Para Aseo del Norte, empresa filial de Interaseo la Responsabilidad Social Empresarial, es el eje fundamental para su puesta en funcionamiento en Valledupar.

Para la empresa la Responsabilidad Social corresponde a un comportamiento transparente y ético que contribuye a la transformación sostenible y generación de calidad de vida de los grupos de interés de la organización, propendiendo por las relaciones de confianza, fidelización, excelencia organizacional y la protección del medio ambiente

Entre los programas que maneja el área de Responsabilidad Social Empresarial de Aseo del Norte, se destaca la línea ‘Aprende con Nosotros’, un espacio de formación y capacitación para los usuarios, clientes, aliados y colaboradores, donde podrán adquirir conocimiento que le permitirán hacer uso de responsable del servicio de aseo, manejo adecuado de residuos sólidos, consumo responsable y en general contribuir al uso y ahorro eficiente de los recursos naturales.

En el Fomento del Desarrollo Social y Comunitario, la empresa maneja el trabajo enriquecedor y productivo es un elemento esencial en el desarrollo humano mejorando la calidad de vida de los colaboradores, hombres y mujeres, a los cuales les aporta bienestar social y crecimiento laboral promoviendo e invirtiendo en su crecimiento y desarrollo laboral y profesional.

“Vamos a fomentar a través de la educación a que los colaboradores crezcan en la empresa y tengan mejores oportunidades. Por lo tanto, hacemos convenios para que aquellos que no han terminado el bachillerato puedan culminarla. Este programa tiene seis años y hemos avanzado en la actualidad en firmar un contrato para que los colaboradores de vayan a la universidad y, de esta forma puedan crecer en la empresa”, dijo Lylybeth Aguirre, directora general de Responsabilidad Social del Grupo Interaseo.

Aguirre destacó también el fomento de la responsabilidad ambiental que través de la educación ambiental fortalecen los Proyectos Ambientales Escolares, PRAES. La responsabilidad ambiental es una condición previa para la supervivencia y prosperidad de los seres humanos, por tanto, la educación ambiental y la creación de capacidad son fundamentales para promover el desarrollo de estilos de vida sostenible. “Nosotros hemos llegado a estructurar huertas ensañándole a la gente a reutilizar los residuos orgánicos para realizar el abono y, en estos momentos tenemos una red de viveros comunitarios con el objetivo de un proyecto ambiental y productivo”, acotó Aguirre.