos a realizar un diagnóstico porque creemos en la planeación. 

El desempleo se ha reducido, pero hay demasiada informalidad… ¿Qué hacer? 

No vamos a perseguir a las personas que están el rebusque, pero sí se necesita un proceso de transición gradual para respetar el espacio público. Planteo cerrar el centro de la ciudad y hacer tres carriles. Uno para la venta formal  y otros dos para las ventas informales. 

Entonces organizaremos cubículos decentes y que tengan atractivos turísticos. En el primer año será lenta la reconversión laboral, dando una exoneración de impuestos de dos años. Pero la idea es que todos lleguen a la formalidad.

Por Deivis Caro