Un particular caso se registró en el municipio de Curumaní cuando un grupo de estudiantes de la Institución Educativa San Isidro fueron trasladadas al hospital Cristian Moreno Pallares por presentar cuadros de alteración emocional y debilidad corporal al entrar en contacto con un tablero espiritual conocido como: Ouija.
Un particular caso se registró en el municipio de Curumaní cuando un grupo de estudiantes de la Institución Educativa San Isidro fueron trasladadas al hospital Cristian Moreno Pallares por presentar cuadros de alteración emocional y debilidad corporal al entrar en contacto con un tablero espiritual conocido como: Ouija.
Este tablero de madera que tiene alfabeto y números con el que, supuestamente, se establece contacto con espíritus fue el detonante para que ocho niñas cursantes de diferentes grados en la institución del centro del departamento fueran remitidas el pasado jueves en horas de la tarde a la Empresa Social del Estado, E.S.E., donde le realizaron asistencia debido a que presentaron síntomas de debilidad y alteración psicológica.
Según Shirley Florián, encargada del Departamento de Vigilancia y Salud Pública de la Alcaldía de Curumaní, dijo “este acontecimiento es primera vez que se vive en la zona y estamos muy alerta al respecto”.
A raíz de este escenario ‘paranormal’ la cual disparó la alarma en la administración municipal y las autoridades académicas de las instituciones educativas a fines de hacerle seguimiento al caso para evitar que se repitan situaciones similares que pongan en riesgo la integridad física y mental de otros estudiantes.
La profesional de la salud expresó que adelantan reuniones con diferentes colegios para socializar los daños que pueden generar en el comportamiento y en la conducta física este tipo de prácticas sobrenaturales.
“Adelantamos reuniones de seguimiento con los padres de las niñas afectadas para hacerle control psicológico y evitar que esto vuelva a ocurrir”, agregó Florián.
Florián indicó que luego de que las menores recibieran asistencia médica fueron asistidas por cuatro pastores cristianos especialistas en el manejo de este tipo de actos espirituales quienes tomaron control de las estudiantes logrando devolverlas a su estado normal producto de la supuesta alteración que les ocasionó el juego.
Por: Jorge Luis López / EL PILÓN
Un particular caso se registró en el municipio de Curumaní cuando un grupo de estudiantes de la Institución Educativa San Isidro fueron trasladadas al hospital Cristian Moreno Pallares por presentar cuadros de alteración emocional y debilidad corporal al entrar en contacto con un tablero espiritual conocido como: Ouija.
Un particular caso se registró en el municipio de Curumaní cuando un grupo de estudiantes de la Institución Educativa San Isidro fueron trasladadas al hospital Cristian Moreno Pallares por presentar cuadros de alteración emocional y debilidad corporal al entrar en contacto con un tablero espiritual conocido como: Ouija.
Este tablero de madera que tiene alfabeto y números con el que, supuestamente, se establece contacto con espíritus fue el detonante para que ocho niñas cursantes de diferentes grados en la institución del centro del departamento fueran remitidas el pasado jueves en horas de la tarde a la Empresa Social del Estado, E.S.E., donde le realizaron asistencia debido a que presentaron síntomas de debilidad y alteración psicológica.
Según Shirley Florián, encargada del Departamento de Vigilancia y Salud Pública de la Alcaldía de Curumaní, dijo “este acontecimiento es primera vez que se vive en la zona y estamos muy alerta al respecto”.
A raíz de este escenario ‘paranormal’ la cual disparó la alarma en la administración municipal y las autoridades académicas de las instituciones educativas a fines de hacerle seguimiento al caso para evitar que se repitan situaciones similares que pongan en riesgo la integridad física y mental de otros estudiantes.
La profesional de la salud expresó que adelantan reuniones con diferentes colegios para socializar los daños que pueden generar en el comportamiento y en la conducta física este tipo de prácticas sobrenaturales.
“Adelantamos reuniones de seguimiento con los padres de las niñas afectadas para hacerle control psicológico y evitar que esto vuelva a ocurrir”, agregó Florián.
Florián indicó que luego de que las menores recibieran asistencia médica fueron asistidas por cuatro pastores cristianos especialistas en el manejo de este tipo de actos espirituales quienes tomaron control de las estudiantes logrando devolverlas a su estado normal producto de la supuesta alteración que les ocasionó el juego.
Por: Jorge Luis López / EL PILÓN