Ecos de la FELVA II. Desde aquel ‘Valle de Upar’ hasta aquel ‘Corral de Piedras’.
En este gran evento cultural y social, que fue la Segunda Feria del Libro de Valledupar, desde junio 6 a junio 9 del presente 2024, se pudo asimilar el inmenso trabajo realizado por sus organizadores, y el copioso acompañamiento del pueblo vallenato, conformado por muchos habitantes de la ciudad de Valledupar y de la región circundante del Departamento del Cesar, de La Guajira y del Magdalena; fue una tarea gigantesca de los gestores y bien acompañada por los numerosos asistentes, que han hecho notar la hermandad que emana de la identidad familiar de nuestros ancestros, que como lo dijera el escritor, historiador y compositor Tomás Darío Gutiérrez Hinojosa durante mi exposición de la Cuarta Edición de ‘Aquel Corral de Piedras’, afirmando que nosotros, los vallenatos, somos una sola familia que genéticamente recuerda al gran pueblo Chimila que abarcó una extensa región de lo que hoy es parte del Departamento del Cesar, parte de La Guajira y parte del Magdalena.
El Festival de la Leyenda Vallenata, abrió las puertas de la región vallenata al mundo, para mostrar nuestro folclor musical, y ahora, ‘La Feria del Libro en Valledupar’, complementa la obra, con ríos de conocimientos culturales y sociales, que enriquecen el conocimiento humano, y por ello me permito extender por este medio, la presentación de la Cuarta Edición de mi libro ‘Aquel Corral de Piedras’, ya que las dos horas que me permitieron, solamente fueron suficientes para hablar algo de nuestra genealogía ascendiente, o sea de nuestros antepasados, pero en mi repertorio quedó el tratado académico que condensé en 81 páginas en las dos últimas ediciones de mi libro, y como ilustración básica le informo al amigo lector, que el libro es de genealogías, basado en el apellido Daza de un vallenato emprendedor, como lo fue Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, nacido por el año 1700, tronco generacional de la gran parte de la familia Daza en la Costa Atlántica y del país, quien, en 1730, decidió desarrollar un hato ganadero, en la zona donde hoy está el poblado de Corral de Piedras-San Juan del Cesar, a orillas del río Cesar, donde inicialmente mandó a construir una casa y en su patio, hizo levantar muros de piedras superpuestas, conformando así un Corral de Piedras para retener el ganado, y con el pasar del tiempo, la gente distinguió esa posesión con el nombre de ‘el hato del Corral de Piedras’, y la gran cantidad de trabajadores que pastoreaban y lidiaban el ganado, fue conformando dos caseríos, separados por el río Cesar, que igualmente fueron nominados Corral de Piedras, y hoy, uno de ellos es distinguido con el nombre de Villa del Río.
La familia Daza se arraigó valduparense en cabeza de Don Luís Daza Rojas, exalcalde de Riohacha, acompañado de su hijo Diego Daza Guerrero, llegando por el año de 1610; los Daza, familia potentada, apoyada por Don Diego Guerrero, quien fuera suegro del primero y abuelo del segundo, pues él fue miembro de la Real Audiencia de Santodomingo, institución donde se decidía quienes serían los capitanes, coroneles, jueces, tesoreros, reales, regentes, alcaldes y gobernadores en las principales ciudades o provincias del ‘Virreinato de la Nueva Granada’, que así se denominó nuestra patria grande desde 1717. La migración de los Daza desde Riohacha hacia Valledupar, se dio por haber ocurrido el asesinato del tesorero real Don Pedro de Avendaño, lo cual fue tomado por Don Luís Daza Rojas como un preaviso para él y su hijo adulto, Diego Daza Guerrero.
