Por Abdel Martínez Pérez
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El rector de la Institución Educativa José Eugenio Martínez  de Valledupar, Rafael Murgas  Muñoz, expresó su desacuerdo por afirmaciones de algunos padres de familias en el sentido de que en el plantel educativo, varios estudiantes especiales no están asistiendo a las aulas de clases por el estado de desaseo en su parte locativa y de los baños, lo que en ocasiones les ha provocado que se enfermen.

“Es lógico que 20 baterías sanitarias para hombres e igual número para mujeres, que atienden una demanda de 3.664 alumnos, se tienen que ensuciar, sin descartar los fétidos olores por el mal uso de los mismos. Reconozco que, en verdad, las baterías sanitarias no pueden permanecer en las mejores condiciones higiénicas y menos para esta época de  lluvia que, con entrar y salir de estos baños, se enmugran”, dijo el rector.

Agregó que se requieren diez aseadoras y el aseo lo hacen dos mujeres; sin embargo, el colegio permanece limpio, porque todos colaboran para no dejar hojas, bolsas u otros desechos en el patio. 

De acuerdo con el rector, en ese colegio tienen alumnos  ciegos, sordos, con síndrome de Down y con otras deficiencias; este personal tiene profesores especiales. Además,  para que hagan sus necesidades, reciben el acompañamiento de sus mismos compañeros.

De manera, que es falso que ellos tengan un trato inhumano y responsabilizo a algunos padres de familias que tratan de enlodar el buen nombre del colegio.