Ante las altas temperaturas que han azotado al departamento del Cesar, el río Guatapurí ha sido uno de los principales afectados, por lo que es constante ver el bajo caudal que presenta esta fuente hídrica.

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Para el biólogo Miguel Ángel Sierra, el problema radica en la poca atención que se le ha prestado al páramo que es una parte vital para el rio Guatapurí.

“Pese a que en los últimos días ha estado lloviendo en la parte alta del rio Guatapurí, esto no es suficiente pues no está lloviendo con la fuerza que se esperaba y, pese a que el rio muestra su esplendor en cada llovizna, seguimos teniendo problemas con el páramo”, señaló Miguel Ángel Sierra.

La situación como la plantea el biólogo presenta un panorama desalentador, puesto que, según manifiesta, “el tiempo de vida que le queda al río Guatapurí es de dos años, posteriormente desaparecerá, no el cauce, pero ya no se podrá obtener agua”.

Por su parte, Jhon Valle Cuello, gerente de Corpocesar, señaló que ante la situación hay que tener paciencia ya que las lluvias están próximas a llegar, a pesar que para esta época del año debería llover. Sin embargo, el cambio climático ha hecho que las lluvias no lleguen en los tiempos estipulados.

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“Lo que está sucediendo con el bajo caudal del rio se debe al intenso verano, por ello nosotros (Corpocesar) es poco lo que podemos hacer para tratar de mitigar la situación. Otro de los puntos que nos preocupa es que se habían pronosticado lluvias para el mes de abril y ya entramos a mayo y no ha caído ni una gota, lo que nos da a entender que los pronósticos del IDEAM fallaron”, manifestó el gerente de Corpocesar, Jhon Valle.

Finalmente, el gerente de Corpocesar hizo un llamado a la ciudadanía en general a proteger el recurso hídrico y no desperdiciarlo para de esta forma alargar la vida del río Guatapurí. Por ejemplo, que no se esté desperdiciando el líquido en actividades innecesarias como lavado de vehículos.

Por: Robert Cadavid/ El Pilón