Ahora repito que durante mi exposición, como autor del libro ‘Aquel Corral de Piedras’, el 7 de junio 2024, en la Universidad de Santander, solamente traté sobre la genealogía de algunos descendientes y ascendientes del matrimonio de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, haciendo alusión a los beneficios que se pueden obtener entre familiares que al día de hoy llevan otros apellidos, pero que a través de este libro ya conocen sus ascendencias abolengas. Charlamos sobre muchas personas que han obtenido la nacionalización española o portuguesa, gracias a las genealogías de que trata mi libro ‘Aquel Corral de Piedras’ sobre los descendientes de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo; pero no alcanzó el tiempo de dos horas, para tratar sobre lo atinente a la música de acordeón y su rica historia regional, contenidas en esta obra, donde se narra que los descendientes de Don Bartolomé Ramón Dazade Salas, han sido y son matriz generacional de acordeoneros, compositores y cantantes, tales como los siguientes:
Rafael Escalona Martínez (1925-2009), nacido en Patillal, compositor-maestro de la canción vallenata, hijo del coronel de la Guerra de los Mil Días, Don Manuel Clemente Escalona Labarcés y Doña Margoth Martínez Celedón, nieto de Don José Sebastián Martínez Daza, acordeonero, compositor y cantante, con Doña Manuela Celedón Daza, bisnieto de don José Sebastián Martínez de la Torre y Munive, Samario, y Doña Damiana Daza Daza, vallenata, bisnieto de Don José Antonio Daza Maestre, vallenato, y Doña Juana Francisca Daza Daza, vallenata, chozno de Don Juan Antonio Daza Bolaños, vallenato, con Doña Damiana Maestre Daza, vallenata, y del coronel Juan Salvador Anselmo Daza Bolaños, vallenato, con Doña Isabel María Daza Maestre, vallenata, bichozno de Don Bartolomé Ramón Daza Mendoza, vallenato, con Doña María Bernarda Bolaños Osorio, vallenata, y de Don Luís Gregorio Daza Mendoza con Doña Ana Joaquina Maestre Gutiérrez, vallenata, tatarachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y de Doña Ana Francisca
de Mendoza del Castrillo, samaria.
Los hermanos Zuleta, Emilianito, Poncho, Mario, Fabio y Héctor, acordeoneros, compositores y cantantes, hijos de Don Emiliano Antonio Zuleta Baquero y Doña Pureza del Carmen Díaz Daza ‘Carmen Díaz’, nietos de Don Tomás Daza Pichón y Doña María Francisca Díaz, bisnietos de Don Florentino Díaz Bermúdez, tataranietos del general Francisco Daniel Pichón, riohachero, con Doña Otilia Daza Suárez, villanuevera, choznos de Don José Francisco Daza Daza, de Corral de Piedras-La Hoyá, y Doña Manuela Suárez, de Villanueva, bichoznos de Don José Francisco Daza Maestre, vallenato, dueño de La Casa de Tejas de Corral de Piedras, y Doña Manuela Daza Maestre, de Corral de Piedras-La Hoyá, tatarachoznos de José Jacinto Daza Maestre, Vallenato, y Doña Nicolasa Maestre Gutiérrez, tetrachoznos de Don Luís Gregorio Daza Mendoza, vallenato, con Doña Ana Joaquina Maestre Gutiérrez, vallenata, pentachoznos de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, samaria.
Para seguir relacionando el apellido Daza con los sobresalientes del folclor vallenato, analicemos la genealogía del gran cantante Rafael Orozco Maestre, nacido en Becerril, hijo de Don Rafael Orozco Fernández, de Sambrano, y Doña Cristina Maestre Cuello, de Sambrano, nieto de Don Rafael Maestre Orozco y Doña Flor María Cuello Díaz, de Corral de Piedras, zona de La Hoyá, bisnieto de Don José María Maestre Mejía ‘Pepe Maestre’ con Doña Dolores Orozco Maestre y de Don Daniel Cuello Daza, de Corral de Piedras, con Doña
Virginia Díaz Bermúdez, de Corral de Piedras, tataranieto de Don Pedro José Orozco Daza con Doña Benigna Maestre Oñate, y de Don Valentín Cuello Manjarréz, de Corral de Piedras, con Doña Toribia Daza Maestre, de Corral de Piedras, y de Don Pedro Díaz Daza, de Corral de Piedras, con Doña Tomasa Bermúdez Orozco, chozno de Don Pedro José Orozco con Doña María Petronila Daza Acosta, bichozno de Don José Vicente Daza Murgas con Doña Faustina Acosta Daza, tatarachozno de Don Juan Cayetano Daza Mendoza con
Doña Catharina Josefa Murgas Ezquivel, y de Don Francisco Antonio de Acosta con Doña Antonia Francisca Daza Mendoza, tetrachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas con Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo.
