En septiembre del 2002, los paramilitares ingresaron al predio de *Octavio Parra y a los tres días de estadía, apartaron a su hijo y lo asesinaron. También saquearon todas sus pertenencias y se robaron su ganado. Su predio estaba ubicado en Guayacán, municipio de El Paso, Cesar. Allí tenía cosecha de pan coger y cría de ganado.

En la zona estaba presente el frente Mártires del Cacique Upar, al mando del exparamilitar Rodrigo Tovar Pupo, conocido con el alias de “Jorge 40” quien, a partir del año 2000, obtuvo el dominio del territorio por encontrarse en una zona estratégica para establecer un corredor de tránsito de armas y estupefacientes.

Varios jefes paramilitares de la zona les dijeron que no lo querían ver más por la zona y que vendieran el predio porque ya tenía comprador. El señor Parra vendió el terreno obligado a un tercero.

Ahora, gracias a una demanda la Sala Especializada en Restitución de Tierras del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Cartagena ordenó la devolución de su terreno: 52 hectáreas y 8.830 metros cuadrados de tierra llamado predios ‘Los Olivos’.

Además de la devolución de la tierra, el fallo ordena que las instituciones adscritas al Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (Snariv), se involucren al establecer programas y proyectos, y cumplir las políticas públicas que garanticen la restitución integral del humilde labriego y su familia.

Por eso, la Unidad de Restitución de Tierras invertirá recursos en la implementación de un proyecto productivo en el predio y prestará la asesoría técnica necesaria para el desarrollo de la idea.

El tribunal de restitución de tierras también dispuso que la familia beneficiada con la restitución sea incluida en programas de retorno, ayuda humanitaria, vivienda, alivio de pasivos del predio, acceso al sistema de protección social y generación de ingresos.
*Nombre cambiado por seguridad.

Por: DEIVIS CARO DAZA/ EL PILÓN
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