Por Carlos Mario Jiménez  
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Breiner García Barrios, reside en el barrio Villa Maruámake, una población de estrato uno ubicada al suroccidente de Valledupar; los vecinos del sector lo consideran 'el emperador de la vida', por su sacrificio y constante lucha para salir adelante.  

El adolescente de 17 años, fue uno de los deportistas más destacados del Cesar en las Olimpiadas Iberoamericanas Fides – Fedes – Compensar, al conseguir tres medallas; dos en fútbol (una de oro y otra de plata) y una presea de oro en baloncesto. El deportista junto a sus 94 compañeros que hicieron parte de la delegación del departamento en las Fides, conforma una familia de cinco hermanos; tres hombres y dos mujeres. 

Al llegar al aeropuerto Alfonso López de Valledupar, EL PILÓN conversó a solas con el menor que presenta dificultad del aprendizaje específico, quien expresó en su vocablo, que es corto, “mi mamá no sabe que gané, apenas le voy a mostrar las medallas”. 

A pesar de contar con algunas dudas, en su pensamiento solo está llegar a ser como Michael Jordan, el basquetbolista de mayor nombre en la NBA, la Liga de Baloncesto Norteamericana y más importante del mundo. Por esa razón, Breiner estudia en el Instituto Departamental de Rehabilitación y Educación Especial del Cesar, Idreec, con sede en Valledupar. 

A las afueras de la sala de equipaje, lo esperaba con paciencia su mamá, Zaida Barrios, que llegó al sitio desde las 8:00 de la mañana (del domingo pasado); en primera instancia llegó un vuelo procedente de Bogotá, y las personas que esperaban a los deportistas del Cesar que ocuparon el segundo lugar de la tabla general de medallería en las Olimpiadas Fides se alertaron, pero al momento de bajar los pasajeros del avión, comprobaron que no eran los niños campeones del departamento. 

A las 10:03 de la mañana del domingo aterrizó el vuelo que trajo la segunda delegación de deportistas especiales del Cesar, de inmediato su progenitora se percató, esperó, y unos minutos más tarde observó a Breiner con tres medallas colgadas en su pecho; la emoción era total, miraba a dos de sus hijos menores y se sonreía, mientras Breiner saludaba por el vidrio que sirve como división entre los pasajeros y las personas que esperan. El encuentro fue emocionante, un abrazo entre madre e hijo, cerró la tan anhelada espera. 

EL PILÓN: ¿A quién le dedica el triunfo que obtuvo en Bogotá? 

Breiner García: A mi país, a mi mamá, a todos. Especial a mi papá Ángel García. 

EP: ¿De quién se acordó cuando ganó las medallas en las Olimpiadas Fides?

BG: De mi mamá… se la prometí. Yo le dije voy a ir a Bogotá pa' ve' si yo gano esa medalla y que sí, la gané. Me sentí muy bien. 

EP: ¿Qué significa ganar tres medallas en las Olimpiadas Especiales?

BG: Yo lo llevo aquí, aquí (señalaba su corazón). Yo sé de muchos juegos, de basquetbol, sé de todos. Quiero ser cómo Michael Jordan (risas)”. 

EP: ¿Qué le pedían los entrenadores antes de competir? 

BG: Que yo sabía jugar mucho, era un gran deportista y podía ganar la medalla. 

EP: ¿Ya habló con sus padres, me puede contar qué le dijeron?

BG: Ellos no saben que me gané tres medallas, apenas se las voy a mostrar a mi mamá. Vino a recibirme al aeropuerto. 

EP: Y sí ellos no saben nada, ¿Qué les va a decir ahora? 

BG: Que me las gané, espero sea una sorpresa para ellos.