Para finalizar con la ascendencia de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas en nuestro folclor vallenato, miremos la genealogía del incomparable cantautor Diomedes Díaz Maestre, hijo de Don Rafael María Díaz Cataño con Doña Elvira Maestre Hinojosa, nieto de Don Rafael Antonio Cataño Lacouture y Doña Avelina Díaz, bisnieto de Don Juan Félix Lacouture Acosta ‘Juancho’, de La Peña, y Doña Marcela Cataño, de La Peña, tataranieto de Don Hugues Lacouture Cevene y Doña Asunción Acosta Maestre, de La Peña, chozno de
Don Félix Acosta Daza y Doña Alejandrina Maestre Daza, bichozno de Don Gregorio Acosta Daza, el mayor, con Doña María Josefa Daza Bolaños, y de Don José Antonio Maestre Daza con Doña Ana Joaquina Daza Bolaños, tatarachozno de Don Francisco Antonio Acosta con Doña Antonia Francisca Daza Mendoza, y de Don Bartolomé Ramón Daza Mendoza con Doña María Bernarda Bolaños Osorio, y de Don Miguel Jerónimo Maestre Benjumea con
Doña Ana Francisca Mónica Daza Mendoza, tetrachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, samaria.
Entonces, por todo lo ilustrado, hay una deuda de reconocimiento con Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, formador de pueblos y distinguido abuelo del folclor vallenato, nacido en Valledupar hace unos 324 años, quien yacía olvidado en la memoria de los muertos, pero mi investigación en la Parroquia de Valledupar, cuando en el 1992, el padre Alfonso Aragón, secretario del Obispo, me facilitó mirar el Libro Primero de bautizos de Valledupar, y pude localizar la partida de bautizo de su hijo Luís Gregorio Daza Mendoza, nacido en Valledupar el 11 de marzo de 1736, y la de su hija Antonia Francisca Daza Mendoza, nacida en Valledupar el 2 de abril de 1738, pude retomar el nombre de Don Bartolomé Ramón Daza, el mayor, tal como lo distingo en la Primera Edición de mi libro emitida en febrero del año 2003, pues hasta esa fecha, no sabía su segundo apellido, que lo vine a conocer a través de un documento que está en el Archivo General de la Nación, donde su nieto Don Juan Antonio Daza Bolaños, para poder ser alcalde de Valledupar, presenta su árbol genealógico hasta sus bisabuelos, conjuntamente con el de su esposa Doña Damiana Maestre Daza, pues era necesario revisar en Bogotá, si el candidato y su esposa tenían ‘pureza de sangre’, es decir, para comprobar si eran descendientes de solamente sangre española.
Desde ya propongo al doctor Juan Carlos Quintero Castro, gestor de FELVA, que, en el próximo evento, el nombre de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, sea exaltado como ilustre emprendedor y como generador de un abolengo que es orgullo de miles de familias en la Costa Atlántica y en muchas partes de Colombia y hasta del mundo.
Por ahora, en nombre de los millones de descendientes de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, en el planeta Tierra, doy muchas gracias al super-abuelo, por habernos dado tanto.
Por: Jorge Alejandro González Cuello.
Ecos de la FELVA II. Desde aquel ‘Valle de Upar’ hasta aquel ‘Corral de Piedras’.
En este gran evento cultural y social, que fue la Segunda Feria del Libro de Valledupar, desde junio 6 a junio 9 del presente 2024, se pudo asimilar el inmenso trabajo realizado por sus organizadores, y el copioso acompañamiento del pueblo vallenato, conformado por muchos habitantes de la ciudad de Valledupar y de la región circundante del Departamento del Cesar, de La Guajira y del Magdalena; fue una tarea gigantesca de los gestores y bien acompañada por los numerosos asistentes, que han hecho notar la hermandad que emana de la identidad familiar de nuestros ancestros, que como lo dijera el escritor, historiador y compositor Tomás Darío Gutiérrez Hinojosa durante mi exposición de la Cuarta Edición de ‘Aquel Corral de Piedras’, afirmando que nosotros, los vallenatos, somos una sola familia que genéticamente recuerda al gran pueblo Chimila que abarcó una extensa región de lo que hoy es parte del Departamento del Cesar, parte de La Guajira y parte del Magdalena.
El Festival de la Leyenda Vallenata, abrió las puertas de la región vallenata al mundo, para mostrar nuestro folclor musical, y ahora, ‘La Feria del Libro en Valledupar’, complementa la obra, con ríos de conocimientos culturales y sociales, que enriquecen el conocimiento humano, y por ello me permito extender por este medio, la presentación de la Cuarta Edición de mi libro ‘Aquel Corral de Piedras’, ya que las dos horas que me permitieron, solamente fueron suficientes para hablar algo de nuestra genealogía ascendiente, o sea de nuestros antepasados, pero en mi repertorio quedó el tratado académico que condensé en 81 páginas en las dos últimas ediciones de mi libro, y como ilustración básica le informo al amigo lector, que el libro es de genealogías, basado en el apellido Daza de un vallenato emprendedor, como lo fue Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, nacido por el año 1700, tronco generacional de la gran parte de la familia Daza en la Costa Atlántica y del país, quien, en 1730, decidió desarrollar un hato ganadero, en la zona donde hoy está el poblado de Corral de Piedras-San Juan del Cesar, a orillas del río Cesar, donde inicialmente mandó a construir una casa y en su patio, hizo levantar muros de piedras superpuestas, conformando así un Corral de Piedras para retener el ganado, y con el pasar del tiempo, la gente distinguió esa posesión con el nombre de ‘el hato del Corral de Piedras’, y la gran cantidad de trabajadores que pastoreaban y lidiaban el ganado, fue conformando dos caseríos, separados por el río Cesar, que igualmente fueron nominados Corral de Piedras, y hoy, uno de ellos es distinguido con el nombre de Villa del Río.
La familia Daza se arraigó valduparense en cabeza de Don Luís Daza Rojas, exalcalde de Riohacha, acompañado de su hijo Diego Daza Guerrero, llegando por el año de 1610; los Daza, familia potentada, apoyada por Don Diego Guerrero, quien fuera suegro del primero y abuelo del segundo, pues él fue miembro de la Real Audiencia de Santodomingo, institución donde se decidía quienes serían los capitanes, coroneles, jueces, tesoreros, reales, regentes, alcaldes y gobernadores en las principales ciudades o provincias del ‘Virreinato de la Nueva Granada’, que así se denominó nuestra patria grande desde 1717. La migración de los Daza desde Riohacha hacia Valledupar, se dio por haber ocurrido el asesinato del tesorero real Don Pedro de Avendaño, lo cual fue tomado por Don Luís Daza Rojas como un preaviso para él y su hijo adulto, Diego Daza Guerrero.
