¡Buenos días queridos lectores! Hoy contaré mi experiencia en la Institución Educativa Ricardo González, uno de los tres megacolegios de Valledupar, donde estudian niños y jóvenes de los barrios Divino Niño, La Nevada, Villa Tayrona, Bellos Horizonte y las invasiones Los Guasimales, Altos de Pimienta, Bella Vista y Brisas de la Popa, en la zona noroccidental de la capital cesarense.

Esta institución cuenta con unos 1.480 estudiantes desde transición hasta el grado once y 56 profesores.
Su rector, Miguel Antonio Suárez Colmenares, me contó que esta institución está a cargo de la Diócesis de Valledupar, los alumnos son oficiales subsidiados, “es decir, no pagan un peso, se les da almuerzo y es jornada única; entran a las 6:15 de la mañana y salen a las 3:00 de la tarde”.

La semana cultural del mecolegio Ricardo González inició el pasado 4 de septiembre y finalizó ayer, 8 de septiembre. En esta semana los estudiantes, madres de familias y profesores participaron de concursos de canciones vallenatas, actos culturales, presentación de proyectos tecnológicos, danzas, talleres de artes plásticas y desfile de reinas ecológicas.

Me encantó la actitud de los estudiantes, los hermosos diseños ecológicos fueron lo mejor; los vestidos estaban hechos de sacos, checas, cabuyas y bolsas plásticas, la creatividad brilló en el megacolegio Ricardo González.

Esta institución ha tenido tres promociones, según cuenta su rector Miguel Suárez, el grado once se abrió hace cuatro años. “En el 2008, el Fondo Financiero de Desarrollo, Fonade, fue el encargado de construir la institución, pero sucedieron varios inconvenientes con la construcción. Entonces, setecientos estudiantes daban clases en la Iglesia El Señor de los Milagros del barrio La Nevada, luego iniciaron la construcción de la sede, pero el bachillerato siguió dando clases en la parroquia y en el 2011 terminaron el colegio y todos se mudaron”, dijo el rector.

A pesar de las tantas dificultades que ha tenido y aun tiene este colegio, ha recibido innumerables premios y reconocimientos por el desempeño académico, deportivo y por su banda cívica.