Sin ser brillante, Valledupar Fútbol Club derrotó 1-0 ayer a un aguerrido y exigente Real Cartagena, que mereció un mejor resultado en el gramado del Estadio Armando Maestre Pavajeau.

Un gol de penal del atacante Juan Diego Herazo fue suficiente para que el equipo ‘verdiblanco’ sumara su segunda victoria en línea en el Torneo Águila, ante un equipo ‘heroico’ que lo intentó, pero la recompensa nunca llegó.

Leonardo Lázaro tuvo la primera opción de gol del partido cuando el reloj marcaba el minuto dos. El atacante quedó sólo frente al arquero, quiso buscar su perfil, sin embargo su remate encontró la pierna de un defensa del Valledupar.

Sólo a los 15 minutos, los locales tuvieron el primer acercamiento a predios del arquero Luis Vásquez, cuando el atacante Juan Diego Herazo quiso pivotear de espalda un balón en el área, pero fue desestabilizado por un defensa visitante y el ‘hombre de negro’ señaló el punto blanco de penal. El mismo afectado cobró fuerte y al centro para decretar el 1-0 que a la postre fue definitivo.

Real Cartagena se quedó sin argumentos, mientras que Valledupar se tomó mayor confianza en la cancha. Leonardo Lázaro y Miguel Murillo fueron los que más se asomaron al arco de Sebastián Duque, pero con poco riesgo.

Poco trabajo para ambos arqueros. No hubo exigencias a fondo en unos primeros 45 con pocas opciones de gol. Sin embargo, antes del descanso, Carlos Oñate se filtró por izquierda, sirvió a Boyacá, quien remató fuerte pero lejos del arco cartagenero. Sin hacer mucho, Valledupar se fue al camerino con la victoria parcial.

Para el complemento, los ‘auriverdes’ hicieron su primer cambio; Jaime Silva salió del terreno de juego e ingresó Kevin Lugo para oxigenar la zona de medio campo del Real Cartagena. A los 49 Camilo Ceballos estuvo cerca de igualar las acciones en un golpe de cabeza después de un tiro de esquina.

Los dirigidos por Marcos Indaburo salieron ‘enchufados’ y le dieron mayor trato a la pelota de mitad de cancha hacia arriba. Los argumentos ofensivos aparecieron y con el pie en el acelerador, se volcaron a terreno vallenato. Yeiner Acevedo apareció más en la labor creativa del equipo de la visita.

A los 56, Valledupar volvió a generar peligro en los botines de Juan Diego Herazo, quien recepcionó un balón por derecha, gano terreno, pero su remate pegó en la parte posterior de la malla.

El equipo de Nilton Bernal poco a poco fue perdiendo ideas en la zona de volantes. Odacir Pérez poco apareció en el juego y no fue el hombre que tuvo un brillante partido, tal como lo hizo en el choque ante Unión Magdalena en la primera fecha. Incluso fue sustituido para darle paso a Carlos Carranza. Luego Juan Moreno ingresó por Carlos Oñate.

Moreno le cambió la cara al ataque del Valledupar. Con su velocidad le devolvió la alegría a la zona ofensiva del cuadro local. Al minuto de estar en la cancha estuvo a punto de aumentar el marcador, en una jugada colectiva, pero su remate ‘besó’ el palo derecho.

A los 17, Jhon Pineda ingresó por Leonardo Lázaro. Ahí acertó el técnico Indaburo, porque el recién ingresado fue el hombre que comenzó a amargar la zaga del elenco cesarense. En dos oportunidades estuvo cerca de empatar el juego.

El partido se tornó de ida y vuelta. Mientras que en el Valledupar Juan Diego Herazo era el de mayor peligrosidad, a través del buen pivoteo con fortaleza, Real Cartagena contragolpeaba en busca del tanto de la igualdad, sin embargo, el tiempo se agotó y no le alcanzó para llevarse un mejor resultado de la capital del Cesar.

En dos juegos, los ‘verdiblancos’ acumulan seis puntos en el Torneo Águila, mientras que Real Cartagena se quedó con tres.

Nibaldo Bustamante/EL PILÓN