Juventus triunfó por 2-1 en el Estadio Olímpico contra la Roma y se proclamó campeón de invierno de la Serie A italiana, al acabar la primera vuelta como líder, con dos puntos de ventaja sobre el Inter de Milán.

El empate 1-1 del conjunto milanés el sábado contra el Atalanta le entregaba a Juventus la oportunidad de hacerse con el liderato en solitario y los turineses la aprovecharon, al doblegar a Roma con goles del turco Merih Demiral y del portugués Cristiano Ronaldo, de penalti, antes que la Roma recortara distancias por medio del argentino Diego Perotti, también desde los once metros.

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Juventus, que llevó este domingo una equipación completamente blanca contra una Roma que estrenó una camiseta azul por primera vez en casa, encarriló su triunfo en los primeros diez minutos, en los que se hizo con una doble ventaja gracias al primer gol juventino de Demiral y a un penalti transformado por Cristiano.

Fue una gran alegría para Demiral, incorporado el pasado verano procedente del Sassuolo y que fue preferido por cuarto partido consecutivo al holandés Matthijs De Ligt, pagado por 80 millones de euros al Ajax, pero su partido se acabó al cuarto de hora a causa de una lesión en la rodilla.

Abandonó el campo poco después de que Cristiano marcara con seguridad una ingenua pena máxima concedida por Roma, con el francés Jordan Veretout que entregó el balón en el área al argentino Paulo Dybala y que el derribó claramente.

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CR7 encadenó su sexto duelo seguido marcando gol en la Serie A y suma 14 dianas, seis menos que el máximo artillero, Ciro Immobile, delantero del Lazio.

Se sintió cómodo Juventus en el campo ante una Roma nerviosa, cuyas dificultades se agudizaron a la media hora cuando Nicoló Zaniolo, su gran figura, fue sustituido en camilla entre lágrimas por una lesión de rodilla.

Sin embargo, los hombres del portugués Paulo Fonseca tiraron de orgullo en la reanudación y recortaron distancias gracias a un penalti otorgado a través del VAR y transformado por Perotti, intdesde los once metros (m.68).

El partido se volvió tenso, con ambos equipos que tuvieron grandes oportunidades para marcar. Juventus perdonó con un cabezazo de Cristiano acabando fuera y vio como el árbitro anulaba un gol al argentino Gonzalo Higuaín, saltado al campo en la reanudación por Dybala.

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Roma tuvo su mejor ocasión en el tiempo añadido con el bosnio Edin Dzeko, pero su disparo desde dentro del área fue despejado por una determinante intervención de De Ligt, que salvó el 2-1 final de Juventus y le dio el liderato liguero en solitario.

No fue suficiente el gran esfuerzo final para Roma, que perdió su segundo partido consecutivo y que fue alcanzado en la cuarta posición por el Atalanta.