“Entreguen los celulares o los levantamos a plomo. No se vayan a dejar matar por un simple aparato de esos, apúrenle, porque estamos de prisa, pilas entreguen ya, no dejen que les disparemos”, les advirtieron los dos atracadores a los tres jóvenes que se encontraban sentados en la terraza de una vivienda de El Copey, donde chateaban, jugaban y veían videos. Los atracadores cumplieron su palabra al ver que no les entregaban lo que pedían, dispararon y uno de los jóvenes murió en el acto.

Evert Zamora Chamorro, padre del joven asesinado, Evert Iván Zamora Berdugo, dijo que a su hijo lo asesinaron porque no quiso entregar su celular.

Explicó que “Ellos en principio pensaban que se trataba de una broma, que era en juego lo que les estaban diciendo, que eso era en chanza y no era verdad lo que ellos estaban viviendo en esos momentos, e inclusive se echaron todos a reír, pero los hombres le insistieron que los iban a levantar a plomo si no cumplían sus exigencias.

Mi hijo estrelló la tablet contra el suelo cuando el ladrón trató de quitársela. Mi hijo forcejó con el parrillero al resistirse a entregar su celular, en vista de esa circunstancia, el conductor de la motocicleta se bajó, se acercó a donde estaba el parrillero discutiendo, apuntó con la pistola a mi hijo y le propinó un balazo a la altura de garganta, que le produjo la muerte de manera inmediata. Ellos se llevaron los celulares y en medio de la confusión, mi otro hijo que estaba allí también, no pudo identificar los rostros de los asesinos, ni las características de la motocicleta”.

Esta acción criminal se registró a las 8:00 de la noche del pasado martes en el barrio Camilo Torres del municipio de El Copey, Cesar, en un sector que está poco iluminado.

El desconsolado padre dijo que se encuentra muy apesadumbrado, incluso contó que decidió llevarse el cadáver de su hijo para su casa, porque en esos momentos estaba muy angustiado y no quería que le hicieran la necropsia, tras indicar que posteriormente aceptó que lo hicieran, porque sus familiares y amigos lo convencieron.

El cadáver fue trasladado hasta la morgue de Valledupar, dónde le practicaron la respectiva necropsia, posteriormente fue trasladado nuevamente a El Copey, donde hoy será sepultado en horas de la tarde.

“Yo lo que sí quiero es que se haga justicia, que la muerte de mi hijo no se quede impune, que haya celeridad en las investigaciones. También les pido a las autoridades que incrementen la vigilancia, para mayor seguridad de los copeyanos, debido a la oleada de atracos que se presentan en cualquier momento y lugar de la localidad. Allá, a cada momento se registran un atraco, inclusive a plena luz del día”, precisó.

Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN