La comunicadora social y líder comunitaria Melitza Quintero, nacida en el barrio Cañahuate de Valledupar, visitó las instalaciones de EL PILÓN para hablar sobre su aspiración a la presidencia del Consejo Comunitario Afrodescendiente en el corregimiento Los Venados que se elegirá el próximo 7 de febrero.

Al Consejo Comunitario Manuel Salvador Suárez, que funciona hace seis años para honrar la memoria de este reconocido líder del corregimiento, es al que aspira la comunicadora. “Estos consejos se dieron en 1993 con la LEY 70. De acuerdo al territorio que venían siendo pueblo Afro, que eran colonizadores que arreaban ganado. Un grupo de educadores peleó por la constitución de este Consejo y fue así que se dio”, expresó Quintero.

La periodista también destacó la importancia de este Consejo y la situación interna de la misma: “Se me dio la iniciativa por la convocatoria abierta, donde yo vi que podía participar porque soy nativa afrodescendiente de ese corregimiento y que bueno sería ser la voz, ya que en el periodismo es poco lo que ejerzo. No pensé que mi nombre tuviera tanta aceptación y debido a ello se ha generado conflicto del tipo político, porque los Consejos Afrodescendientes están llamados a ser unos gestores ante el Gobierno Nacional para la consecución de recursos para adelantar proyectos comunitarios. Siendo que ellos tienen una responsabilidad grande que es la de velar por la territorialidad, o sea toda la zona donde uno pertenece. ¿Qué significa eso? Hay que pelear por las costumbres, por la cultura, porque se conserve todo aquello que hizo historia en ese corregimiento”.

A su vez expresó que el Gobierno Nacional tiene el deber de velar por las tierras ‘las sabanas’ que se ha ido invadiendo y construyendo: “La función del Consejo Afro en un sentido sesgado es pelear porque eso no ocurra, y además dentro del sector educativo, ellos (gobierno) manejan desde el fondo de comunidades negras un convenio con el ICTEC para los estudiantes que van a pregrado y también los que van a hacer especializaciones o maestrías”. El manejo de esas becas es a través de la presentación de un proyecto que cada interesado debe llevar con el aval del Consejo Afrodescendiente.

En este sentido, Quintero resaltó lo importante que es el cargo representativo de este Consejo y la razón del conflicto a su alrededor: “A mí de verdad lo que me mueve es el afecto. El querer trabajar por esas comunidades que están abandonadas por el alto número de drogadicción en los jóvenes, adolescentes embarazadas”.

También manifestó su preocupación sobre el consumo de sustancias alucinógenas y las pocas oportunidades de desarrollo que recién los jóvenes y madres solteras de la zona.

“Allá no hay oportunidades laborales, hay jóvenes que salen del colegio y quedan cruzando la calle porque muchas veces los papás no tienen cómo mandarlos a las universidades. No tienen la opción a una universidad pública porque también es costosa. La única que tenemos acá es la UPC y ahora que salió la Universidad Nacional, pero con programas que tal vez no llenan la expectativa de muchos jóvenes. Entonces ellos (los jóvenes) quedan en las cantinas jugando billar, consumiendo alcohol, y gente que llega de fuera a vender el alucinógeno. ¿Qué les toca hacer? Robar, porque no tienen control, son jóvenes que de pronto en el hogar no tienen base”, expresó la aspirante.

Sin embargo, así como hay problemas sociales, la gente de Los Venados también tiene otro tipo de aspiraciones: “Es un corregimiento que ha tenido mandatarios sobre salientes en la política, y por qué no, periodistas como yo”. Asimismo continuó diciendo que “son propuestas a nivel nacional que no son inalcanzables porque hay los recursos para ello, lo que hay es que gestionarlo. Trabajar por la gente que está allí. Me mueve es el beneficio colectivo”.

Daniela Minorta / EL PILÓN
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