Ahora repito que durante mi exposición, como autor del libro ‘Aquel Corral de Piedras’, el 7 de junio 2024, en la Universidad de Santander, solamente traté sobre la genealogía de algunos descendientes y ascendientes del matrimonio de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, haciendo alusión a los beneficios que se pueden obtener entre familiares que al día de hoy llevan otros apellidos, pero que a través de este libro ya conocen sus ascendencias abolengas. Charlamos sobre muchas personas que han obtenido la nacionalización española o portuguesa, gracias a las genealogías de que trata mi libro ‘Aquel Corral de Piedras’ sobre los descendientes de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo; pero no alcanzó el tiempo de dos horas, para tratar sobre lo atinente a la música de acordeón y su rica historia regional, contenidas en esta obra, donde se narra que los descendientes de Don Bartolomé Ramón Dazade Salas, han sido y son matriz generacional de acordeoneros, compositores y cantantes, tales como los siguientes:
Rafael Escalona Martínez (1925-2009), nacido en Patillal, compositor-maestro de la canción vallenata, hijo del coronel de la Guerra de los Mil Días, Don Manuel Clemente Escalona Labarcés y Doña Margoth Martínez Celedón, nieto de Don José Sebastián Martínez Daza, acordeonero, compositor y cantante, con Doña Manuela Celedón Daza, bisnieto de don José Sebastián Martínez de la Torre y Munive, Samario, y Doña Damiana Daza Daza, vallenata, bisnieto de Don José Antonio Daza Maestre, vallenato, y Doña Juana Francisca Daza Daza, vallenata, chozno de Don Juan Antonio Daza Bolaños, vallenato, con Doña Damiana Maestre Daza, vallenata, y del coronel Juan Salvador Anselmo Daza Bolaños, vallenato, con Doña Isabel María Daza Maestre, vallenata, bichozno de Don Bartolomé Ramón Daza Mendoza, vallenato, con Doña María Bernarda Bolaños Osorio, vallenata, y de Don Luís Gregorio Daza Mendoza con Doña Ana Joaquina Maestre Gutiérrez, vallenata, tatarachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y de Doña Ana Francisca
de Mendoza del Castrillo, samaria.
Los hermanos Zuleta, Emilianito, Poncho, Mario, Fabio y Héctor, acordeoneros, compositores y cantantes, hijos de Don Emiliano Antonio Zuleta Baquero y Doña Pureza del Carmen Díaz Daza ‘Carmen Díaz’, nietos de Don Tomás Daza Pichón y Doña María Francisca Díaz, bisnietos de Don Florentino Díaz Bermúdez, tataranietos del general Francisco Daniel Pichón, riohachero, con Doña Otilia Daza Suárez, villanuevera, choznos de Don José Francisco Daza Daza, de Corral de Piedras-La Hoyá, y Doña Manuela Suárez, de Villanueva, bichoznos de Don José Francisco Daza Maestre, vallenato, dueño de La Casa de Tejas de Corral de Piedras, y Doña Manuela Daza Maestre, de Corral de Piedras-La Hoyá, tatarachoznos de José Jacinto Daza Maestre, Vallenato, y Doña Nicolasa Maestre Gutiérrez, tetrachoznos de Don Luís Gregorio Daza Mendoza, vallenato, con Doña Ana Joaquina Maestre Gutiérrez, vallenata, pentachoznos de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, samaria.
Para seguir relacionando el apellido Daza con los sobresalientes del folclor vallenato, analicemos la genealogía del gran cantante Rafael Orozco Maestre, nacido en Becerril, hijo de Don Rafael Orozco Fernández, de Sambrano, y Doña Cristina Maestre Cuello, de Sambrano, nieto de Don Rafael Maestre Orozco y Doña Flor María Cuello Díaz, de Corral de Piedras, zona de La Hoyá, bisnieto de Don José María Maestre Mejía ‘Pepe Maestre’ con Doña Dolores Orozco Maestre y de Don Daniel Cuello Daza, de Corral de Piedras, con Doña
Virginia Díaz Bermúdez, de Corral de Piedras, tataranieto de Don Pedro José Orozco Daza con Doña Benigna Maestre Oñate, y de Don Valentín Cuello Manjarréz, de Corral de Piedras, con Doña Toribia Daza Maestre, de Corral de Piedras, y de Don Pedro Díaz Daza, de Corral de Piedras, con Doña Tomasa Bermúdez Orozco, chozno de Don Pedro José Orozco con Doña María Petronila Daza Acosta, bichozno de Don José Vicente Daza Murgas con Doña Faustina Acosta Daza, tatarachozno de Don Juan Cayetano Daza Mendoza con
Doña Catharina Josefa Murgas Ezquivel, y de Don Francisco Antonio de Acosta con Doña Antonia Francisca Daza Mendoza, tetrachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas con Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo.
