Las directivas de la Universidad Popular del Cesar, UPC, decidieron reactivar las clases de manera flexible desde el pasado miércoles dos de junio luego de una infructuosa mesa de trabajo con los estudiantes de la institución superior, debido a que las partes no pudieron reunirse en la mesa general que aborda los temas estructurales del alma máter.
De acuerdo con este claustro universitario, no se llegó a la mesa final porque los estudiantes informaron que las propuestas aprobadas en las mesas de garantía y por facultades serían socializadas en la Asamblea General Estudiantil para el “visto bueno”, cuando las iniciativas ya habían sido discutidas anteriormente.
La institución superior aseveró que en las dos mesas de trabajo hubo representantes de los estudiantes que estuvieron de acuerdo con ser los voceros de los jóvenes y posteriormente con la aprobación de las propuestas, por lo que una nueva socialización de lo ya aprobado produciría más demora en las negociaciones y retraso en la activación de las clases.
En ese sentido, el alma máter le dio un plazo a los jóvenes del 8 al 25 de junio para que asistan a las clases de manera virtual. En ese tiempo se desarrollarán el segundo y tercer corte académico del semestre bajo la flexibilidad y los docentes realizarán refuerzos de los contenidos para hacer las respectivas evaluaciones.
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El plantel aseveró que dicha decisión se debe a que hay un alto porcentaje de jóvenes que quieren continuar con las clases de manera virtual y no apoyan el cese de actividades académicas por medio de la toma de la institución superior, además de que consideran que las solicitudes para mejorar las condiciones de la universidad se pueden realizar sin que estén sujetas a las clases.
LOS ESTUDIANTES
Juan Nacimiento, coordinador de la Comisión de Derechos Humanos de la Universidad Popular del Cesar, señaló que los jóvenes rechazan que la institución superior haya reactivado las clases debido a que no fueron “tomadas en cuenta, una vez más, las peticiones de los estudiantes”.
“Debido a que en las mesas no se llegó a unas conclusiones claras y tampoco se dio la mesa general, la universidad a través del Consejo Académico tomó la determinación de levantar la suspensión de las clases desconociendo el paro estudiantil. Hasta el momento no se han comunicado con nosotros”, comentó Nacimiento.
El líder estudiantil acotó que a pesar de que la universidad reinició las actividades académicas los estudiantes seguirán con la toma de la institución superior hasta que la Asamblea Estudiantil determine lo contrario. Un grupo de jóvenes ha dormido las últimas semanas en las instalaciones de la UPC como mecanismo de presión hacia los directivos.
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¿QÚE SOLICITABAN?
De acuerdo con los estudiantes, en las mesas de trabajo le solicitaron a la universidad que no se tomara en consideración las inasistencias desde el inicio del paro nacional, que se les facilitara repetir las evaluaciones que se realizaron en los días que no asistieron a las clases y la posibilidad de cancelar las materias pérdidas por los días que los jóvenes no se conectaron.
También el seguimiento a unos casos, en los que presuntamente a docentes que apoyan el paro y el cese de las actividades académicas fueron víctimas de “persecuciones” por parte de los directivos de la institución superior.
Por otro lado, una investigación a aquellos profesores que evaluaron durante los días que el alma máter decidió suspender las actividades y que también tomaron la asistencia cuando esta no era necesaria. Por último, mejoras en los edificios de las facultades y en el desarrollo del contenido académico.
Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN
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