El director de ‘Valledupar Cómo Vamos’, Miguel Villazón Blay,  se refirió a la urgencia de que las autoridades locales y la sociedad civil implementen estrategias que impulsen el crecimiento económico, y se establezcan acciones para enfrentar la crisis de pobreza en el municipio.

En el último análisis realizado entre el programa VCV y  el Centro de Estudios Socioeconómico CESORE, se estudia la situación de pobreza y se explica por qué Valledupar calificó como la segunda capital más pobre del país en 2023.

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“Los niveles de pobreza en Valledupar han alcanzado cifras alarmantes, demandando acciones inmediatas y efectivas. Aunque las tasas de pobreza monetaria y extrema no son las más altas del país, su crecimiento por encima del promedio nacional es motivo de preocupación”, indicó Villazón Blay.

Panorama preocupante

El informe del Dane sobre el 2023 marcó que Valledupar fue la segunda con mayor porcentaje de pobreza monetaria del país, solo superada por Quibdó (60,1%). La mitad de los vallenatos (49,8%) reciben menos de $448.300 al mes, lo necesario para comprar y acceder a servicios básicos como vivienda, alimentación, aseo, entre otros. 

Contexto: Valledupar, la segunda ciudad con mayor pobreza monetaria en Colombia

Contrario a la tendencia del país, en la capital mundial del vallenato aumentó la pobreza monetaria respecto al 2022 por el drástico incremento del costo de vida (inflación). Según Miguel Villazón Blay, la disminución del PIB departamental refleja un debilitamiento del sector minero, crucial para la economía local, sin un sustituto claro a corto plazo. Además, “las ayudas institucionales no están logrando el mismo impacto en la reducción de la pobreza que en otras ciudades”.

Villazón Blay sostiene que mejorar la focalización y la calidad de la información podría traducirse en transferencias monetarias más efectivas para los más necesitados. También es crucial revisar las variaciones del IPC en la ciudad, ya que el aumento de precios ha superado la tasa de crecimiento del IPC nacional, exacerbando la situación económica de los hogares.

“En este momento es crucial un enfoque colaborativo con el sector empresarial. Hay que identificar y apoyar a las empresas que generan mayor valor y así poder actuar como catalizador para su expansión. Proponemos una Misión de Empleo que establezca directrices para cubrir las necesidades de producción y medidas institucionales que fomenten la actividad empresarial”.

En resumen, Valledupar enfrenta un desafío que requiere un esfuerzo conjunto y coordinado para revertir la tendencia creciente de la pobreza y asegurar un futuro más próspero para sus habitantes.

Por Deivis Caro