Para finalizar con la ascendencia de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas en nuestro folclor vallenato, miremos la genealogía del incomparable cantautor Diomedes Díaz Maestre, hijo de Don Rafael María Díaz Cataño con Doña Elvira Maestre Hinojosa, nieto de Don Rafael Antonio Cataño Lacouture y Doña Avelina Díaz, bisnieto de Don Juan Félix Lacouture Acosta ‘Juancho’, de La Peña, y Doña Marcela Cataño, de La Peña, tataranieto de Don Hugues Lacouture Cevene y Doña Asunción Acosta Maestre, de La Peña, chozno de
Don Félix Acosta Daza y Doña Alejandrina Maestre Daza, bichozno de Don Gregorio Acosta Daza, el mayor, con Doña María Josefa Daza Bolaños, y de Don José Antonio Maestre Daza con Doña Ana Joaquina Daza Bolaños, tatarachozno de Don Francisco Antonio Acosta con Doña Antonia Francisca Daza Mendoza, y de Don Bartolomé Ramón Daza Mendoza con Doña María Bernarda Bolaños Osorio, y de Don Miguel Jerónimo Maestre Benjumea con
Doña Ana Francisca Mónica Daza Mendoza, tetrachozno de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, vallenato, y Doña Ana Francisca de Mendoza del Castrillo, samaria.
Entonces, por todo lo ilustrado, hay una deuda de reconocimiento con Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, formador de pueblos y distinguido abuelo del folclor vallenato, nacido en Valledupar hace unos 324 años, quien yacía olvidado en la memoria de los muertos, pero mi investigación en la Parroquia de Valledupar, cuando en el 1992, el padre Alfonso Aragón, secretario del Obispo, me facilitó mirar el Libro Primero de bautizos de Valledupar, y pude localizar la partida de bautizo de su hijo Luís Gregorio Daza Mendoza, nacido en Valledupar el 11 de marzo de 1736, y la de su hija Antonia Francisca Daza Mendoza, nacida en Valledupar el 2 de abril de 1738, pude retomar el nombre de Don Bartolomé Ramón Daza, el mayor, tal como lo distingo en la Primera Edición de mi libro emitida en febrero del año 2003, pues hasta esa fecha, no sabía su segundo apellido, que lo vine a conocer a través de un documento que está en el Archivo General de la Nación, donde su nieto Don Juan Antonio Daza Bolaños, para poder ser alcalde de Valledupar, presenta su árbol genealógico hasta sus bisabuelos, conjuntamente con el de su esposa Doña Damiana Maestre Daza, pues era necesario revisar en Bogotá, si el candidato y su esposa tenían ‘pureza de sangre’, es decir, para comprobar si eran descendientes de solamente sangre española.
Desde ya propongo al doctor Juan Carlos Quintero Castro, gestor de FELVA, que, en el próximo evento, el nombre de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, sea exaltado como ilustre emprendedor y como generador de un abolengo que es orgullo de miles de familias en la Costa Atlántica y en muchas partes de Colombia y hasta del mundo.
Por ahora, en nombre de los millones de descendientes de Don Bartolomé Ramón Daza de Salas, en el planeta Tierra, doy muchas gracias al super-abuelo, por habernos dado tanto.
Por: Jorge Alejandro González Cuello.