Una área ubicada en el barrio Garupal segunda etapa de Valledupar ha generado un conflicto entre la comunidad residente de este sector, que la reclama como área de cesión, y los cuatro propietarios que argumentan la propiedad sobre estos predios.

De acuerdo con varios vecinos del sector como Álvaro Buelvas, Carmina Campillo, Fidel Fuentes e Ismael Orozco, en los cerca de 37 años que llevan residiendo allí han mantenido una disputa cada vez que aparecen personas que reclaman la propiedad sobre estos predios que se extienden desde la carrera 19 C a la altura de la avenida Juventud hasta la glorieta ‘La Juana Lugan’ cercana a la Casa de los Abuelos. Consideran además que particulares se han adueñado y el Estado no ha hecho nada por lo cual hacen un llamado para que las autoridades tomen medidas al respecto y de hecho ya tramitaron un derecho de petición el pasado 14 de septiembre ante la Alcaldía reclamando, entre otras cosas, la construcción de un parque lineal que es lo que aseguran está proyectado para dicho lugar.

Frente a esta situación, Jorge Maestre, jefe de la Oficina de Planeación del municipio, reconoció que esta es una problemática que se ha venido presentando hace mucho tiempo en ese sector de la ciudad. Pero fue claro en que esta franja de terreno corresponde a unas áreas que el antiguo Inscredial; que tuvo a su cargo la ejecución del proyecto del barrio Garupal, cuando pasó a ser Inurbe y antes de su liquidación, fueron vendidas por el gerente de la época.

Por lo que actualmente se reconocen unos compradores de buena fe en una zona que históricamente había sido impedida para el desarrollo de las áreas porque en los planos del Plan de Ordenamiento Territorial se habían destinado como espacio verde y ya una vez con la existencia de propietarios que acreditaron su condición a través de certificados de libertad y tradición, y escrituras públicas cuentan con las facultades para realizar sus proyectos.

Además porque en la extensión del segundo POT (2015) y a raíz de las peticiones de los dueños a la administración anterior se quitó la limitación de uso y ya se permite la edificabilidad en estos predios.

“El municipio tenía dos caminos: primero realizar algún tipo de acción ante la justicia para anular esas compraventas pero eso nunca se hizo y segundo hacer la compra de esos predios para desarrollar algunos proyectos. Eso nunca ha sucedido”, aseguró Maestre.

De igual modo enfatizó en que todas las acciones que hagan los particulares, así sea un simple cerramiento, requieren de las autorizaciones de la Curaduría Urbana y a la fecha no se ha adelantado ningún proceso de este tipo.

Sobre si se ha adelantado alguna socialización con la comunidad para aclarar la situación de estos predios, el funcionario aseguró que aunque ya se ha explicado a algunos líderes, la comunidad insiste en que es espacio público. “Como administración estamos llamados a obedecer y acatar las decisiones administrativas y judiciales”, agregó.

Solfany Andrade es una de los cuatro propietarios de estos predios y manifestó que cuenta con toda la documentación en regla para hacer el reclamo de su terreno, algo que incluso fue reconocido por la administración municipal en el período pasado en una ocasión que instalaron una valla en el lugar. De igual manera aseguró que esto ha generado un mayor enfrentamiento porque a pesar de que los compradores de estas áreas cedieron una porción para que se adecuara la carretera, algunos residentes han tomado espacios que no les corresponden para construir por lo cual una vez se inicien obras en dicha zona quedaría anulada la vía de acceso en esta parte hacia el barrio.